La infección protésica es una de las complicaciones más graves de la cirugía vascular, y su tratamiento sigue siendo un desafío quirúrgico. Se han descrito buenos resultados utilizando la sustitución in situ por aloinjertos arteriales, pero su degeneración tardía puede dar lugar a complicaciones que requieran su corrección. Describimos el caso de una rotura y formación de pseudoaneurisma de un homoinjerto de la arteria ilíaca, tratado mediante corrección endoluminal con la exclusión completa e inmediata del saco sin complicaciones. Durante el seguimiento realizado a los 6 meses, la angiotomografía computerizada mostró la permeabilidad de la endoprótesis sin signos de fuga. Dos años y 6 meses después de la intervención, el paciente está vivo y se encuentra bien.
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