La telemedicina está revolucionando el campo de la cirugía. La telemonitorización y la telecirugía son dos de sus aplicaciones más prometedoras. Ambas son revolucionarias y pueden cambiar la forma de ver el manejo perioperatorio y la propia cirugía. Pueden permitir a los cirujanos realizar operaciones ayudando o supervisando a otros mediante la telementorización, favoreciendo la seguridad del paciente.
A pesar de los beneficios potenciales, quedan retos por superar antes de que se utilice de forma generalizada. La latencia en la transmisión de datos puede ser un problema, ya que un pequeño retraso en la transmisión puede afectar a la precisión de la intervención. Además, la telemedicina necesita una infraestructura tecnológica sofisticada y costosa, lo que puede limitar su implantación en algunos entornos. Aunque debemos trabajar en su desarrollo tanto tecnológico como de aspectos éticos o médico-legales, es una herramienta prometedora.
Telemedicine has revolutionized the field of surgery, with telemonitoring and telesurgery being 2 of its most promising applications. Telesurgery and telemonitoring are revolutionary applications that have the potential to change the way surgical operations are performed. These applications can allow surgeons to perform operations, enable surgeons to perform operations by assisting or supervising others through mentoring from a different location (telementoring).
Despite the potential benefits of telemedicine and telementoring, there are still challenges that must be overcome before they can be widely used in clinical practice. For example, latency in data transmission can be a problem in telemedicine, as even a small delay in data transmission can affect the accuracy of the operation. Additionally, a sophisticated and expensive technological infrastructure is required, which can limit their use in some clinical settings. Although we need to work on its development technologically, ethically and legally, it is a promising tool.