O-216 - EVALUACIÓN PREQUIRÚRGICA DE 216 BAJAS DE COMBATE EN AFGANISTÁN. ANÁLISIS DESCRIPTIVO
Hospital Militar Central Gómez Ulla, Madrid.
Objetivos: La evolución de un sistema de triaje y traumatológico (trauma care) racionalizado en los campos de operaciones, la introducción de un proceso de revisión por comités en el escenario de los hechos y la disponibilidad de personal especializado para recoger los datos de los heridos en combate, han mejorado el registro de datos y la investigación en tiempo real, en el lugar de los hechos.
Métodos: Análisis descriptivo de 216 bajas de combate en la región de Qala-i-now (Afganistán) durante el año 2012 del impacto de los dispositivos, apósitos o fármacos nuevos o mejorados sobre el tratamiento de los heridos, y el cambio de las directrices para las estrategias de clasificación y asistencia prehospitalarias. Se describen el uso de torniquetes, vendajes hemostáticos, toracostomía con aguja, analgesia y antibioterapia utilizada.
Resultados: La edad media del grupo fue 23,2 años, con extremos de 18 y 43. El 92,4% fueron de sexo masculino. El número de torniquetes empleados fue de 165 con un tiempo medio de uso de 86 (62-138) minutos desde su colocación hasta su llegada al ROLE-2 (atención hospitalaria en zona de operaciones). Retrospectivamente se ha considerado que en el 23,4% de las bajas no eran necesarios. El uso de vendajes hemostáticos (QuilClot) se realizó en el 78,3% de los pacientes. En 28 pacientes se realizó toracostomía con aguja por neumotórax a tensión. El uso de autoinyectores de morfina se utilizó en el 100% de los pacientes, con una media de 4,2 minutos (2-7) desde el inicio del traumatismo hasta su inyección. El uso del citrato de fentanilo sublingual se realizó en el 89,4% de los combatientes durante su traslado al hospital de campaña. El uso de antibióticos fue predominantemente carbapenémicos con utilización de imipenem y ertapenem en el 93% de los soldados atendidos con una media de 26 (18-37) minutos desde la lesión hasta su primera dosis durante el traslado de la baja de combate.
Conclusiones: Algunos autores han definido el actual tratamiento militar en ruta como ″no ideal″, sobre todo en un campo poco experimentado en el que el transporte consume personal y recursos valiosos. El sistema de evacuación médica dentro del campo de operaciones, aunque ha mejorado mucho respecto a conflictos anteriores, necesita perfeccionamientos esenciales para aumentar al máximo la atención de las víctimas durante el transporte secundario. Estos estudios retrospectivos permiten mejorar la asistencia al combatiente, prevenir la mortalidad y su traslado al campo de la medicina civil.