Introducción: El denosumab es un anticuerpo monoclonal que actúa como inhibidor del ligando RANK bloqueando la acción de los osteoclastos, actualmente indicado en pacientes con metástasis óseas. Sin embargo, la hipocalcemia se ha descrito como un efecto secundario grave asociado a su uso.

Métodos: Estudio descriptivo retrospectivo. Se revisan las historias clínicas de todos los pacientes con metástasis óseas en tratamiento con denosumab 120 mg entre los años 2018 y 2020 en nuestro centro. Se analiza la incidencia de hipocalcemia significativa (< 8 mg/dl) así como los posibles factores clínicos y analíticos que se relacionan con la misma. Análisis de datos con SPSS^® para Windows.

Resultados: n = 130; Edad 63,34 ± 10,07 años; 75,9% varones. Las neoplasias primarias fueron 28,6% pulmón, 21,4% riñón y vías urinarias, 3,6% mama, 32,1% próstata y 14,3% otros. Al 92,9% se les prescribió suplementos de calcio y vitamina D. El 23,1% desarrolló hipocalcemia, pero solo 2 pacientes (1,5%) precisaron ingreso. Los pacientes que desarrollaron hipocalcemia presentaban valores más elevados de fosfatasa alcalina (246 vs 146 U/L); GGT (120 vs 95 U/L) e índice de comorbilidad de Charlson (7,13 vs 6,54), p < 0,05. La malabsorción intestinal también se relacionó con el riesgo de hipocalcemia: un 75% de pacientes con malabsorción desarrollaron hipocalcemia vs 21,4% en el otro grupo, p < 0,05. No encontramos relación estadísticamente significativa entre el filtrado glomerular, el tipo de tumor, la edad o el sexo y el riesgo de hipocalcemia.

Conclusiones: En consonancia con lo observado en estudios previos, encontramos que un nivel elevado de fosfatasa alcalina antes de iniciar denosumab se asocia a un mayor riesgo de hipocalcemia. Estos pacientes, junto con aquellos con un mayor índice de comorbilidad y/o antecedente de malabsorción, deberían ser monitorizados cuidadosamente.