El diagnóstico de síndrome de intestino irritable (SII) se establece en base a criterios clínicos (Roma III) y tras la exclusión de patología prevalente. La investigación de la intolerancia a la fructosa puede explicar algunos de los síntomas que aparecen en estos pacientes. Así, realmente podríamos estar ante pacientes con una patología orgánica no diagnosticada. Esta es una entidad escasamente sospechada y cuestionada en estudios previos por su alta prevalencia (hasta un 46%) en sujetos sanos.
ObjetivosEstablecer la prevalencia de la intolerancia a la fructosa en pacientes con hipótesis diagnostica de síndrome de intestino irritable; Evaluar el impacto de la dieta sin fructosa en el índice sintomático.
Material y métodoSe planteó un estudio descriptivo-retrospectivo de los pacientes en los que se realizó el test de tolerancia a la fructosa con hidrógeno espirado (TFH) en el Hospital Costa del Sol entre Junio 2007 y Diciembre 2008. Para ello comparamos a los pacientes (grupo A) con un grupo control de sujetos sanos sin sintomatología de SII de similar edad y sexo (grupo B). Analizamos la edad, sexo, resultado del test y mejoría de la clínica y calidad de vida mediante encuesta dirigida.
ResultadosEl estudio incluyó 66 pacientes, 48 casos (72,7%) y 18 controles (27,3%), con edad media de 41,46 (DE=17,054) y 38,22 (DE=14,04). Respecto al sexo, en el grupo A el 70,8% (34) eran mujeres y en el grupo B el 50% (9).
En el grupo A la clínica más frecuentes fue: diarrea 72,3%, dolor abdominal 70,2%, distensión abdominal 51,1% y sensación nauseosa 17%.
Previa a la realización del TFH el grupo A fue sometido a distintas pruebas: colonoscopia 56,3%; gastroscopia 45,8%; ecografía abdominal 60,4%; despistaje de celiaquía 91,7%; test de intolerancia a la lactosa 71,7%, encuesta alimentaria dirigida 89,6%.
El resultado del TFH fue positivo (intolerancia) en el grupo A en el 60,4% y en el grupo B fue del 16,7%, con una p<0,02 y Odds Ratio=7,632.
El tiempo medio de seguimiento tras la dieta sin fructosa fue 5,15 meses. Se objetivo que el 72% de los pacientes presento mejoría significativa de los síntomas y de la calidad de vida en el 68% de los casos, siendo estas diferencias estadísticamente significativas.
ConclusionesLa prevalencia de la intolerancia a la fructosa en los pacientes catalogados como síndrome de intestino irritable es del 60,4% vs 16,7% en el grupo control; En el 72% de los casos con intolerancia a la fructosa hubo una mejoría clara de los síntomas con la dieta sin fructosa, mejorando la calidad de vida en el 68% de los casos.
