La asistencia de la mayoría de pacientes hipertensos de nuestro país se realiza exclusivamente en los centros de salud. Sin embargo, la investigación clínica sobre hipertensión arterial se ha desarrollado tradicionalmente en hospitales y unidades especializadas, con escasa participación de los profesionales de Atención Primaria. El grupo MAPA (monitorización ambulatoria de la presión arterial) nació en Madrid en 1993 con el objetivo de impulsar la colaboración entre Atención Primaria y especializada en el área cardiovascular. Desde entonces nuestro trabajo se ha dirigido a coordinar la asistencia que reciben los pacientes en ambos niveles asistenciales, actualizar nuestros conocimientos sobre riesgo cardiovascular y desarrollar proyectos de investigación y estudios acerca de la hipertensión arterial.
Nuestra actividad investigadora coincidió con la difusión de los dispositivos de MAPA, cuya utilidad clínica hemos evaluado en diferentes estudios. Los proyectos de investigación que hemos llevado a cabo responden a cuestiones de la consulta diaria. Por ejemplo: ¿cuáles son la frecuencia y características clínicas de la hipertensión de bata blanca? ¿Qué interés tienen la determinación de la microalbuminuria y la masa del ventrículo izquierdo en la estratificación del riesgo cardiovascular? ¿Qué profesional sanitario (el médico o la enfermera) debe tomar la presión arterial en la consulta de Atención Primaria? ¿Influyen las estaciones del año en las cifras de presión arterial ambulatoria? ¿Puede sustituir la medición domiciliaria a la MAPA en el control de los pacientes con hipertensión arterial?, etc.
Al cabo de 10 años de colaboración creemos que nuestro esfuerzo ha servido para aumentar la comunicación entre Atención Primaria y especializada, generar un conocimiento científico relevante y como consecuencia de lo anterior mejorar la atención de los pacientes hipertensos.
Most hypertensive patient care in our country is given exclusively in health care centers. However, clinical hypertension research has traditionally been carried out in hospitals and specialized units, with little participation from Primary Health Care professionals. The group MAPA (Ambulatory Blood Pressure Monitoring) was originated in 1993 in Madrid in order to foster cooperation between primary and specialized health care in the cardiovascular field. Since then, our work has attempted to: 1) coordinate care given to patients at both levels; 2) update knowledge regarding cardiovascular risk, and 3) develop research projects and studies regarding hypertension.
Our lines of research have coincided with a diversification of APBM equipment whose clinical utility we have evaluated in different studies. The research that we have carried out addresses routine clinical issues. E.g., what are the frequency and clinical characteristics of white coat hypertension? Of what interest are determinations of microalbuminuria and left ventricular mass in cardiovascular risk stratification? Which health care professional (doctor or nurse) should measure blood pressure in Primary Care offices? Do the seasons of the year have any effect on ambulatory blood pressure readings? Can home blood pressure monitoring substitute for APBM in the control of arterial hypertension patients?
After ten years of cooperation, we believe that our efforts have served to better communication between primary and specialized care entities, as well as to create a valid scientific concept upon which overall hypertensive care has been improved.