La mecanización del campo español posterior a 1950 se ha entendido tradicionalmente como un proceso de innovación inducida, consecuencia del éxodo rural que encareció la mano de obra. Por esta misma razón, se ha considerado que el proceso sólo despegó con fuerza durante la década de 1960. Este artículo resalta la importancia en la incorporación de tractores ya en la España de los años cincuenta, pese a la existencia de fuertes barreras administrativas para la adquisición de los mismos. Frente a la trascendencia otorgada habitualmente a la variación en los salarios agrarios, este trabajo destaca la negativa evolución de los precios relativos (en parte derivada de la política de precios franquista), como el estímulo principal para la mecanización durante el decenio de 1950. No obstante, las graves dificultades exteriores de la economía española obstaculizaron la adquisición de tractores, sometiéndola a un complejo entramado administrativo para el reparto de los equipos. Este artículo da cuenta de tal entramado, así como de la distinta capacidad de respuesta que mostraron las provincias españolas, en función de la habilidad de los agentes e instituciones para maniobrar en dicho escenario.
The mechanization of the Spanish countryside after 1950 has been traditionally understood as a process of induced innovation, a result of rural exodus which put up the price of labour. For this same reason, this process it has been thought to take off only during the 1960s. This article highlights the importance in the incorporation of tractors already in the fifties, despite the existence of strong administrative barriers for their acquisition. In contrast to the significance usually given to the change in agricultural wages, this work emphasizes the negative trend in relative prices (partly due to the Franco's regime price policy) as the principal stimulus for the Spanish mechanization during the decade of 1950. Nevertheless, the serious foreign difficulties of the Spanish economy hindered the purchase of tractors, subjecting it to an administrative complex network for the distribution of the equipment. This article explains such network, as well as the different capacity showed by the Spanish provinces, depending on the ability of actors and institutions to maneuver in that scenario.