Objetivos: Estudiar el consumo de legumbres y su relación con variables clínicas y riesgo cardiovascular (RCV) en una muestra de diabéticos de Toledo.

Metodología: Estudio epidemiológico transversal en población ≥ 18 años aleatorizada según tarjeta sanitaria (2011-2015). Se estudió el consumo de legumbres, < 5 raciones, de 5 a 8 raciones y ≥ 9 raciones al mes, mediante una encuesta alimentaria mediterránea, y su asociación variables clínicas: edad, glucemia, índice de masa corporal (IMC), hemoblobina glucosilada (HbA1c), y RCV (Framingham). Se realizó estadística descriptiva para estudiar las diferencias entre grupos y la medida de la magnitud del efecto (eta 2 parcial y ANOVA).

Resultados: Se incluyeron a 1.309 individuos, (edad media 48,9 ± 15,8 años, (55,0% mujeres). Tasa de respuesta global 36,3%. De ellos, 105 diabéticos (prevalencia 8,02%). El menor consumo de legumbres (< 5 raciones al mes versus 9 o más raciones al mes) se relaciona con menor glucemia basal (124,1 vs 136,5 mg/dl; p = 0,47), ligeramente más baja hemoglobina glucosilada (7,1 vs 7,4%; p = 0,34), mucho menor riesgo Framingham (12,4% vs 21,5%; p = 0,1), y mayor IMC (32,4 vs 29,6; p = 0,037). En todos estos parámetros, la magnitud de las diferencias entre los niveles de consumo de legumbres (eta cuadrado parcial) es pequeña, inferior a 0,15. La edad es similar en los niveles de consumo de legumbres por lo que no se considera como factor de confusión.

Conclusiones: Los diabéticos que consumen menos legumbres, tienen mejores índices de control glucémico y menor riesgo cardiovascular. Esta relación es paradójica ya que ensayos clínicos previos indican que el mayor consumo de legumbres contribuye a un mejor control glucémico y del riesgo cardiovascular. Una posible explicación es que los diabéticos que consumen más legumbres son también los más graves, que siguen con mayor fidelidad las dietas recomendadas.

Palabras clave: Dieta. Diabetes. Factores de riesgo.