Objetivos: Comprobar si se produce deprescripción farmacológica en las pautas de tratamiento de los pacientes nonagenarios frente a los octagenarios atendidos en 3 consultas de Atención Primaria. Comprobar diferencias entre clases de fármacos.

Metodología: Estudio descriptivo transversal. Ambito: Las 3 consultas de un centro de Atención Primaria semiurbano. Sujetos: los pacientes de 80 o más años asignados a las 3 consultas. Variables: tres grupos: > 80 años; 80-89 años y > 90 años. Estudiamos número total de fármacos, antihipertensivos, antiagregantes, anticoagulantes, estatinas, antidepresivos, benzodiacepinas/hipnóticos e inhibidores de la bomba de protones (IBP). Fuente de datos: registros de las historias clínicas informatizadas. Cálculos: medias y porcentajes.

Resultados: 220 pacientes: 32 de > 90 años. Media de fármacos: todos: 7,04; 80-89 años: 7,02; > 90 años: 7,34. Media de antihipertensivos: 1,65 (sin diferencias en las 3 franjas). Porcentajes de tratados (todos-80-90 a- > 90 a): antiagregantes: 41,8-42,5-31,2%; anticoagulantes: 12,7-11,2-21,9%; antiagregantes y/o anticoagulantes: 54,5-54,8-53,1%; estatinas: 50-54,8-21,9%; antidepresivos: 25-25,5-21,9%; benzodiacepinas/hipnóticos: 28,6-27,1-37,5%; IBP: 55,9-58-43,7%.

Conclusiones: El número de fármacos que se prescribe a los nonagenarios es incluso superior al que se prescribe a los octogenarios. No se dan diferencias en el número de antihipertensivos por paciente. Recetamos menos antiagregantes pero más anticoagulantes a los mayores de 90 años que a los pacientes de 80 a 89 años. Los mayores de 90 años toman menos estatinas, antidepresivos e IBPs pero más benzodiacepinas e hipnóticos.

Palabras clave: Deprescripción. Prescripción farmacológica. Geriatría. Atención al anciano.