Las metástasis hematógenas son la mayor causa de mortalidad en el cáncer de mama. Está documentado que una vez las células tumorales se diseminan el resultado es, generalmente, letal. Las células tumorales circulantes han sido consideradas por largo tiempo un reflejo de la agresividad de los tumores, y entre ellos uno de los más agresivos es el cáncer de mama metastásico. Los primeros resultados clínicos han permitido determinar una fuerte relación entre la detección y el número de las células tumorales circulantes, como un valor pronóstico y como marcador de la actividad antitumoral del tratamiento. El análisis inmunomagnético utilizando una nueva metodología permite determinar que un recuento de 5 células tumorales circulantes o más en 7,5ml de sangre, en cualquier fase de la enfermedad, se asocia a un mal pronóstico, y es predictivo de una supervivencia global más corta.
Hematogenous metastasis is the major cause of mortality in breast cancer. Evidence indicates that tumor cells escape from the primary tumor mass into the blood stream and that these disseminated cells are the source of increased lethality. Circulating or metastatic tumour cells have been considered as useful indicators of the aggressiveness of breast cancer tumours. The first clinical results obtained with such assays strongly suggest that in metastatic breast cancer, circulating tumour cells detection and enumeration can be used to estimate prognosis and may serve as an early marker to assess anti-tumour activity of a treatment. Immunomagnetic analysis using a new methodology, determine that a circulating tumour cells count of 5 or more per 7,5ml of blood, at any time during the course of the disease is associated with a poor prognosis and is predictive of shorter progression and overall survival.