Es prioritario identificar la existencia de desenlaces clínicos diferentes según el sexo con el fin de definir la mejor estrategia de revascularización a utilizar en la enfermedad coronaria: stents convencionales vs. medicados.
ObjetivoDeterminar si existen diferencias de género en cuanto a mortalidad, re-infarto, tasa de revascularización de la lesión o del vaso tratados al primero, sexto y décimosegundo mes, luego de la implantación de stent coronarios.
MetodologíaEstudio observacional, analítico, de tipo cohorte retrospectiva.
ResultadosSe incluyeron 2.500 pacientes, 41% de sexo femenino, con edad promedio de 66 años. El uso de stent convencionales fue de 57,8% en las mujeres y de 55% en los hombres, sin diferencias según el género. Las mujeres tenían más comorbilidades (hipertensión y diabetes). Se apreció mayor incidencia de infarto a treinta días en las mujeres con stent convencionales; sin embargo, los desenlaces clínicos fueron similares para hombres y mujeres con stents medicados. El subgrupo de mujeres diabéticas mostró igual comportamiento que el de los hombres.
ConclusiónLa revascularización con stent convencionales aumenta el re-infarto a treinta días en las mujeres; no obstante, esta diferencia no es significativa al año de seguimiento ni en las pacientes post-implante de stent medicado.
To identify the existence of different outcomes by gender in order to define the best revascularization strategy used in coronary artery disease: conventional stents vs. medicated stents, is a priority.
ObjectiveTo determine whether there are differences in gender in terms of mortality, re-infarction, revascularization rate of the lesion or vessel treated at the first, sixth and twelfth month after coronary stent implantation.
Methodsan observational, analytical, retrospective cohort study type.
Results2,500 patients, 41% female, mean age 66 years, were included. Use of conventional stents was 57.8% in women and 55% in men, with no differences by gender. Women had more comorbidities (hypertension and diabetes). A higher incidence of infarction at 30 days was observed in women with bare stents. However, clinical outcomes for men and women with medicated stents, were similar. The subgroup of diabetic women showed similar behavior as that of men.
ConclusionRevascularization with conventional stents increases reinfarction at thirty days in women; however, this difference is not significant at one year follow-up or in the female patients after medicated stent implantation.