El Parque Nacional Cumbres de Monterrey es un área natural protegida federal que colinda con el área metropolitana de la ciudad de Monterrey. Por su ubicación tiene una serie de amenazas para la conservación de los ecosistemas y la biodiversidad que alberga. Los cuerpos de agua superficiales y subterráneos son los más afectados por factores antropogénicos. Además, la información sobre su biota acuática es muy limitada. En este estudio se registraron 18 especies de crustáceos acuáticos y terrestres, las cuales habitan en el parque nacional o en áreas adyacentes a éste. Cinco corresponden a los branquiópodos, 10 son peracáridos y 3 a los decápodos. Los peracáridos acuáticos Sphaerolana karenae Rodríguez-Almaraz y Bowman, 1995 y Spelaeomysis villalobosi García-Garza, Rodríguez-Almaraz y Bowman, 1996 y el acocil regio Procambarus regiomontanus (Villalobos, 1954) son formas endémicas. Seis especies no nativas residen dentro y fuera de los límites del parque, de las cuales 5 son isópodos terrestres y la restante es el acocil rojo Procambarus clarkii (Girard, 1852). Se discute la distribución y el estado de conservación de todas las especies de macrocrustáceos.
The Cumbres National Park of Monterrey is a protected natural area by the federal government, which is adjacent to the metropolitan area of Monterrey, Mexico. This location has a number of threats to the conservation of ecosystems and biodiversity. The surface water and groundwater are most affected by anthropogenic factors. In addition, the knowledge of the aquatic biota of the park is very limited. In this study, 18 species of aquatic and terrestrial crustaceans living in or adjacent to the national park are recorded. Five species correspond to large branchiopods, 10 species are peracarids and 3 species are decapods. The peracarids Sphaerolana karenae Rodríguez-Almaraz y Bowman, 1995 and Spelaeomysis villalobosi García-Garza, Rodríguez-Almaraz y Bowman, 1996 and the crayfish Procambarus regiomontanus (Villalobos, 1954) are endemics. Six species are non-native in this protected natural area and adjacent areas, of which 5 are terrestrial isopods and the red crayfish Procambarus clarkii (Girard, 1852). The distribution and conservation status of all macrocrustaceans is discussed.
La diversidad biológica de los crustáceos se estima en más de 67 800 especies (Brusca y Brusca, 2003) y la mayor parte de esta biodiversidad (casi 45 000) corresponde a especies marinas (Felder et al., 2009). El resto de las especies (33%) son residentes en los continentes tanto en los ambientes terrestres como en los acuáticos, estos últimos viven cerca de las costas o tierra adentro, ya sea en estuarios, lagunas, ríos, arroyos, lagos, reservorios artificiales, humedales o charcas temporales. La situación del conocimiento biológico de los crustáceos mexicanos es más favorable en las formas marinas, en particular las de interés comercial. Por otra parte, las especies de aguas epicontinentales y terrestres son menos estudiadas. En México se han declarado alrededor de 127 áreas naturales protegidas (ANP) (Conanp, 2007-2012) y pocas especies de crustáceos han sido incluidas en los programas de conservación y protección de los recursos bióticos de las ANP. El Parque Nacional Cumbres de Monterrey (PNCM), en su programa de conservación y manejo registra 271 especies de artrópodos, sin mencionar a qué grupo pertenecen (Conanp, 2006). Probablemente, la mayor diversidad corresponde a los insectos, considerando la importancia económica y ecológica de éstos y la cierta facilidad de observación y recolección. Esta ANP federal colinda con el área metropolitana de la ciudad de Monterrey y su extensión es de 177 395 ha (Valdez-Tamez et al., 2004; Conanp, 2006). Por su ubicación tiene una serie de amenazas para la conservación de los ecosistemas y la biodiversidad que alberga. Los cuerpos de agua superficiales y subterráneos son los más afectados por factores antropogénicos (Pérez-Ortiz, 2012).
En este estudio se presentan datos de la distribución geográfica-ecológica y el estado de conservación de 18 especies de macrocrustáceos que residen en o son contiguas al PNCM. La mayor parte de la información sobre estos crustáceos fue generada por estudios de la Colección Carcinológica (UANL-FCB) de la Facultad de Ciencias Biológicas, UANL y de publicaciones sobre el tema.
Materiales y métodosÁrea de estudioEl PNCM está situado en el centro y oeste de Nuevo León que incluye a 8 municipios y corresponde a la parte norte de la sierra Madre Oriental (Valdez-Tamez et al., 2004; Conanp, 2006). La altitud varía de 600 hasta los 3 400 m snm. Por su situación geográfica el parque se ubica dentro de la región hidrológica del río Bravo-Conchos, y los cuerpos de agua superficiales más importantes que fluyen dentro o cerca del parque nacional, son los ríos: Santa Catarina, la Silla, San Juan y Ramos (Conanp, 2006). Además, la hidrología subterránea del PNCM incide parcialmente en 7 acuíferos (Pérez-Ortiz, 2012). Los tipos de vegetación presentes en el parque están correlacionados con la altitud, en las partes más bajas se localizan matorral micrófilo, matorral desértico rosetófilo, chaparral de encino arbustivo, matorral submontano, en las partes medias dominan bosques de encino y encino-pino; y en las partes más altas se encuentra bosque de coníferas (Valdez-Tamez et al., 2004; Conanp, 2006).
Base de datosEl material depositado en la Colección Carcinológica de la Facultad de Ciencias Biológicas, Universidad Autónoma de Nuevo León (UANLFCB) generó la mayor parte de la base de datos de macrocrustáceos residentes en o los límites del PNCM. Adicionalmente, estudios publicados sobre macrocrustáceos residentes en o de zonas adyacentes al parque nacional son citados. Cada registro de especie incluye el número de catálogo correspondiente de la colección UANLFCB y la distribución georreferenciada. La lista de especies sigue un orden filogenético y la clasificación taxonómica del subphylum Crustacea Brünnich, 1772 es de acuerdo con Martin y Davis (2001) y Ahyong et al. (2011).
ResultadosLista de especiesSe registraron 18 de especies de macrocrustáceos para el PNCM. Doce son acuáticas y 6 terrestres. Cinco corresponden a la clase Branchiopoda y 13 a la clase Malacostraca, divididas en el superorden Peracarida (Isopoda 8 especies, Amphipoda 1 y Mysida 1) y superorden Eucarida (Orden Decapoda 3). Del total de especies registradas, 3 son endémicas y 7 son no nativas de México. De una especie, Conilera stygia (Packard, 1900) se desconoce su estatus.
Clase Branchiopoda Latreille, 1817
Subclase Sarsostraca-Tasch, 1969
Orden Anostraca Sars, 1867
Familia Streptocephalidae Daday, 1910
Streptocephalus mackiniMoore, 1966 (Figs. 1D, 5)
Camarón duende.
Localidad tipo24.13 km al S de Arteaga, Coahuila, México.
Distribución geográficaArizona, Nuevo México y Texas, EUA; Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Sinaloa, Durango, Zacatecas, San Luis Potosí, Jalisco, Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, Hidalgo, Estado de México, Distrito Federal, Tlaxcala, Puebla y Morelos, México (Moore, 1966; Belk, 1973, 1975; Maeda-Martínez, 1991; Belk y Brtek, 1995).
Distribución en el PNCMGarcía: Estación Durazno (25º44’45” N, 100º31’46” O) (UANL-FCB-CR2502887, UANL-FCB-CR2502888, UANL-FCB-CR2502901, UANL-FCB-CR2502902, UANL-FCB-C2503769, UANL-FCB-C2503770, UANL-FCB-C2503771).
HábitatEsta especie reside en charcas y pozas temporales y semipermanentes de zonas áridas de los EUA y México (Yoon et al., 1992), pero también habita en climas templados y subtropicales de México (Maeda-Martínez, 1991). Smith (2001) mencionó que todos los filópodos residen en charcas primaverales y la desaparición repentina de poblaciones, en verano o principios de otoño, son gobernadas por las condiciones de temperatura.
ComentarioLa localidad denominada “Estación Durazno” fue destruida por actividades antropogénicas, actualmente S. mackini ya no es localizada en este sitio. Sin embargo, esta especie reside en otros sitios de Nuevo León y noreste de México (Maeda-Martínez, 1991; Maeda-Martínez et al., 2002a).
Familia Thamnocephalidae Simon, 1886
Thamnocephalus mexicanusNombre comúnCamarón duende.
Localidad tipoMóvano, municipio Francisco I. Madero, Coahuila, México.
Distribución geográficaEsta especie es conocida para Arizona y Texas, EUA y México, en los estados de Baja California, Sonora, Coahuila, Nuevo León, Sinaloa, Nayarit y Durango (Moore, 1966; Belk, 1975; Maeda-Martínez, 1991; Maeda-Martínez et al., 1997, 2002a).
Distribución en el PNCMGarcía: Estación Durazno (25º44’45” N, 100º31’46” O) (UANL-FCB-CR2602884, UANL-FCB-CR2602904).
HábitatComo en otros filópodos habita en charcas y pozas temporales y semipermanentes de zonas áridas de los EUA y México (Yoon et al., 1992), pero también reside en climas templados y subtropicales de México (Maeda-Martínez, 1991; Maeda-Martínez et al., 2002a).
ComentarioPreviamente se mencionó la desaparición de la localidad “Estación Durazno”. Esta especie al igual que S. mackini, ya no son localizadas en este sitio. Sin embargo, es encontrada en charcas temporales de Nuevo León (Cadereyta) y otros estados del norte de México (Maeda-Martínez et al., 2002a).
Thamnocephalus platyurusNombre comúnCamarón duende.
Localidad tipoEllis, Kansas, EUA
Distribución geográficaEste filópodo está ampliamente disperso en el oeste de los EUA (Belk, 1975; Eng et al., 1990); norte y centro de México (Baja California, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Durango, Zacatecas, San Luis Potosí y Guanajuato) (Belk, 1973; Belk y Brtek, 1995; Dodson y Silva-Briano, 1996; Maeda-Martínez, 1991; Maeda-Martínez et al., 1997).
Distribución en el PNCMGarcía: Estación Durazno (25º44’45” N, 100º31’46” O) (UANL-FCB-CR2602906, UANL-FCB-C2603774).
HábitatHabita en charcas y pozas temporales y semipermanentes de zonas áridas de los EUA y México (Yoon et al., 1992), pero también reside en climas templados y subtropicales de México (Maeda-Martínez, 1991; Maeda-Martínez et al., 2002a).
ComentarioAl igual que S. mackini, T. mexicanus y T. platyurus fueron recolectadas en una charca temporal de la localidad Estación Durazno, localidad extinta. Pero es encontrada en diferentes sitios del noreste de México (Maeda-Martínez et al., 2002a).
Subclase Phyllopoda Preuss, 1951
Orden Notostraca Sars, 1817
Familia Triopsidae Keilhack, 1909
TriopsNombre comúnCamarón renacuajo.
Localidad tipoEste camarón renacuajo ha sido encontrado en diferentes estados de México; sin embargo, está en discusión la validez de la especie T. longicaudatus en México.
Distribución geográficaLas poblaciones mexicanas presentan una distribución amplia que incluye a 17 estados del norte, centro y sur de México (Maeda-Martínez, 1991; Maeda-Martínez et al., 1997, 2002c).
Distribución en el PNCMMonterrey: río La Silla, Parque Canoas (25º37’00” N, 100º15’00” O) (UANLFCB-CR302899). Santiago: El Álamo (25º23’00” N, 100º07’00” O) (UANL-FCB-CR302898, UANL-FCBCR302897). García: estación Durazno (25º44’45” N, 100º31’46” O) (UANL-FCB-CR302890, UANL-FCBCR302889, UANL-FCB-CR302885, UANL-FCBCR302907, UANL-FCB-CR302908, UANL-FCBCR302909, UANL-FCB-C303776).
HábitatCharcas temporales (Maeda-Martínez, 1982; Maeda-Martínez et al., 1997). Triops es considerado un candidato potencial en el control biológico de larvas de mosquitos residentes en charcas temporales (Tietze y Mulla, 1991).
ComentarioEl camarón renacuajo Triops es citado como “sp.”, ya que de acuerdo con Maeda-Martínez et al. (2002c), Brendonck et al. (2007) y MacDonald III et al. (2011), existe un complejo de especies morfológicas y genéticas en Norteamérica. Además, mencionan que estas poblaciones podrían diferenciarse mediante comparaciones biométricas y moleculares. Adicionalmente, Obregón-Barboza (2007), con base en evidencias moleculares concluyó que en México este género está compuesto de varias especies.
Orden Diplostraca Gerstaecker, 1886
Familia Limnadiidae Baird, 1849
Eulimnadia texanaNombre comúnCamarón almeja.
Localidad tipoTexas, EUA
Distribución geográficaDistribuida ampliamente en el suroeste de los EUA (Belk, 1989; Sassaman, 1989). En México, está registrada para los estados de Baja California, Baja California Sur, Coahuila, Chihuahua, Durango, Nuevo León, Tamaulipas y Morelos (Maeda-Martínez, 1991; Maeda-Martínez et al., 1997, 2002b).
Distribución en el PNCMGarcía: Estación Durazno (25º44’45” N, 100º31’46” O) (UANL-FCB-CR802891, UANL-FCB- C803775).
HábitatCharcas temporales (Maeda-Martínez, 1982; Maeda-Martínez et al., 1997, 2002b).
ComentarioNo obstante que E. texana sólo es registrada en una localidad dentro del PNCM (Estación Durazno), el potencial de distribución en Nuevo León puede ser mayor, ya que es una especie de distribución amplia en el norte de México (Maeda-Martínez et al., 2002b).
Clase Malacostraca Latreille, 1802
Superorden Peracarida Calman, 1904
Orden Mysida Haworth, 1825
Familia Lepidomysidae Clarke, 1961
Spelaeomysis villalobosiGarcía-Garza, Rodríguez-Almaraz y Bowman, 1996 (Figs. 2A, 6)
Camarón zarigüeya.
Localidad tipoRancho Monte Carmelo, Cerralvo, Nuevo León, México.
Distribución geográficaRancho Monte Carmelo, Cerralvo y cerca del río Pilón, Montemorelos, Nuevo León (García-Garza et al., 1996).
Distribución en el PNCMMontemorelos: manantial cercano al río Pilón (25º10’44” N, 99º50’25” O) (UANL-FCB-CR31903087).
HábitatEstigobio.
ComentarioEste misidáceo fue encontrado de manera accidental en las localidades anotadas. En Cerralvo, los ejemplares fueron recolectados al sacar agua de una noria. En Montemorelos, esta especie fue recolectada accidentalmente junto con isópodos asélidos y Sphaerolana karenae al examinar agua que brotaba de un manantial. S. villalobosi es la tercera especie que se conoce del género en México.
Orden Isopoda Latreille, 1817
Suborden Cymothoida Wagële, 1989
Familia Cirolanidae Dana, 1852
Conilera stygiaNombre comúnCochinilla de agua.
Localidad tipoPoza manantial cercano a Monterrey, Nuevo León, México (Rioja, 1953).
Distribución geográficaEste cirolánido sólo está registrado en su localidad tipo.
Distribución en el PNCMMonterrey: la ubicación geográfica exacta no fue precisada.
HábitatAguas subterráneas, estigobio.
ComentarioEl género Conilera es exclusivamente marino. Desde la descripción de C. stygia por Packard (1900), no se han hecho hallazgos de esta especie en o cerca de su localidad tipo y tampoco se encuentra en colecciones científicas (Rocha-Ramírez et al., 2012). De acuerdo con Reddell (1981), este registro es dudoso para Monterrey y probablemente pertenezca al género Speocirolana, que incluye 11 especies en México (Rocha-Ramírez et al., 2012).
Sphaerolana karenaeRodríguez-Almaraz y Bowman, 1995 (Figs. 2B, 6)
Nombre comúnCochinilla de agua cavernícola.
Localidad tipoManantial adyacente al río Pilón, Montemorelos, Nuevo León.
Distribución geográficaManantial adyacente al río Pilón, Montemorelos y cueva de la Boca, Santiago, Nuevo León (Rodríguez-Almaraz y Bowman, 1995).
Distribución en el PNCMMontemorelos: charca adyacente al río Pilón (25º10’44” N, 99º50’25” O) (UANL-FCBCCRIC001). Santiago: cueva de la Boca (25º27’00” N, 100º06’00” O) (USNM139138).
HábitatAguas subterráneas, estigobio.
ComentarioEl género Sphaerolana está constituido de 3 especies, 2 fueron descritas para el valle de Cuatro Ciénegas, Coahuila (Cole y Minckley, 1970). Mientras que S. karenae sólo es conocida para Nuevo León (Rodríguez-Almaraz y Bowman, 1995) y dentro del PNCM. Estas cochinillas se enrollan con su cuerpo, como algunas especies de tierra y son totalmente albinas.
Suborden Oniscidea Latreille, 1802
Familia Armadillidiidae Brandt, 1833
Armadillidium vulgare(Latreille, 1804) (Figs. 3E, 7)
Cochinilla terrestre.
Localidad tipoDesconocida.
Distribución geográficaNativa en la región Mediterránea de Europa e introducida en todas las partes del mundo (cosmopolita), Canadá (Ontario), EUA (Columbia Británica), Brasil (Sao Paulo), Chile, Uruguay (Montevideo), Argentina (Buenos Aires) y Bermuda (Van Name, 1936; Leistikow y Wagele, 1999; Jass y Klausmeier, 2000; Schmalfuss, 2002, 2003). En México se registra para México, D. F. y Morelia, Michoacán (Van Name, 1936; Hatch, 1947; Jass y Klausmeier, 2004).
Distribución en el PNCMSan Nicolás: área urbana (25°43’48” N, 100°18’30” O), (25°44’17” N, 100°17’50” O) (UANL-FCB-CR). Monterrey: área urbana y parques públicos (25°15’34” N, 99°40’51” O), (25°24’37” N, 100°08’15” O), (25°44’11” N, 100°24’33” O) (UANLFCB-CR). Juárez: San Roque (25°38’49” N, 100°23’25” O), (24°49’11” N, 100°04’15” O), (25°39’04” N, 100°23’42” O) (UANL-FCB-CR). Escobedo: área urbana (25°48’24” N, 100°19’32” O) (UANL-FCB-CR). Santiago: paraje de los Osos (25°25’42” N, 100°08’57” O), El Cercado (25°40’06” N, 100°18’09” O) (UANL-FCBCR). San Pedro: Chipinque (25°40’47” N, 100°19’55” O) (UANL-FCB-CR). García: área urbana (25°48’07.12” N, 100°35’45.25” O), (25°47’51.20” N, 100°36’01.56” O), (25°47’55.69” N, 100°36’20.93” O) (UANL-FCB-CR). Santa Catarina: área urbana (25°39’26” N, 100°19’08” O) (25°47’46” N, 100°17’42” O), (25°25’34” N, 100°08’54” O) (UANL-FCB-CR). Allende: área urbana (25°38’45” N, 100°27’34” O), (25°47’11” N, 100°11’25” O) (UANL-FCB-CR). Guadalupe: área urbana (25°42’50” N, 100°11’08” O) (UANL-FCB-CR).
HábitatEsta especie es de amplia distribución y principalmente es localizada en áreas agrícolas (Mulaik, 1960). También habita en áreas silvestres bajo troncos de zonas boscosas, en áreas urbanas y suburbanas, viviendo oculta bajo piedras y entre hojarascas de jardines y plazas públicas (Van Name, 1936).
ComentarioDesde los estudios de Mulaik, no se conocen estudios taxonómicos y de distribución referentes a los isópodos terrestres del noreste de México. A. vulgare es la cochinilla más común de observar en áreas urbanas y silvestres en el PNCM.
Familia Armadillidae Brandt, 1831
Venezillo osorioi(Mulaik, 1960) (Figs. 3B, 7)
Nombre comúnCochinilla terrestre.
Localidad tipoCueva Acuitlapán, Guerrero.
Distribución geográficaMéxico. Cueva Acuitlapán, Guerrero; cueva del Palmito, Bustamante, Nuevo León (Mulaik, 1960; Leistikow y Wagele, 1999; Souza-Kury, 2000; Schmalfuss, 2002, 2003; Jass y Klausmeier, 2004).
Distribución en el PNCMSan Nicolás: área urbana (25°43’35” N, 100°17’48” O), (25°45’47” N, 100°21’46” O), (UANL-FCB-CR). Monterrey: área urbana (25°40’33” N, 100°18’09” O) (UANL-FCB-CR). Guadalupe: área urbana (25°43’05” N, 100°11’03” O) (UANL-FCB-CR). Escobedo: área urbana (25°48’33” N, 100°19’28” O), (25°47’04.00” N, 100°17’52.80” O) (UANL-FCB-CR). Apodaca: área urbana (25°46’00” N, 100°14’54” O), (25°46’54.27” N, 100°11’19.92” O). (UANL-FCB-CR). Santa Catarina, área urbana (25°40’58” N, 100°29’17” O), (25°39’30” N, 100°27’08” O), La Huasteca (25°38’57” N, 100°27’00” O) (UANL-FCB-CR).
HábitatVenezillo osorioi fue encontrada en la cueva de Acuitlapán, Guerrero y cueva del Palmito, Bustamante, Nuevo León (Mulaik, 1960; Leistikow y Wagele, 1999; Souza-Kury, 2000; Schmalfuss, 2002, 2003; Jass y Klausmeier, 2004). Probablemente, los especímenes recolectados fueron habitantes temporales o accidentales de las cuevas referidas.
ComentarioEsta especie fue recolectada en los últimos años por personal y estudiantes de la Colección Carcinológica -UANL, en ambientes urbanos, peridomésticos y silvestres del noreste de México. Con estos registros se amplía la distribución de V. osorioi después de más 50 años sin ser registrada.
Familia Porcellionidae Brandt, 1831
Porcellio laevisNombre comúnCochinilla terrestre.
Localidad tipoDesconocida, criptogénica.
Distribución geográficaNativa del sur de Europa y norte de África e introducida en todas partes del mundo (Leistikow y Wagele, 1999; Schmalfuss, 2003). Ampliamente distribuida en México, Centro y Sudamérica; suroeste de los Estados Unidos, sur de Ohio y proximidades de Nueva York (Van Name, 1936) y Texas (Jass y Klausmeier, 2001). Bermudas y las islas Galápagos (Hansen, 1897). En México se registra para Yucatán, la península de Baja California y Guerrero (Creaser, 1938; Mulaik, 1960; Souza-Kury, 2000; Jass y Klausmeier, 2004).
Distribución en el PNCMSan Nicolás: área urbana (25°43’54” N, 100°18’02” O), (25°42’57” N, 100°13’10” O), (25°44’52” N, 100°16’17” O), (24°45’16” N, 100°16’48” O) (UANL-FCB-CR). Monterrey: área urbana (25°40’06” N, 100°18’09” O), (25°39’26” N, 100°19’08” O), cerro de las Mitras (25°41’14” N, 100°24’41” O) (UANL-FCB-CR). Guadalupe: área urbana (25°40’06” N, 100°14’30” O), (25°41’04” N, 100°14’11” O), (25°39’25” N, 100°13’02” O) (UANL-FCB-CR). Escobedo: área urbana (25°46’52” N, 100°19’40” O), (25°48’26” N, 100°23’10” O) (UANL-FCB-CR). Apodaca: área urbana (25°45’51” N, 100°14’52” O), (25°47’11” N, 100°11’25” O), (25°46’20” N, 100°14’38” O) (UANL-FCB-CR). Santiago: área urbana (25°29’37” N, 100°11’11” O), El Cercado (25°24’16” N, 100°08’02” O), Cola de Caballo (25°23’38” N, 100°08’17” O) (UANL-FCB-CR). San Pedro: área urbana (25°38’49” N, 100°23’25” O), (25°39’04” N, 100°23’42” O), Chipinque (25°36’25” N, 100°21’12” O) (UANL-FCB-CR). Santa Catarina: cerro de las Mitras (25°41’38” N, 100°26’12” O), área urbana (25°41’58” N, 100°28’04” O) (UANL-FCB-CR). Allende: área urbana (25°17’19” N, 100°01’30” O), (25°16’34” N, 100°01’22” O) (UANL-FCB-CR).
HábitatPorcellio laevis aparentemente se ha establecido más en regiones templadas que en cálidas (Van Name, 1936). Asociada a cultivos agrícolas y pastizales (Mulaik, 1960), como plantíos de algodón (Richardson, 1905), jardines y terrenos abandonados (Harding y Sutton, 1985; Jass y Klausmeier, 2000), en áreas urbanas y suburbanas, bajo piedras.
ComentarioTanto P. laevis y A. vulgare son las cochinillas de tierra más frecuentes de observar dentro del Parque Nacional Cumbres. Sin embargo, la primera especie es menos tolerante a la pérdida de humedad de sus hábitats.
Porcellio scaberNombre comúnCochinilla terrestre.
Localidad tipoDesconocida.
Distribución geográficaNativa de Europa, excepto en el sureste, e introducida por el humano en gran parte del mundo, principalmente en áreas urbanas (Van Name, 1936; Schmalfuss, 2003). Al norte de los EUA (Van Name, 1936) y en el estado de Texas (Jass y Klausmeier, 2001), en Canadá, (Terranova), México, Antillas, Argentina (Buenos Aires), Brasil (Rio Grande do Sul), Chile (Isla Juan Fernández) (Leistikow y Wagele, 1999). En México se registra para los estados de Veracruz, Puebla y Michoacán (Jass y Klausmeier, 2004). Esta especie fue registrada previamente como P. montezumae por Saussure (1858), pero posteriormente Mulaik (1960) la asignó como P. scaber.
Distribución en el PNCMGuadalupe: área suburbana, bajo piedras y hojarasca en zona arbustiva de la Colonia Los Tanques (25°38’53” N, 100°13’10” O) (UANL-FCB-CR).
HábitatPorcellio scaber desde su introducción de Europa a América, ha invadido las edificaciones humanas, con mayor dispersión en zonas templadas que cálidas (Van Name, 1936). Reside en pastizales y jardines (Harding y Sutton, 1985; Jass y Klausmeier, 2000), bajo hojarascas e invernaderos (Richardson, 1905) y en tierras de cultivo (Mulaik, 1960).
ComentarioEl hallazgo de P. scaber en el municipio de Guadalupe, corresponde al primer registro de esta especie en el norte de México.
Porcellionides pruinosus(Brandt, 1833) (Figs. 3D, 7) Nombre común. Cochinilla terrestre.
Localidad tipoDesconocida, pero originaria del mediterráneo europeo.
Distribución geográficaDe origen mediterráneo, sinantrópica cosmopolita (Leistikow y Wagele, 1999; Schmalfuss, 2002, 2003). Ampliamente distribuida en América del Sur, América Central, México y las Antillas, Bermudas, islas Galápagos y Ecuador (Van Name, 1936). En la mayor parte de los EUA y Canadá (Van Name, 1936; Jass y Klausmeier, 2001). En México, P. pruinosus fue registrada en el Distrito Federal, Atepec cerca de Ixtlán (Hatch, 1947; Jass y Klausmeier, 2004) y Yucatán (Creaser, 1938; Jass y Klausmeier, 2004).
Distribución en el PNCMSan Nicolás: área urbana (25°43’55” N, 100°13’12” O), (24°45’16” N, 100°16’48” O) (UANL-FCB-CR). Guadalupe: área urbana (25°40’49” N, 100°09’54” O), (25°39’34” N, 100°12’52” O) (UANLFCB-CR). Monterrey: río Santa Catarina (25°39’50” N, 100°18’56” O) (UANL-FCB-CR). Santiago: área silvestre (25°26’12” N, 100°09’12” O) (UANL-FCBCR). Apodaca: área urbana (25°45’58” N, 100°14’41” O) (UANL-FCB-CR). Santa Catarina: área urbana (25°40’42” N, 100°28’05” O), La Huasteca (25°38’55” N, 100°27’38” O) (UANL-FCB-CR).
HábitatBajo piedras y hojarasca en zonas arbustivas de áreas urbanas (Van Name, 1936).
ComentarioPorcellionides pruinosus sólo era conocida en el centro y sureste de México, no obstante, que es común en los EUA. Los hallazgos de esta especie en los diferentes municipios de Nuevo León, dentro del PNCM, fueron hechos en áreas urbanas y suburbanas.
Agabiformius lentus(Budde-Lund, 1885) (Figs. 3C, 7)
Nombre comúnCochinilla terrestre.
Localidad tipoDesconocida.
Distribución geográficaNativa del sureste de Europa (Mediterráneo). Especie introducida en muchas regiones del nuevo mundo (Schmalfuss, 2002, 2003), como EUA, Haití, Bermuda, México, Venezuela, Brasil, Senegal y norte de África (Leistikow y Wagele, 1999). Los primeros registros en México de A. lentus fueron hacia Ixmiquilpan, Hidalgo y El Bañito, Ciudad Valles, San Luis Potosí (Mulaik, 1960) y en la cueva de los Lagos, Coahuila (Schultz, 1965; Jass y Klausmeier, 2004).
Distribución en el PNCMGuadalupe: La Pastora (25°40’03” N, 100°15’02” O) (UANL-FCB-CR). Santiago: laguna de Sánchez (25°20’41” N, 100°16’51” O) (UANL-FCB-CR). Apodaca: área urbana (25°48’27” N, 100°19’58” O) (UANL-FCB-CR).
HábitatAgabiformius lentus habita en áreas urbanas y suburbanas, viviendo oculta bajo piedras y entre hojarasca de jardines y plazas públicas (obs. pers.).
ComentarioEn el noreste de México, A. lentus sólo era conocida de Coahuila (Jass y Klausmeier, 2004). Este registro corresponde al primer hallazgo en Nuevo León y dentro del PNCM.
Orden Amphipoda Latreille, 1816
Suborden Gammaridea Latreille, 1802
Familia Hyalellidae Bulycheva, 1957
Hyalella aztecaNombre comúnPulga saltona.
Localidad tipoCisterna de Veracruz, México.
Distribución geográficaHyalella azteca, es considerada un complejo de especies que se distribuye en el norte, centro y norte de Sudamérica (González y Watling, 2002). En México, ha sido encontrada en los lagos del bosque de Chapultepec y Xochimilco, Distrito Federal; cenotes de Tulum y de Cobá, Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an, Quintana Roo; anillo de cenotes en Yucatán; Cuatro Ciénegas, Coahuila; lagos de Alchichica, Aljojuca, Atexcac, La Preciosa, Quechulac y Tecuitlapa y cuenca oriental, Puebla (Alcocer et al., 2002; Rocha-Ramírez et al., 2008).
Distribución en el PNCMSantiago: presa Rodrigo Gómez “La Boca” (25º24’45” N, 100º08’17” O) (UANL-FCBCR35002879, UANL-FCB-CR35002875, UANL-FCBCR35002862, UANL-FCB-CR35002860, UANL-FCBCR35002850, UANL-FCB-CR35004431), El Barro, “La Presita” (25º31’22” N, 100º12’10” O) (UANL-FCBCR35002853; UANL-FCB-CR35003581, UANL-FCBCR35003582, UANL-FCB-CR35003583, UANL-FCBCR35004131), río la Chueca (25º27’18” N, 100º09’36” O) (UANL-FCB-CR35004216). Monterrey: La Estanzuela (25º35’00” N, 100º13’00” O) (UANL-FCB-CR35004426). García: estación Durazno (25º44’45” N, 100º31’46” O) (UANL-FCB-CR35002865, UANL-FCB-CR35002859). Hábitat. Epigeo, en ambientes lénticos y lóticos (Rocha-Ramírez et al., 2008).
ComentarioLa descripción original de H. azteca hecha por Saussure (1858) fue pobre y las figuras no son claras, además, la información ecológica y genética sugiere que bajo el mismo nombre se encuentra agrupado un complejo de especies (González y Watling, 2002).
Orden Decapoda Latreille, 1802
Infraorden Caridea Dana, 1852
Familia Palaemonidae Rafinesque, 1815
Macrobrachium acanthurusLangostino, camarón de río o acamaya.
Localidad tipoEn las costas de Brasil (Williams, 1984).
Distribución geográficaCarolina del Norte, al sur de la Florida y a lo largo de la costa del golfo de México y Centroamérica, Rio Grande do Sul, Brasil, también Bahamas y las islas del Caribe (Holthuis, 1952; Williams, 1984). En México, M. acanthurus habita en diferentes tipos de cuerpos de agua de los estados de Tamaulipas, Nuevo León, San Luis Potosí, Veracruz, Tabasco, Campeche y Quintana Roo (Rodríguez-de la Cruz, 1965; Rodríguez-Almaraz y Campos, 1996; Bowles et al., 2000; Wicksten, 2005; Rodríguez-Almaraz y Muñiz-Martínez, 2008).
Distribución en el PNCM.Allende: río Ramos (25º16’00” N, 100º20’00” O) (UANL-FCB).
HábitatEsta especie puede tolerar agua salobre y dulce (Holthuis, 1952). Se encuentra en la bocas de los ríos y aguas estuarinas someras donde completa su desarrollo larval (Signoret y Brailovsky, 2004).
ComentarioLa recolección de M. acanthurus en el municipio de Allende se realizó en 1992, muestreos posteriores en ríos y arroyos de los municipios de Santiago, Allende y Montemorelos, no dieron resultados positivos en la captura de este langostino. A finales de la década de 1990 por comunicación personal con pescadores deportivos y habitantes cercanos a la presa Cerro Prieto y ríos de Linares, Nuevo León, mencionaron que anteriormente los langostinos eran capturados en abundancia. Visitas posteriores, no evidenciaron la presencia de esta especie.
Infraorden Astacidea Latreille, 1802
Familia Cambaridae Hobbs, 1942
Procambarus clarkiaNombre comúnAcocil rojo.
Localidad tipoEntre San Antonio y El Paso del Norte, Texas, EUA (Hobbs, Jr., 1989).
Distribución geográficaDel norte de Illinois y Ohio al condado de Escambia, Florida, EUA (Hobbs, Jr., 1989). Noreste de México a Teopisca, Chiapas (Álvarez et al., 2011). Múltiples introducciones alrededor del mundo, incluyendo África, Europa y parte de Asia (Rodríguez-Almaraz y Muñiz-Martínez, 2008). Estudios sobre el estado que guarda esta especie en México fueron llevados a cabo por Campos y Rodríguez-Almaraz (1992) y Rodríguez-Almaraz y Campos (1994), quienes concluyeron que la distribución de P. clarkii en el norte de México es natural y exótica.
Distribución en el PNCMSantiago: Cola de Caballo (25º21’00” N, 100º14’00” O) (UANL-FCB-C3102458, UANL-FCB-C1304509, UANL-FCB-C3102461, UANLFCB-C3102466, UANL-FCB-C3102470); Congregación la Boca (25º27’18” N, 100º05’25” O) (UANL-FCBC3104449). Monterrey: río La Silla, Parque Canoas (25º37’00” N, 100º15’00” O) (UANL-FCB-C3102465, UANL-FCB-C3102467, UANL-FCB-C3102468, UANL-FCB-C3102473, UANL-FCB-C3102475, UANL-FCB-C3102477, UANL-FCB-C3102478, UANL-FCB-C3102482, UANL-FCB-C3102485, UANLFCB-C3102535, UANL-FCB-C3102543, UANL-FCBC3103292, UANL-FCB-C3103292). Montemorelos: cabecera municipal (25º11’00” N, 99º49’00” O) (UANL-FCB-C3102520, UANL-FCB-C3102534, UANL-FCB-C3102537, UANL-FCB-C3102541, UANL-FCB-C3102548, UANL-FCB-C3102549, UANL-FCB-C3102560, UANL-FCB-C3104432, UANL-FCB-C3104435, UANL-FCB-C3104436, UANL-FCB-C3104437, ANL-FCB-C3104451).
Allende: cabecera municipal (25º17’00” N, 100º2’00” O) (UANL-FCB-C3102499, UANL-FCB-C3102500, UANL-FCB-C3102503, UANL-FCB-C3102504, UANL-FCB-C3102505, UANL-FCB-C3102506, UANL-FCB-C3102507, UANL-FCB-C3102508, UANL-FCB-C3102511, UANL-FCB-C3102513, UANLFCB-C3102514, UANL-FCB-C3102515, UANL-FCBC3102521, UANL-FCB-C3102565, UANL-FCBC3104453, UANL-FCB-C3104508).
HábitatOcupa masas de agua dulce lóticas y lénticas poco profundas que pueden estar sometidas a fluctuaciones de nivel fuertes (Huner y Barr, 1984). Construye madrigueras en el lecho y márgenes de los cuerpos de agua y es considerado un enmadrigador terciario (Hobbs, Jr., 1989; Campos y Rodríguez-Almaraz, 1992; Rodríguez-Almaraz y Campos, 1994).
ComentarioEn el centro de Nuevo León e incluyendo el PNCM, P. clarkii es considerado exótico, su presencia fue un factor importante en la reducción de poblaciones del acocil endémico P. regiomontanus (Campos y Rodríguez-Almaraz, 1992; Rodríguez-Almaraz y Campos, 1994; Rodríguez-Almaraz y Muñiz-Martínez, 2008).
Procambarus regiomontanus(Villalobos, 1954) (Figs. 4C, 8)
Nombre comúnAcocil regio.
Localidad tipoManantial ubicado a 5 km N de Monterrey, Nuevo León, México.
Distribución geográficaCentro de Nuevo León y norte de Tamaulipas, México (Hobbs, Jr., 1989; Campos y Rodríguez-Almaraz, 1992; Rodríguez-Almaraz y Campos, 1994).
Distribución en el PNCMMonterrey: río La Silla, Parque Canoas (25º37’00” N, 100º15’00” O) (UANL-FCBC3103255, UANL-FCB-C3103261). Guadalupe: río la Silla (25º41’00” N, 100º12’00” O) (UANL-FCB-C31-03274). Hábitat. Reside en aguas abiertas de ambientes lénticos y lóticos, donde construye madrigueras (Campos-González, 1982; Hobbs, Jr., 1989).
ComentarioLa distribución histórica de esta especie fue aportada por Campos-González (1982), quien registró poblaciones de P. regiomontanus en Nuevo León, que incluye los municipios de Monterrey, Guadalupe, Apodaca, Cerralvo, Montemorelos, General Terán, General Bravo, China y Los Ramones. Posteriormente, Campos y Rodríguez-Almaraz (1992), Rodríguez-Almaraz y Campos (1994) y Rodríguez-Almaraz y Muñiz-Martínez (2008) actualizaron la distribución de este cambárido y sólo lo ubican en el Parque Nacional El Sabinal, Cerralvo, río La Silla, Parque Canoas, Monterrey y río la Silla, La Pastora, Guadalupe, todas en Nuevo León. Estos 2 últimos ríos pertenecen a la región hidrológica prioritaria 024 Cumbres de Monterrey (Arriaga et al., 2000).
DiscusiónLa biodiversidad dentro del PNCM se caracteriza por la riqueza y endemismo de pinos y encinos. Así como la riqueza y endemismo de flora fanerogámica (3 600 especies) y de la avifauna (Conanp, 2006). De acuerdo con Valdez-Tamez et al. (2004), más de 50 especies de fauna terrestre están en peligro de extinción, es decir, se encuentran amenazadas, o son consideradas como endémicas, raras y vulnerables. No obstante que uno de los principales servicios ambientales del PNCM es el aporte de agua al área metropolitana de Monterrey (Conanp, 2006; Seriña-Garza, 2012), las especies acuáticas que ahí residen han recibido poca atención.
Los sistemas hidrológicos han sido vistos desde la óptica del uso económico y social del agua, y poco relevantes han sido los estudios de biodiversidad y conservación de la flora y fauna acuática que habita en los diferentes ambientes acuáticos del PNCM. Tal es el caso de los crustáceos de agua dulce que no han sido considerados en los programas de conservación y manejo de esta área natural protegida, y esto se debe al pobre conocimiento de la presencia de crustáceos en ambientes acuáticos y terrestres. Esta misma situación ocurre en la mayor parte de las 158 ANP del país (Conanp, 2007-2012), excepto en aquellas ubicadas en las zonas costeras y marinas donde especies de interés pesquero o acuícola, como camarón, cangrejos, langostinos y otras, son sujetas a protección legal. La lista de especies en riesgo de la Norma Oficial Mexicana Nom-059-Semarnat-2010, sólo incluye a 17 especies de crustáceos (Semarnat, 2010).
Las 18 especies de crustáceos registradas en este estudio, se ubicaron ya sea dentro, en los límites o cerca del PNCM. Los criterios utilizados para considerar una presencia potencial de estas especies dentro del PNCM fueron: a) la mayoría de las especies, excepto las endémicas, tienen una distribución amplia en todo México o al menos en el noreste del país; b) similitud de ambientes acuáticos y terrestres dentro y fuera del PNCM y c) la conectividad ecológica de estos ambientes. En la lista roja de la IUCN (2013), la mayor parte de las especies (14) no están incluidas en alguna categoría de riesgo, M. acanthurus y P. clarkii son consideradas de menor preocupación, S. karenae está considerada como vulnerable D2 y P. regiomontanus se clasifica en peligro crítico B2.
Las 5 especies de branquiópodos registradas en este estudio: S. mackini, T. platyurus, T. mexicanus, E. texana y Triops sp., son residentes obligados de charcas temporales; tales ambientes pueden durar días o algunas semanas (Dodds, 2002). Sin embargo, estos hábitats pueden contener un alto grado de endemismo de especies de crustáceos (King, 1998). Todos los “branquiópodos grandes” están confinados principalmente a climas áridos y semiáridos del mundo, y en menor grado se han encontrado en climas templados y tropicales (Maeda-Martínez, 1982; Maeda-Martínez et al., 1997; Dumont y Negrea, 2002; Maeda-Martínez et al., 2002a, b, c; Brendonck et al., 2007). En México, la mayor parte de las especies de branquiópodos no cladóceros están localizadas en los desiertos sonorense y chihuahuense (Maeda-Martínez et al., 2002a, b, c). Los humedales temporales están severamente amenazados en todo el mundo, poniendo en peligro la persistencia de muchos branquiópodos y otra biota. Los cambios en el uso de suelo (Belk, 1998), la extracción de agua (De Roeck et al., 2007), la agricultura, la urbanización y la contaminación (Hamer y Brendonck, 1997) son las causas principales de la degradación o destrucción de estos hábitats. Dichos cambios han reducido el número y calidad de humedales efímeros, por lo que algunas especies de branquiópodos han sido registradas en la lista roja de la IUCN (Brendonck et al., 2007). Estas mismas amenazas han extinguido algunas poblaciones de branquiópodos del PNCM. En los EUA los “branquiópodos grandes” son usados en la valoración de la función y valor de los humedales efímeros (Rogers, 1998). Casi 950 especies de isópodos viven en ambientes acuáticos continentales (Wilson, 2008), de las cuales 50 especies son registradas en México (Rocha-Ramírez et al., 2012). El 87% de estas especies son conocidas sólo para su localidad tipo o tienen una distribución restringida (1 - 5 sitios) (Rocha-Ramírez et al., 2009), como ocurre con el cirolánido estigobio Sphaerolana karenae registrado en los límites del PNCM. El endemismo de los isópodos de agua dulce y la creciente demanda de agua por el humano, incrementan los riesgos de extinción (Wilson, 2008). Esta amenaza debe ser considerada tanto para S. karenae y el misidáceo Spelaeomysis villalobosi que comparten endemicidad y son parte de la fauna estigobia del PNCM. El único isópodo acuático continental que aparece en la lista de especies amenazadas de la Nom-059-Semarnat-2010 es Creaseriella anops (Creaser, 1936).
El anfípodo Hyalella azteca es abundante y común en las comunidades de invertebrados asociadas a diferentes tipos de macrofitas y sustratos suaves desnudos de los ambientes limnéticos del continente americano (Barba y Sánchez, 2007). Los registros de esta especie en México están muy dispersos, a pesar de su distribución amplia en el continente (Alcocer et al., 2002; Rocha-Ramírez et al., 2007; Barba y Sánchez, 2007; Rocha-Ramírez et al., 2008; Montalvo-Urgel et al., 2010). La modificación de los ambientes acuáticos del PNCM podría no representar una amenaza significativa para este anfípodo, ya que es de distribución amplia, a diferencia de las especies endémicas o de distribución restringida en el parque. Sin embargo, es necesario estudiar las poblaciones del PNCM y también de otras regiones geográficas del país, ya que hay indicios que esta especie represente un complejo de especies morfológicas crípticas (González y Watling, 2002; Witt et al., 2003; Wellborn et al., 2005).
Los isópodos oniscideos residentes en México han sido poco estudiados desde el trabajo de Mulaik (1960). De las 3 700 especies de oniscideos conocidas globalmente (Schotte et al., 1995; Schmalfuss, 2003), en el país hay registros entre 83 a 86 especies (Souza-Kury, 2000; Jass y Klausmeier, 2006). De esta biodiversidad 6 especies de cochinillas terrestres: Armadillidium vulgare, Venezillo osorioi, Porcellio laevis, Porcellio scaber, Porcellionides pruinosus y Agabiformius lentus, han sido registradas para el PNCM o áreas contiguas. Todas las especies, exceptuando a V. osorioi, son de origen europeo y de distribución mundial amplia. Diferentes actividades humanas han propiciado la introducción de isópodos terrestres en muchas partes del mundo (Schmalfuss, 2003). Como el uso de suelo como lastre por barcos mercantes desde el siglo 17 (Lilleskov et al., 2008). De esta manera barcos europeos que arribaron a las costas de América introdujeron accidentalmente a estos isópodos, quienes son considerados los colonizadores más exitosos de ambientes terrestres entre los crustáceos. Sin embargo, la humedad es el factor clave limitante para la distribución de ellos (Hornung, 2011). La importancia ecológica de las cochinillas terrestres residentes del PNCM, es por su papel de saprófagos, al descomponer el detrito de plantas en los hábitats que ocupan (David y Handal, 2010) e influyen en la liberación de nutrientes del suelo (Hornung et al., 2007).
En los acociles, el género Procambarus es el más diverso del mundo y el 99% de sus especies (167) ocurren en Norteamérica (Taylor, 2002). En México, se conocen 43 especies de este género, la mayor parte de ellos han sido citadas para su localidad tipo o tienen una distribución geográfica muy restringida (Hobbs, Jr., 1989; Rodríguez-Almaraz y Muñiz-Martínez, 2008; López-Mejía, 2008). A pesar de que la gran mayoría de las especies son nativas de México, incluso algunas poblaciones de P. clarkii, no hay programas o acciones del sector académico o gubernamental para proteger o conservar esta fauna. El acocil regio P. regiomontanus, endémico del centro de Nuevo León, es la única especie de acocil clasificada en riesgo de acuerdo con la Nom-059-Semarnat-2010 (Semarnat, 2010), y también la lista roja de la IUCN (2013) la considera en peligro crítico B2. Según Taylor et al. (2007), el 48% (174) de las especies de acociles de los EUA y Canadá tienen un grado de amenaza o riesgo y el principal factor de riesgo es la distribución natural limitada de muchas especies. Otras amenazas son la introducción de especies no nativas y la alteración del hábitat. En el caso de P. regiomontanus, estas 3 características son las mismas que han reducido sus poblaciones, al grado de ponerla en peligro de extinción. La introducción accidental o intencional y probable migración del acocil rojo exótico P. clarkii, contribuyó de manera negativa en la conservación del acocil regio en el centro de Nuevo León (Campos y Rodríguez-Almaraz, 1992; Rodríguez-Almaraz y Campos, 1994; Rodríguez-Almaraz y Muñiz-Martínez, 2008). Esta misma situación pudiera afectar a otras especies nativas de México por la creciente dispersión e introducción de P. clarkii en el país (Rodríguez-Almaraz y Muñiz-Martínez, 2008; Hernández et al., 2008; Álvarez et al., 2011).
Los langostinos de agua dulce y salobres más conocidos en México corresponden al género Macrobrachium con 21 especies (Hendrickx, 1995; Williams, 1984; Wicksten, 2005; Hernández et al., 2007; Mejía-Ortiz y López- Mejía, 2011). Entre ellas destaca M. acanthurus por ser de importancia pesquera y común a lo largo de la vertiente del golfo de México (Rodríguez-de la Cruz, 1965; Holthuis, 1952; Williams, 1984; Bowles et al., 2000; Wicksten, 2005). Esta especie habita las planicies costeras como en las desembocaduras de ríos o arroyos y lagunas costeras (Chace y Hobbs, 1969; Mejía-Ortiz y López-Mejía, 2011; Signoret y Brailovsky, 2004; Hein et al., 2011). Sin embargo, M. acanthurus ha sido registrada a distancias considerables río arriba, como en la presa Marte R. Gómez, Camargo, Tamaulipas; cuenca río Bravo - río San Juan y río Coy, 28 km al sur de Ciudad Valles, San Luis Potosí (Rodríguez-de la Cruz, 1965). También, Rodríguez-Almaraz y Campos (1996) registraron el hallazgo de M. acanthurus a 360 km río arriba de la cuenca río Bravo - río San Juan. Este último registro está dentro del PNCM, río Ramos en Allende; sin embargo, el monitoreo de campo en los últimos años no ha arrojado evidencia de su presencia actual en el PNCM. El que M. acanthurus se encuentre fuera de su ámbito geográfico-ecológico debe ser evaluado para conocer las causas naturales o antropogénicas que permitieron el establecimiento de poblaciones de esta especie a grandes distancias de las costas. La actividad antropogénica ha causado cambios en la distribución de especies de Macrobrachium en los ríos de Texas, como es el caso de M. carcinus que presentaba migraciones de más de 300 km desde las costas a tierra adentro, donde fue abundante y constituyó una pesquería comercial de agua dulce durante el siglo XIX, pero actualmente es difícil de encontrar (Bowles et al., 2000). La declinación de las poblaciones de Macrobrachium en Texas y en el noreste de México es atribuida a diferentes perturbaciones en los sistemas acuáticos como construcción de presas, contaminación del agua y la presencia de especies no nativas (Bowles et al., 2000; Rodríguez-Almaraz y Muñiz-Martínez, 2008). Dos especies estigobiontes de Macrobrachium son consideradas en riesgo por la Nom-059-Semarnat-2010. El criterio para definir este estatus fue el tipo de hábitat (cavernas) y la distribución restringida de ambas (De Grave et al., 2008). Sin embargo, es necesario evaluar el estado de conservación de todas las especies de Macrobrachium en México, incluyendo especies de distribución amplia y restringida.
Los sistemas acuáticos ubicados en o contiguos al PNCM deben ser tomados más en cuenta en los programas de manejo y conservación con el fin de evaluar el estado de la biota acuática, incluyendo crustáceos. La calidad de los ecosistemas acuáticos es degradada a nivel mundial por una serie de factores, los más importantes son: la alteración física del hábitat, la modificación del régimen de flujos, la alteración química, la contaminación del agua y la introducción de especies exóticas (Abell et al., 2000; Van Dyke, 2003).