COVID 19 & vaccines: Development and practice
More infoCOVID-19 vaccinations are intended to help produce neutralizing antibodies which target surface spike protein to combat the SARS-Cov-2 virus. Similarly, COVID-19 recovered patients exhibit high levels of SARS-CoV-2 neutralizing antibodies, which predominantly target the surface spike protein and are associated with the occurrence of health consequences in survivors.
ObjectiveThe aim of the study is to explore the long-term health consequences of the COVID-19 vaccines.
MethodologyA prospective, exploratory observational study conducted both online and offline using various questionnaires with all immunized individuals who had been inoculated for at least a month following their last COVID-19 vaccine either AZD1222® or BBV152® vaccines.
ResultsWe evaluated 258 individuals who had taken the COVID vaccine and found that females made up the majority (54.3%) and that the mean age was 24 years. Post-vaccination long-term health issues were reported by 36.05% (93) of the participants, with 37.86% (53) of females and 33.9% (40) of males (p = 0.292). Myalgia was reported by 20.15% (52), fatigue was 13.95% (36), paresthesia was 1.16% (3), ageusia was 0.77% (2), sadness/irritability was 2.31% (6), and lack of concentration/excessive worry was 3.1% (8).
ConclusionsMyalgia, fatigue, paresthesia, ageusia, coughs and colds, dyspnea, sadness/irritability, and lack of concentration/excessive worry are health consequences related to the COVID-19 vaccination which follow a similar pattern of post-COVID syndrome.
El objetivo de las vacunas frente a la COVID-19 es el de ayudar a producir anticuerpos neutralizantes dirigidos a la proteína de la espícula para combatir el virus SARS-Cov-2. De igual modo, los pacientes que se recuperan de la COVID-19 exhiben grandes niveles de anticuerpos neutralizantes de SARS-CoV-2, que se dirigen predominantemente a la superficie de la proteína de la espícula, y están asociados a la incidencia de consecuencias para la salud de los sobrevivientes.
ObjetivoEl objetivo del estudio es explorar las consecuencias para la salud a largo plazo de las vacunas frente a la COVID-19.
MetodologíaEstudio prospectivo, exploratorio y observacional realizado tanto online como offline, utilizando diversos cuestionarios con todos los individuos vacunados a quienes se había inoculado en el plazo de al menos un mes, tras la última vacuna frente a la COVID-19, bien fueran las vacunas AZD1222® o BBV152®.
ResultadosEvaluamos a 258 individuos que habían recibido la vacuna frente a la COVID, y encontramos que la mayoría eran mujeres (54,3%) con una edad media de 24 años. Las cuestiones de salud a largo plazo, tras la vacuna, fueron reportadas por un 36,05% (93) de los participantes, con un 37,86% (53) de mujeres y un 33.9% (40) de varones (p = 0,292). Se reportó mialgia en el 20,15% (52) de los casos, fatiga en el 13,95% (36), parestesia en el 1,16% (3), ageusia en el 0,77% (2), tristeza/irritabilidad en el 2,31% (6), y falta de concentración/preocupación excesiva en el 3,1% (8).
ConclusionesMialgia, fatiga, parestesia, ageusia, tos y resfriado, disnea, tristeza/irritabilidad, y falta de concentración/preocupación excesiva son las consecuencias de salud relacionadas con la vacuna frente a la COVID-19, y siguen un patrón similar al del síndrome post-COVID.