El ejercicio de la medicina ha evolucionado en los últimos años desde el patrón paternalista clásico hacia un sistema basado en el respeto por las preferencias del paciente: el autonomismo, que consagra la libertad de elección frente a las distintas alternativas planteadas en el seno de las relaciones asistenciales, con cuatro elementos esenciales en su desarrollo: la información recibida, la libertad de elección, la capacidad para decidir y la propia decisión. Para ejercer este derecho a su autonomía, el paciente tiene que disponer de una información adecuada, que debe ser veraz, suficiente y comprensible, según se establece tanto en el Código de Deontología Médica (obligación ética) como en el Convenio de Oviedo y la Ley 41/2004 (obligación legal).
DesarrolloSobre este planteamiento teórico se revisan las especificaciones legales relacionadas con el derecho a la información y la obligatoriedad de informar, las particularidades del proceso de toma de decisiones, así como las desviaciones que se producen en la práctica diaria tanto por parte de los profesionales como de los pacientes.
ConclusionesEl proceso de toma de decisiones debe estar libre de interferencias tanto internas como externas, principalmente persuasiones, manipulaciones y coacciones, y siendo el paciente competente, su decisión autónoma debe respetarse, al margen de que podamos o no estar de acuerdo con ella.
Medical praxis has evolved in recent years from the classical paternalistic pattern towards a system based on respect for the patient's preferences: that is to say, autonomism, which gives priority to freedom of choice above the other possible alternatives that can be considered in health care relationships. This approach involves four essential elements: the information received, freedom of choice, the capacity to decide and the actual decision. To exercise this right to their autonomy, patients must have access to suitable information, which must be truthful, sufficient and understandable, according to the provisions of both the Code of Medical Deontology (ethical obligation) and the Oviedo Agreement and Law 41/2001 (legal obligation).
DevelopmentOn the basis of this theoretical approach we also review the legal specifications concerning the right to information and the obligation to inform, the particularities of the decision-making process, as well as the deviations that are produced in daily practice by both professionals and patients.
ConclusionsThe decision-making process must be free from both internal and external interferences, especially persuasion, manipulation and coercion, and, provided the patient is competent, his or her autonomous decision must be respected, regardless of whether we agree with it or not.