Las quemaduras son un problema de salud pública ubicado dentro de las 20 principales causas de morbilidad en México. Uno de los grupos más vulnerables son los niños. Al realizar un análisis de los casos, se aporta para un mejor entendimiento del problema y pueden generarse medidas preventivas al respecto. El objetivo de este trabajo fue determinar el perfil epidemiológico de niños con quemaduras que ingresan a la Unidad de Niños con Quemaduras del Hospital Civil de Guadalajara Dr. Juan I. Menchaca.
MétodosSe realizó un estudio transversal que incluyó características demográficas del lesionado, de sus padres y de las quemaduras de niños atendidos durante 2009 a 2011. El análisis estadístico se llevó a cabo mediante el cálculo de frecuencias absolutas, proporciones e intervalos de confianza de 95%.
ResultadosEl perfil epidemiológico de los niños lesionados fue principalmente de varones (63.4%) menores de cinco años de edad (65.2%), con escolaridad de acuerdo con su edad (69.2%); hijos de padres menores de 35 años con escolaridad básica. Las lesiones fueron causadas por agua (56.2%) durante el lapso de las 12 p.m. a las 11:59 p.m. (73.0%) produciendo quemaduras de segundo grado superficial y profundo o menores (69.2%) que afectaron menos del 20% de la superficie corporal total (74.5%).
ConclusionesEste perfil epidemiológico permite ampliar el panorama de las acciones preventivas, iniciando con investigaciones científicas que orienten el rumbo que se debe seguir, trabajando conjuntamente con instituciones públicas y privadas en la elaboración de programas y estrategias, así como el establecimiento de una política pública para lesiones no intencionales.
Burns are a public health problem, ranking among the 20 principal causes of morbidity in Mexico. Children are a more vulnerable group to suffer from these injuries. For that reason, we analyzed cases in order to gain a better comprehension and to propose preventive measures for this problem. The aim of the study was to determine the epidemiological profile of those injuries to allow us to plan and implement actions for burn prevention.
MethodsWe conducted a cross-sectional study that included demographic characteristics of the child, the parents and the burn injuries from children treated at this Burn Unit. Statistical analysis was done to calculate amounts, proportions and 95% confidence intervals.
ResultsThe epidemiological profile of the injuries included males (63.4%) <5 years of age (65.2%) with educational level according to their age (56.2%). Parents of the included children were <35 years old with basic educational level. Burns were caused by hot water (56.2%) and occurred between noon and midnight (73.0%). The majority of the burns were shallow and deep second-degree or minor (69.2%) and affected <20% of body surface area (74.5%).
ConclusionsThis epidemiological profile paved the way for preventive actions beginning with scientific research to guide the actions in a progressive direction along with the cooperative actions of public and private institutions in the development of programs and strategies. The end result would be the establishment of a public policy for accidental injuries.
Las quemaduras son un problema de salud pública debido al impacto físico, psicológico, económico y social que les ocasiona a los lesionados y a sus familiares. En México, de acuerdo con la Dirección General de Epidemiología (DGE) de la Secretaría de Salud (SS), las quemaduras antes del año 2010 no figuraban de manera continua entre las 20 principales causas de morbilidad general en el país. Ese año estas lesiones figuraron en la posición 18 (123,291 casos)1 y en el 2011 en el lugar 17 (129,779 casos)2. De acuerdo con la morbilidad por enfermedades no transmisibles del año 2011, estas lesiones ocuparon la séptima posición, incluso tres posiciones por arriba de las ocasionadas por accidentes de transporte en vehículos con motor2.
Son dos los trabajos publicados sobre epidemiología de niños con quemaduras en México: el primero, un estudio epidemiológico descriptivo sobre quemaduras en niños atendidos en el Hospital Universitario Dr. José Eleuterio González, de Monterrey, Nuevo León, el cual describe las características demográficas y clínicas de aquellos pacientes con lesiones de segundo y tercer grado3; el segundo, un estudio de epidemiología de niños quemados atendidos en la Unidad de Quemados del Hospital de Traumatología Magdalena de las Salinas, en la Ciudad de México, del 2000 al 20064.
Ante la importancia de las quemaduras por su incidencia en la población y complicaciones a corto, mediano y largo plazo en las personas que las presentan, el objetivo del presente trabajo fue describir el perfil epidemiológico de los niños y niñas con quemaduras que acuden a atención médica a la Unidad de Niños con Quemaduras (UNQ) del Hospital Civil de Guadalajara Dr. Juan I. Menchaca (HCGJIM) de 2009 a 2011.
2MétodosSe realizó un estudio trasversal con muestreo de casos consecutivos a partir de enero del año 2009 a diciembre del año 2011 en la UNQ del HCGJIM. Este proyecto fue evaluado y aprobado por el Comité de Investigación y Ética del Instituto Regional de Salud Pública (IRSP) y del propio HCGJIM. La UNQ de este hospital recibe pacientes de toda la República Mexicana. El hospital al que está adjunta esta unidad es una institución de salud del tercer nivel de atención, la cual presta servicios de salud a personas sin seguridad social o con seguro popular. Los pacientes seleccionados fueron aquellos menores de 16 años que ingresaron por quemaduras a la UNQ, cuyo expediente clínico tuviera los datos necesarios para el estudio y que los padres de los mismos hubieran decidido participar en el estudio. Los criterios de exclusión fueron que los familiares no aceptaran ser incluidos en el estudio y la información obtenida del caso fuera inferior al 80%. Con estos criterios no hubo exclusión de casos por falta de información o por la no aceptación de los familiares.
Las variables incluidas se clasificaron en tres grupos:
Grupo 1. Datos del menor: sexo, edad y escolaridad
Grupo 2. Datos de los padres: edad, escolaridad y ocupación de la madre y del padre
Grupo 3. Datos de la lesión (quemadura): fecha en que se produjo, intencionalidad, había algún encargado del niño(a) en el momento del evento, quién era el responsable del niño(a) en ese momento, agente que produjo la quemadura, lugar donde se produjo la quemadura, horario en que ocurrió la quemadura (00:00 a 05:59h, 06:00 a 11:59h, 12:00 a 17:59h, 18:00 a 23:59h), grado de la quemadura (primer grado, segundo grado superficial y/o profundo, tercer grado), área corporal afectada (cabeza, cuello, extremidad superior, tronco, extremidad inferior y/o genitales), porcentaje de la superficie corporal quemada, lugar donde se brindó la primera atención médica y lapso de tiempo en recibir la primera atención médica.
Para la evaluación sobre la profundidad de las quemaduras se utilizó la clasificación la propuesta por Converse y Robb-Smith, que establece 1° grado, 2° grado superficial y profundo y 3°grado5. Los datos fueron capturados y analizados en el programa Epi Info para Windows6 (versión 3.5.4, Atlanta, GA), mediante frecuencias absolutas, relativas, intervalos de confianza de 95%, media, mediana y desviación estándar (DE). Para el mejor análisis de la temporalidad (en meses) de la ocurrencia de la quemadura se decidió agrupar los meses de acuerdo con las estaciones del año en el hemisferio norte; es decir, primavera (marzo, abril y mayo), verano (junio, julio, agosto), otoño (septiembre, octubre, noviembre) e invierno (diciembre, enero, febrero) y el análisis se realizó con el número de casos presentados en esos meses.
3ResultadosDurante los 3 años del estudio se recopilaron los datos de 322 niños con quemaduras que requirieron atención médica de la UNQ del HCGJIM, de los cuales el 63.4% correspondió al sexo masculino y el 65.2% menores 5 años de edad (Tabla 1). La escolaridad se cumplió de acuerdo con la edad en el 69.2% de los casos. El resto no cursaba el nivel de escolaridad que correspondería con su edad (Tabla 2).
Escolaridad de los niños atendidos en la Unidad de Niños Quemados
Escolaridad de acuerdo con la edad* (n=172) | Sí coincidió | No coincidió |
---|---|---|
n (%) | n (%) | |
Preescolar | 38 (22.1) | 41 (23.8) |
Educación primaria | 67 (39.0) | 3 (1.7) |
Educación secundaria | 14 (8.1) | 9 (5.2) |
Total | 119 (69.2) | 53 (30.8) |
El perfil de los padres de los pacientes con quemaduras resultó de la siguiente manera: el 58.1% las madres tenía entre 15 a 30 años, el 67.7% contaba con estudios de educación básica y el 71.7% se dedicaba al hogar. Con respecto a los padres, casi en la mitad de los casos la edad fluctuaba entre 31 años y más; el 62.4% contaba con estudios de educación básica y el 83.2% contaba con empleo (Tabla 3).
Datos sociodemográficos de los padres de los menores lesionados
n | % | |
---|---|---|
Edad de la madre | ||
15 a 30 años | 187 | 58.1 |
31 años y más | 124 | 38.5 |
Sin datos | 11 | 3.4 |
Escolaridad de la madre | ||
Nula | 18 | 5.6 |
Educación básica | 218 | 67.7 |
Educación media superior | 25 | 7.8 |
Educación superior | 10 | 3.1 |
Sin datos | 51 | 15.8 |
Ocupación de la madre | ||
Hogar | 231 | 71.7 |
Trabaja | 73 | 22.7 |
Estudia | 1 | 0.3 |
Sin datos | 17 | 5.3 |
Edad del padre | ||
15 a 30 años | 129 | 40.1 |
31 años y más | 154 | 47.8 |
Sin datos | 39 | 12.1 |
Escolaridad del padre | ||
No estudio | 14 | 4.3 |
Educación básica | 201 | 62.4 |
Educación media superior | 25 | 7.7 |
Educación superior | 8 | 2.5 |
Sin datos | 74 | 23.0 |
Ocupación del padre | ||
Trabaja | 268 | 83.2 |
Hogar | 1 | 0.3 |
Estudia | 1 | 0.3 |
Desempleado | 7 | 2.2 |
Sin datos | 45 | 14.0 |
Total | 322 | 100.0 |
En cuanto a la quemaduras, el mecanismo de la lesión fue no intencional en casi su totalidad (95.7%), el agente que ocasionó la mayoría de las lesiones fue el agua (56.2%), el 39.4% de estos eventos ocurrieron en la cocina y sucedieron en el lapso de tiempo de las 12:00 a 17:59h (37.6%) y de las 18:00 a 23:59h (35.4%). La profundidad de la quemadura producida fue de segundo superficial y profundo en el 33.2% de los niños, y el 74.5% tuvo menos del 20% de superficie corporal quemada. De acuerdo con el sexo fue posible observar que los niños se queman con mayor profundidad que las niñas y tienen predominio en todos los agentes causantes de las quemaduras. El promedio del porcentaje de superficie corporal quemada fue del 15.9% (DE 11.8) y la mediana de 12.3%. Con respecto al sexo, el porcentaje promedio de superficie corporal quemada en los varones fue del 15.1% (DE 11.4) y en las mujeres del 17.3% (DE 12.3) (Tabla 4).
Descripción de las quemaduras en niños del HCGJIM
Niños (N=204)n (%) | Niñas (N=118)n (%) | Total (N=322)n (%) | |
---|---|---|---|
Intencionalidad de la quemadura | |||
No intencional | 195 (95.6) | 113 (95.8) | 308 (95.7) |
Agresión | 8 (3.9) | 3 (2.5) | 11 (3.4) |
Autoinfligida | 0 (0.0) | 2 (1.7) | 2 (0.6) |
Sin datos | 1 (0.5) | 0 (0.0) | 1 (0.3) |
Agente que produjo la quemadura | |||
Agua | 100 (49.0) | 82 (69.5) | 182 (56.5) |
Fuego/Pólvora | 62 (30.4) | 27 (22.9) | 89 (27.6) |
Aceite | 20 (9.8) | 4 (3.4) | 24 (7.5) |
Electricidad | 14 (6.9) | 2 (1.7) | 16 (5.0) |
Objeto caliente | 5 (2.4) | 3 (2.5) | 8 (2.5) |
Químico | 2 (1.0) | 0 (0.0) | 2 (0.6) |
Fricción | 1 (0.5) | 0 (0.0) | 1 (0.3) |
Lugar donde ocurrió la quemadura | |||
Cocina | 74 (36.3) | 53(44.9) | 127 (39.4) |
Calle | 40 (19.6) | 14 (11.9) | 54 (16.8) |
Patio | 24 (11.8) | 16 (13.6) | 40 (12.4) |
Recámara | 13 (6.4) | 13 (11.0) | 26 (8.1) |
Baño | 13 (6.4) | 8 (6.8) | 21 (6.5) |
Comedor | 9 (4.4) | 7 (5.9) | 16 (5.0) |
Otro lugar de la casa | 12 (5.9) | 4 (3.4) | 16 (5.0) |
Campo | 3 (1.5) | 0 (0.0) | 3 (0.9) |
Lugar de trabajo | 6 (2.9) | 1 (0.8) | 7 (2.2) |
Otro lugar | 7 (3.3) | 0 (0.0) | 7 (2.2) |
Sin datos | 3 (1.5) | 2 (1.7) | 5 (1.5) |
Horario en que ocurrió la quemadura | |||
00:00–05:59 | 3 (1.5) | 3 (2.5) | 6 (1.9) |
06:00–11:59 | 37 (18.1) | 24 (20.3) | 61 (18.9) |
12:00–17:59 | 74 (36.3) | 47 (39.9) | 121 (37.6) |
18:00–23:59 | 75 (36.7) | 39 (33.1) | 114 (35.4) |
Sin dato | 15 (7.4) | 5 (4.2) | 20 (6.2) |
Área corporal quemada* | |||
Cabeza | 74 (23.0) | 50 (15.5) | 124 (38.5) |
Cuello | 63 (19.6) | 43 (13.4) | 106 (32.9) |
Extremidades superiores | 116 (36.0) | 65 (20.2) | 181 (56.2) |
Tronco | 118 (36.6) | 83 (25.8) | 201 (62.4) |
Extremidades inferiores | 97 (30.1) | 61 (18.9) | 158 (49.1) |
Genitales | 29 (9.0) | 24 (7.5) | 53 (16.5) |
Profundidad de la quemadura | |||
Primero y segundo superficial | 32 (15.7) | 24 (20.3) | 56 (17.4) |
Segundo superficial | 39 (19.1) | 21 (17.8) | 60 (18.6) |
Segundo superficial y profundo | 65 (31.9) | 42 (35.7) | 107 (33.2) |
Segundo profundo | 17 (8.3) | 9 (7.6) | 26 (8.1) |
Segundo profundo y tercero | 26 (12.8) | 14 (11.9) | 40 (12.4) |
Tercero | 17 (8.3) | 3 (2.5) | 20 (6.2) |
Sin dato | 8 (3.9) | 5 (4.2) | 13 (4.0) |
Porcentaje de la superficie corporal quemada | |||
1 a<11 | 84 (41.2) | 39 (33.0) | 123 (38.2) |
11 a<21 | 75 (36.8) | 42 (35.6) | 117 (36.3) |
21 a<31 | 24 (11.8) | 20 (16.9) | 44 (13.7) |
31 a 40 | 6 (2.9) | 4 (3.4) | 10 (3.1) |
>40 | 9 (4.4) | 8 (6.8) | 17 (5.3) |
Sin dato | 6 (2.9) | 5 (4.2) | 11 (3.4) |
En estos casos, en el momento en que ocurrió la quemadura había alguien responsable del cuidado de los chicos (93.2%); en la mayoría de las ocasiones fue la madre (57.8%). El lugar donde los lesionados y sus padres recurrieron como primera instancia fue a un centro de atención de primer nivel (39.8%) o una institución que solo ofrecía servicios de urgencia (39.1%). Solo el 44.1% llegaron a recibir la primera atención médica en la primera hora o menos tiempo de sucedido el evento (Tabla 5).
Responsable del niño y atención médica de la quemadura
n | % | |
---|---|---|
Persona responsable del niño lesionado en el momento que ocurrió la quemadura | ||
Madre | 186 | 57.8 |
Padre | 27 | 8.4 |
Ambos padres | 33 | 10.2 |
Otro familiar | 52 | 16.1 |
Otro | 2 | 0.6 |
Ninguno | 22 | 6.8 |
Lugar donde se brindó la primera atención médica | ||
Hospital de primer nivel | 128 | 39.8 |
Servicios de urgencias médicas | 126 | 39.1 |
Urgencias médicas del HCGJIM | 26 | 8.1 |
Consultorio particular | 16 | 5.0 |
Otro lugar | 20 | 6.2 |
Sin dato | 6 | 1.9 |
Lapso de tiempo que tardó en recibir atención médica | ||
Menos de 29 minutos | 62 | 19.3 |
30-59 minutos | 80 | 24.8 |
1-3 horas | 82 | 25.5 |
3-12 horas | 19 | 5.9 |
Más de 12 horas | 10 | 3.1 |
Sin datos | 69 | 21.4 |
Total | 322 | 100.0 |
De acuerdo con la incidencia de casos por quemaduras de 2009 a 2011, se aprecian diferencias en los tres años: mientras que en 2009 el ingreso de pacientes fue superior en las estaciones de invierno, primavera y verano en comparación a los dos siguientes años, en 2010 la incidencia de pacientes con quemaduras se mantuvo similar en el número de casos durante las estaciones de invierno a verano, y en otoño se observó una ligera disminución. Finalmente, en 2011 el incremento más importante ocurrió en verano; incluso fue mayor que los dos años anteriores. En conjunto, el número de casos por estación del año pone en los primeros lugares al invierno (79 casos) y a la primavera (74 casos). Los meses del año es los cuales se produjeron con mayor frecuencia las quemaduras fueron diciembre (13.4%), noviembre (10.6%) y mayo (8.8%). (Figura 1).
De acuerdo con la profundidad de la quemadura, el fuego causó la mayor parte de las quemaduras de tercer grado y las de segundo grado profundo y tercer grado; en las otras categorías de profundidad de la quemadura, el agua fue la causa principal (Tabla 5).
4DiscusiónEl perfil epidemiológico del niño lesionado por quemaduras está representado por varones menores de 5 años de edad1,4,5,7–19 que se lesionan con mayor frecuencia que las mujeres7–7,20–22, excepto en el caso de la Unidad de Quemados del Hospital Materno Infantil de Tegucigalpa en Honduras18, donde las niñas se lesionan con mayor frecuencia. Son hijos de madres con escolaridad básica incompleta que se dedican al hogar. En cuanto a la población que se atiende en el HCGJIM se coincide con lo reportado en otros estudios elaborados en unidades de atención a quemaduras o en hospitales de países como Israel7,10, Brasil11, Sudáfrica14, Chile15 y, en contexto mexicano, como en los estados de Nuevo León3 y Distrito Federal4. Así mismo, el perfil de la madre de estos lesionados concuerda con el de madres de los lesionados del municipio de Fortaleza en Colombia23.
En términos de morbilidad, las quemaduras más frecuentes en niños se deben al contacto con líquidos calientes, los cuales ocasionan escaldaduras. Esto ocurre en hospitales de otros países7,8,11,12,14–17,19–22,24, pero no así en Ikeja-Lagos, Nigeria9, o en Beer-Sheva, Israel10, donde el agente principal fue el fuego. El lugar donde principalmente suceden los eventos de quemaduras en niños es en el hogar, dentro de la cocina, como en otros estudios7,11–13,16,18–20,24. Sin embargo, es diferente lo que se ha reportado que ocurre en el centro sur de China, donde el lugar principal en el que se producen estas lesiones es la sala20.
Con respecto a los datos clínicos de la quemadura, estudios anteriormente publicados coinciden en que la profundidad de la quemadura más frecuente es de segundo grado4,11,16,17. Los resultados del presente trabajo coinciden con otros estudios11,21 donde la parte corporal más afectada por las quemaduras es el tronco, aunque hay otros estudios que reportan que las extremidades superiores son las principalmente afectadas9,13,15,17,20. De acuerdo con la región corporal, se observó que el 16.5% de los niños se quemaron los genitales, y que los niños se queman con mayor frecuencia que las niñas. Se realizó un subanálisis del agente de la quemadura y la edad del niño de los que presentaron quemadura en genitales; del 9.0% reportado en varones, el 3.7% ocurrió en menores de cinco años de edad; y del 7.5% presentado en mujeres, el 4.7% ocurrió en menores de cinco años de edad. Con los datos obtenidos del presente estudio no es posible explicar por qué se presentan estas diferencias, pero la mecánica del evento mostró que los menores se encontraban jugando cerca del área de trabajo de sus padres, y al dejar objetos con líquidos calientes en el suelo, los niños caen en los recipientes; o calientan el agua para bañarse en otro medios diferentes al boiler, lo dejan en el suelo y al menor descuido el niño resulta con quemaduras.
El porcentaje promedio superior de superficie corporal quemada obtenido en este estudio coincide con los promedios del Hospital Universitario del Estado de Lagos, en Ikeja-Lagos, Nigeria9; el Hospital de Quemaduras de Motahari de Terán, Irán12; y en el Hospital Brno, Republica Checa21; con porcentaje inferior se encuentran los casos de la Unidad de Quemaduras de Istanbul, Turquía8; del Centro Médico Sheba, Israel7; el Centro Médico Universitario Soroka, de Beer-Sheva, Israel9; el Hospital Pediátrico de Michigan en los Estados Unidos24; y la Unidad de Quemaduras del Hospital Xiangya de Changsha, China20.
Coincidió que el mes de diciembre fue el mes del año con la mayor incidencia en el caso de los estudios realizados en Israel7 y Honduras18, en contraste con lo reportado en estudios de Brasil11, China20 y los Estados Unidos24.
La primera atención médica que solicita esta población de pacientes son los servicios del primer nivel de atención, por lo cual se requiere que el personal de este sector tenga la preparación y capacitación necesarias para brindar los primeros auxilios, limitar la extensión y profundidad de las quemaduras, así como las posibles complicaciones de corto plazo a consecuencia de estas lesiones. A este respecto, el Centro Nacional para la Prevención de Accidentes (CENAPRA) cuenta con guías para la población general25 y los profesionales de la salud26, donde se incluyen secciones sobre prevención pre-evento, los primeros auxilios a realizar una vez presentadas las quemaduras y un bosquejo general del manejo médico de las mismas. Esto último solo se presenta en la guía para los profesionales de la salud.
Este estudio tiene la fortaleza de mostrar el perfil epidemiológico y comportamiento de las quemaduras de niños sin seguridad social de la región occidente del país que acuden al HCGJIM. Esto ofrece un panorama para sugerir medidas preventivas para disminuir la incidencia y gravedad de las lesiones de este problema de salud pública. Las limitaciones del mismo se deben a que, al ser un estudio descriptivo, provee de hipótesis para trabajos posteriores e impide hacer inferencias causales.
En conclusión, haber determinado un perfil epidemiológico de los niños con quemaduras atendidos en el Hospital Civil de Guadalajara Dr. Juan I. Menchaca permite el conocimiento de características generales y clínicas de estos eventos, que podrían permitir la planeación y diseño de programas de promoción y prevención de quemaduras en esta etapa de la vida, y también la revisión de las medidas conocidas al respecto, dirigidas a niños, adultos y al ambiente (Tabla 6). Un aspecto que debería promoverse es la incorporación en el currículo preescolar y escolar de las medidas preventivas para las quemaduras, tal como se estipuló anteriormente con la educación vial.
Acciones preventivas de quemaduras en niños
Niño | Adulto | Ambiente | |
---|---|---|---|
• Pre-evento | • Enseñarlos sobre los agentes o materiales inflamables y peligrosos para ellos25• Orientar a los niños sobre qué hacer en caso de incendio25 | • No dar por sentado que los niños están seguros porque están en la casa26• Asegurarse de que los líquidos calientes o inflamables no están al alcance de los niños26• Evitar que los niños laboren o apoyen a los adultos en áreas de trabajo de riesgo para lesionarse• Evitar que los mangos de ollas y/o sartenes estén hacia afuera de la estufa27• Comprobar que la temperatura de los alimentos sea tibia28• Prestar atención al niño cuando manipula un aparato electrodoméstico y verificar que no haya algún líquido derramado que pueda conducir la electricidad26 | • Área segura y libre de fuego, de productos inflamables, productos químicos o pólvora26• Área libre de líquidos calientes en el piso o en recipientes colocados en el suelo• Colocar detectores de humo en las casas27• Checar que la instalación eléctrica funcione correctamente27• Colocar protecciones en tomacorrientes28• Niños fuera de la cocina26• En caso de exposición prolongada al sol, aplicar protección solar cada dos horas29• Establecer salidas de emergencia28• Desconectar aparatos electrodomésticos que no se están usando28• Pisos o suelo libres de líquidos27 |
Los autores declaran que para esta investigación no se han realizado experimentos en seres humanos ni en animales.
Confidencialidad de los datosLos autores declaran que en este artículo no aparecen datos de pacientes.
Derecho a la privacidad y consentimiento informadoLos autores declaran que en este artículo no aparecen datos de pacientes.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.