Introducción: La hernia de Bochdalek, que fue descrita por primera vez por Alexander Bochdalek en 1867, es la más común de las hernias diafragmáticas congénitas y representa el 95% de ellas. Las hernias de Bochdalek se producen cuando un defecto posterolateral en el diafragma permite que el contenido abdominal se desplace hacia el tórax. La mayoría son congénitas y la incidencia es de, aproximadamente, 1/2200 a 1/12.500 nacidos vivos. Raramente se diagnostican en la edad adulta y, hasta la fecha, hay muy pocos casos publicados de abordaje robótico para la reparación de las mismas.

Caso clínico: Presentamos el caso de una paciente mujer de 52 años que se sometió con éxito a una reparación robótica de una hernia diafragmática posterior izquierda. Se utilizaron 4 puertos de entrada robóticos de 8mm, otro accesorio de 12 mm y el separador de Nathason para el hígado. La paciente presentaba una hernia diafragmática izquierda de gran tamaño que contenía la totalidad del estómago, el ángulo esplénico del colon y el bazo. Se aprovechó la disección y posterior tracción del saco herniario para reducir el contenido a cavidad abdominal evitando la manipulación del mismo. Igualmente, se utilizó parte del saco para cerrar el enorme defecto herniario que se reforzó, posteriormente, con una malla de doble cara. El uso del robot permitió una mejor visualización y disección en la cavidad torácica, lo que permitió una reducción segura del contenido de la hernia. La disección fue más precisa debido a la articulación de los brazos robóticos que permitieron una suave tracción y posterior reducción del saco herniario y del bazo a cavidad abdominal.

Discusión: Las hernias de Bochdalek rara vez se diagnostican en la edad adulta. Todas las hernias de Bochdalek deben repararse. La reparación mínimamente invasiva parece ser una opción viable y segura. Específicamente, la reparación robótica proporciona una mayor visualización y capacidad para una disección profunda y precisa en la cavidad torácica y facilita la reparación del defecto. El caso presentado demuestra que la reparación robótica es segura y ofrece ventajas sobre el abordaje laparoscópico tradicional.