Introducción: Las intervenciones en obesidad de las últimas décadas han demostrado una falta de adherencia al tratamiento por parte de los pacientes y una baja motivación.

Objetivos: Porcentaje de pacientes que consiguen una pérdida de peso mayor o igual a 5% del basal a los 3 meses.

Métodos: Pacientes de 18-65 años con IMC entre 30 y 39,99 kg/m², sin patologías relevantes, son aleatorizados al grupo de intervención, que se somete a una intervención nutricional basada en dieta mediterránea, recomendaciones de actividad física y a un modelado en 3D de su imagen corporal con soporte de realidad virtual vs. un grupo control.

Resultados: 34 pacientes comienzan el protocolo, de los cuales 18 (52,9%) son aleatorizados al grupo intervención (GI) y 16 (47,1%) al control (GC). La edad media de los pacientes fue 45 años, el IMC inicial 34 y la HbA_1c 5,4% en ambos grupos. En el GI hay un 38,9% de varones y en el GC un 12,5%. El peso inicial del grupo control fue 101 ± 11,9 kg y en el control 90,2 ± 10,6 kg (p < 0,006). El área muscular medida por ecografía fue 3,9 ± 1,95 cm² en el GI y 4,09 ± 1,2 cm² en el GC. La adherencia inicial a la dieta mediterránea era del 55% en ambos grupos. A los tres meses de la intervención se observa un porcentaje de pérdidas del 40%, completando la revisión una n de 21 (13 (72,2%) grupo intervención vs. 8 (50%) grupo control). Obtuvieron el objetivo primario un 15,4% (n = 2) de los pacientes del GI vs. 37,5% (n = 3) del GC (p 0,24). La disminución de peso fue 2,56 [-5,2 a 7,8] GI y 2,32 [-3,9 a 7,8] GC (p 0,9), la adherencia a la dieta mediterránea fue del 100% en todos los sujetos y la mejora del área muscular 4,4 ± 1,9 cm² en GI y 4,5 ± 0,7 en GC (p 0,94).

Conclusiones: La intervención mejora la adherencia a la dieta mediterránea, disminuye un 2,5% el peso y mejora la masa muscular, sin diferencias entre los grupos. Se confirma la baja adherencia de este tipo de pacientes y la necesidad de búsqueda de sistemas para potenciar la motivación.