El síndrome “prostatitis” representa una entidad nosológica con una prevalencia muy relevante y, por tanto, con unas connotaciones enormes en cuanto a impacto económico, sanitario y de calidad de vida para los pacientes. Con una sintomatología ambigua, métodos de diagnóstico controvertidos y tratamientos largos y de resultados irregulares, se ha convertido en una de esas patologías que, sin comprometer la vida del paciente, resultan un tanto incómodas tanto para el paciente como para el profesional que intenta ayudarle y no siempre lo consigue. Aunque en la mayoría de los casos se acepta una etiología infecciosa, existen serias controversias tanto respecto a los métodos diagnósticos utilizados como a la interpretación de los mismos. Recientemente, el National Institutes of Health de Estados Unidos ha propuesto una nueva clasificación de esta patología que sustituye a la otra vigente en los últimos 20 años y que, en principio, permitiría una mejor aproximación al diagnóstico y tratamiento de esta patología tan insidiosa.
Prostatitis is a highly prevalent nosologic entity and hence has an enormous financial impact on health systems as well as negative repercussions on patients’ quality of life. The symptoms are ambiguous, diagnostic methods are controversial and treatments are long and produce inconsistent results; consequently, although not life-threatening, prostatitis has become one of those diseases that is difficult both for the patient and for the physician who attempts to help, sometimes without success. Although an infectious etiology is accepted in most cases, there are major controversies about both the diagnostic methods used and their interpretation. Recently the National Institutes of Health in the USA has proposed a new classification of this disease to substitute that used for the last twenty years. This new classification may provide a more effective approach to the diagnosis and treatment of this insidious disease.