Sr. Director: La enfermedad celíaca del adulto suele caracterizarse por un inicio generalmente insidioso y con molestias abdominales, dolor, fatiga, debilidad y diarrea intermitente1. Raramente se ha descrito su presentación durante el puerperio1-4.
Presentamos el caso de una mujer de 32 años que comienza 3 semanas después de su primer parto (gemelar) con un cuadro diarreico de 5-6 deposiciones al día, pastosas y con moco, sin sangre ni pus y de coloración normal. Doce días tras el inicio del cuadro presenta parestesias y contracturas musculares en las cuatro extremidades, disminución de los reflejos rotulianos y signo de Trousseau negativo. La analítica al ingreso reveló: K 3,3 mEq/l; Na 149 mEq/l; Cl 119 mEq/l; Ca 6 mg/dl; IP del 35% e INR 2,65. La analítica preparto era normal. El tránsito intestinal informa de hallazgos compatibles con malabsorción. El test de D-Xylosa era patológico; los anticuerpos antiendomisio y antigliadina (IgA) eran positivos. Se realizó esofagogastroscopia con biopsias duodenales distales a la papila y orientadas que revelaron mucosa con atrofia subtotal de las vellosidades e hipertrofia de las criptas. Tras la instauración y mantenimiento de la dieta sin gluten la paciente normalizó su situación.
La enfermedad celíaca del adulto puede aparecer durante el puerperio y lo hace de forma abrupta2. Existen pocos casos publicados1-5. Todos ellos coinciden en la clínica de malabsorción, diarrea y muy rápida e importante pérdida de peso, así como hipocalcemia e hipocaliemia, como presentaba nuestra paciente en el momento del ingreso. La paciente también refería parestesias, contracturas musculares y disminución de los reflejos rotulianos; todo ello de aparición en menos de un mes.
Existen distintas teorías acerca del inicio de la enfermedad celíaca en el puerperio. Una es la teoría autoinmune, ya que se ha demostrado que ciertas enfermedades autoinmunes se exacerban durante el puerperio y hay evidencias de mecanismos autoinmunes en la patogénesis de la enfermedad celíaca1,2,5. Otra teoría, interrelacionada con la anterior, es la de las hormonas sexuales. Estas hormonas tienen efecto sobre el sistema inmune, pudiendo las hormonas sexuales femeninas exacerbar la enfermedad celíaca en el embarazo y en el puerperio2; de hecho existe la constancia del predominio de mujeres entre los casos de nueva aparición de la enfermedad antes de los 50 años, frente a los varones en un 2,71,2. Un tercer factor relacionado con la enfermedad, pero en este caso como protector, sería el tabaco: protegería frente a su aparición1.
La conclusión a la que podemos llegar es que los casos de enfermedad celíaca presentados en el puerperio comienzan de forma similar, abrupta y con alteraciones graves en períodos cortos de tiempo pero de rápida recuperación una vez instaurada la dieta sin gluten, previa normalización electrolítica. Los artículos publicados coinciden en la posible etiología autoinmune y hormonal del inicio de la enfermedad en el puerperio.
