El «colon en arañazo de gato» («cat scratch colon») es un hallazgo endoscópico caracterizado por la presencia de roturas lineales de la mucosa del colon, de color rojo brillante y que por su aspecto recuerdan al arañazo de un gato. La aparición de estas lesiones se ha atribuido al barotrauma producido por la insuflación durante la colonoscopia.
Presentamos el caso de una mujer de 69 años, sin antecedentes médicos de interés, que fue derivada a nuestra unidad para la realización de una colonoscopia de cribado de carcinoma colorrectal tras detección de sangre oculta en heces positiva. La colonoscopia se realizó tras preparación evacuante con polietilenglicol, bajo sedación con propofol y mediante insuflación con CO2. La progresión endoscópica no fue traumática, sin embargo, al intubar el colon transverso proximal, colon ascendente y ciego se identificaron en la mucosa varias estrías longitudinales eritematosas con hemorragia mucosa espontánea (fig. 1). En recto presentaba múltiples pólipos milimétricos que fueron extirpados. El resto de la mucosa colónica era macroscópicamente normal. La prueba se desarrolló sin incidencias y no se objetivó ninguna complicación secundaria. Los resultados de la histología fueron pólipos hiperplásicos y mucosa colónica sin alteraciones histológicas.
El «colon en arañazo de gato» («cat scratch colon») fue descrito por primera vez por McDonnell et al. en 20071 y se define como la presencia de roturas lineales eritematosas brillantes que suelen aparecer en el colon derecho y que en ocasiones pueden acompañarse de extravasación de sangre fresca. Estas lesiones generalmente no tienen repercusión clínica, sin embargo se han descrito casos de perforación incluso tras insuflación mediante CO22.
Aunque la etiología es desconocida, algunos autores han postulado la posibilidad de que el principal mecanismo patogénico de dicha entidad sea el barotrauma secundario a la insuflación durante la colonoscopia. Sin embargo, se ha descrito una asociación con distintos procesos patológicos que pueden afectar a la distensibilidad del colon como la colitis colágena o la colitis por derivación, así como la toma previa de antiinflamatorios no esteroideos3,4. Más recientemente se ha publicado un caso de «colon en arañazo de gato» en un paciente con colitis isquémica en la que los autores proponen que el aumento de rigidez de las paredes del colon secundarios a la isquemia puede jugar un papel en la aparición de rupturas mucosas con el aumento de presión tras la insuflación de aire durante la colonoscopia5. En nuestro caso, la mucosa colónica era macroscópicamente normal y además las biopsias permitieron descartar la presencia de colitis colágena.
El «colon en arañazo de gato» es un hallazgo endoscópico infrecuente, que normalmente no tiene repercusión clínica y suele producirse como consecuencia del barotrauma secundario a la insuflación u otros procesos que afecten a la distensibilidad del colon.
