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Vol. 145. Núm. 6.
Páginas 233-238 (septiembre 2015)
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Vol. 145. Núm. 6.
Páginas 233-238 (septiembre 2015)
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Enfermedad cardiovascular en pacientes con diabetes mellitus tipo 1 y tipo 2 en España
Cardiovascular disease in patients with type 1 and type 2 diabetes in Spain
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Emilio Ortegaa,b, Antonio J. Amora, Gemma Rojo-Martínezb, Conxa Castellc, Marga Giméneza,b, Ignacio Congeta,b,
Autor para correspondencia
iconget@clinic.ub.es

Autor para correspondencia.
a Unidad de Diabetes, Servicio de Endocrinología y Nutrición, Institut de Malalties Digestives i Metabòliques, Hospital Clínic i Universitari de Barcelona, Institut d’Investigacions Biomédiques August Pi i Sunyer (IDIBAPS), Barcelona, España
b Centro de Investigación Biomédica en Red de Diabetes y Enfermedades Metabólicas (CIBERDEM), España
c Departament de Salut, Servei Català de la Salut, Barcelona, España
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Tabla 1. Características de la población
Tabla 2. Episodios cardiovasculares estratificados por sexo en personas con diabetes mellitus tipo 1, tipo 2, o metabolismo hidrocarbonado normal
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Resumen
Fundamento y objetivo

Describir la prevalencia de enfermedad cardiovascular (ECV) en la diabetes mellitus tipo 1 (DM1) y compararla con la observada en personas con diabetes tipo 2 (DM2) o sin ella, en España.

Pacientes y método

Estudio transversal en sujetos de edad comprendida entre 18-70 años. La prevalencia de ECV se obtuvo mediante un cuestionario dirigido por una enfermera (Estudio Di@bet.es, NORMAL=3.430, DM2=312) o un registro cumplimentado por médicos (DM1=1.382). Se evaluaron las diferencias no ajustadas y ajustadas de enfermedad coronaria (EC), cerebrovascular (ECEV), vascular periférica (EVP), y ECV global de DM1 frente a NORMAL y DM1 frente a DM2.

Resultados

Hubo diferencias en edad, índice de masa corporal, porcentaje de mujeres, dislipidemia y tratamiento hipotensor entre DM1 frente a NORMAL y DM1 frente a DM2 (todos p<0,001). El tabaquismo fue similar entre DM1 y DM2, y menor en DM1 frente a NORMAL (p<0,0001). El porcentaje de EC, ECEV, EVP y ECV global en DM1 frente a NORMAL fue de 3,0 frente a 2,5 (p=0,31), 0,70 frente a 1,10 (p=0,22), 2,61 frente a 0,20 (p<0,0001) y 5,10 frente a 3,44 (p<0,01), respectivamente. El porcentaje en DM2 (frente a DM1) fue de 11,3 (p<0,0001), 3,5 (p<0,0001), 4,2 (p=0,13) y 17% (p<0,0001), respectivamente. La regresión logística múltiple ajustada mostró una mayor prevalencia de EC (odds ratio [OR] 2,27, intervalo de confianza del 95% [IC 95%] 1,41-3,67), EVP (OR 15,35, IC 95% 5,61-42,04), y ECV global (OR 2,32, IC 95% 1,55-3,46), pero no de ECEV (OR 0,49, IC 95% 0,19-1,27) en DM1 frente a NORMAL. No encontramos diferencias entre DM1 y DM2.

Conclusiones

Los pacientes con DM1 de un área mediterránea presentan mayor prevalencia de ECV que una población control, y similar prevalencia que pacientes con DM2 tras ajustar por factores de confusión.

Palabras clave:
Diabetes mellitus tipo 1
Diabetes mellitus tipo 2
Enfermedad coronaria
Enfermedad cerebrovascular
Enfermedad vascular periférica
Abstract
Background and objective

To describe the prevalence of cardiovascular disease (CVD) in type 1 diabetes (T1DM) and to compare it with that observed in type 2 diabetes (T2DM) and normal population in Spain.

Patients and methods

Cross-sectional study (18-70 years-old). Information on CVD was available from a nurse-administered questionnaire (Di@bet.es Study, NORMAL=3,430, T2DM=312) and from a physician reporting form (T1DM=1,382). Differences in the crude and adjusted prevalence of coronary heart (CHD), cerebrovascular (CNSD), peripheral vascular (PVD) and overall CV (CVD) disease were investigated between T1DM vs. NORMAL, and T1DM vs. T2DM groups.

Results

We found differences in age, body mass index, proportion of women, dyslipemia and antihypertensive medication between T1DM vs. NORMAL and T1DM vs. T2DM (all P<.001). Smoking prevalence was not different between T1DM vs. T2DM and it was lower in T1DM compared to NORMAL (P<.0001). The percentage of CHD, CNSD, PVD, and overall CVD in T1DM vs. NORMAL was 3.0 vs. 2.5 (P=.31), 0.70 vs. 1.10 (P=.22), 2.61 vs. 0.20 (P<.0001), and 5.1 vs. 3.44 (P<.01), respectively. The prevalence in T2DM (vs. T1DM) was 11.3 (P<.0001), 3.5 (P<.0001), 4.2 (P=.13), and 17% (P<.0001), respectively. Multiple logistic regression adjusted models showed a higher prevalence of CHD (odds ratio [OR] 2.27, 95% confidence interval [95% CI] 1.41-3.67), PVD (OR 15.35, 95% CI 5.61-42.04), and overall CVD (OR 2.32, 95% CI 1.55-3.46), but not for CNSD (OR 0.49, 95% CI 0.19-1.27) in T1DM compared to NORMAL. No differences were found between T1DM and T2DM.

Conclusions

We found a higher prevalence of CVD in a Mediterranean population of T1DM individuals compared with non-diabetic subjects. This prevalence was similar to that observed in T2DM.

Keywords:
Type 1 diabetes mellitus
Type 2 diabetes mellitus
Coronary disease
Cerebrovascular disorders
Peripheral vascular disease
Texto completo
Introducción

Las manifestaciones clínicas asociadas a la enfermedad cardiovascular (ECV) representan la mayor causa de morbimortalidad en los pacientes con diabetes1,2. La mayor parte de esta información proviene principalmente de estudios realizados en personas con diabetes mellitus tipo 2 (DM2)3. La diabetes mellitus tipo 1 (DM1) es, en comparación, mucho menos frecuente y afecta a población más joven. Sin embargo, y a pesar de que los factores de riesgo cardiovascular (FRCV) clásicos presentes en la DM2 tienen una menor prevalencia en los pacientes con DM1, el riesgo relativo de ECV en estos pacientes, ajustado por su edad, es mayor que en la DM2, y multiplica por 4-8 veces el de la población general en la mayoría de los estudios4–6. En el análisis realizado en el Reino Unido se calcula que el riesgo de presentar ECV de un paciente con DM1 de entre 45 y 55 años es similar al observado en sujetos sin diabetes con una edad 15-20 años mayor6. Sin embargo, la información al respecto disponible en el estado español es muy escasa.

El objetivo de nuestro trabajo fue describir la prevalencia y el tipo de ECV presente en pacientes adultos con DM1 incluidos en un registro autonómico de carácter obligatorio –Registro Público Catalán de Infusores Subcutáneos Continuos de Insulina (RPC-ISCI)– de pacientes que inician tratamiento con infusor subcutáneo continuo de insulina. Más importante fue comparar esta prevalencia con la observada, por un lado, en personas sin diabetes, y por otro, en personas con diagnóstico conocido de DM2, procedentes estos últimos grupos de un estudio de ámbito nacional y de base poblacional realizado entre 2009 y 2010 en una muestra representativa del territorio nacional (Estudio Di@bet.es).

Material y método

En este estudio transversal y observacional se incluyeron adultos de entre 18 (límite de edad inferior del estudio Di@bet.es) y 70 años de edad (edad del paciente de más edad del registro RPC-ISCI). La información de los pacientes con DM1 se obtuvo del RPC-ISCI, recogida entre los años 1990-2010. La información de los sujetos control sin diabetes (NORMAL) y con DM2 se obtuvo del estudio de ámbito nacional y de base poblacional realizado entre 2009 y 2010, Di@bet.es. Brevemente, RPC-ISCI es un registro autonómico de carácter obligatorio de pacientes con DM1 al inicio del tratamiento con infusor subcutáneo continuo de insulina. De este registro, solo fueron seleccionados individuos adultos (18-70 años). El estudio Di@bet.es es poblacional, transversal, realizado en los años 2009-2010, con una muestra (muestreo por conglomerados) representativa de todo el país, cuyo objetivo principal era conocer la prevalencia de diabetes y otros FRCV en España7. Los participantes sin diabetes conocida fueron catalogados (OMS 2009) en distintas categorías de metabolismo hidrocarbonado (diabetes desconocida, prediabetes, o sin alteraciones [NORMAL]) mediante una analítica en ayunas y un test de tolerancia oral a la glucosa. Para este estudio, aquellos individuos con DM2 conocida o situación NORMAL fueron seleccionados para este análisis. De ambos registros se obtuvo la información sobre la prevalencia de enfermedad coronaria (EC), enfermedad cerebrovascular (ECEV), enfermedad vascular periférica (EVP) y de la suma de las 3 (ECV). En el primer registro (RPC-ISCI), los datos sobre ECV provenían de la información codificada e introducida por parte de los médicos. Los datos sobre la prevalencia de ECV en cualquiera de sus formas de presentación en el estudio Di@bet.es provenía de un cuestionario estandarizado administrado por una enfermera responsable del trabajo de campo del estudio.

Se disponía, además, de información clínica de los participantes sobre su edad, sexo, índice de masa corporal (IMC), tabaquismo, duración de la diabetes (en el caso de que existiera), presencia de dislipidemia o hipertensión arterial, y sobre si recibían tratamiento hipotensor. Asimismo, aunque solo para el grupo de DM1, se disponía de la última hemoglobina glucosilada (HbA1c) previa a la inclusión en el registro, así como del número de sujetos con complicaciones microangiopáticas y el tipo de las mismas.

Análisis estadístico

Los datos se muestran como mediana (intervalo intercuartílico) o número de personas (proporciones). La comparación entre grupos en edad, sexo, IMC, tabaquismo, duración de la diabetes, y de las prevalencias de ECV se realizó mediante el test de ji al cuadrado o el test de Wilcoxon para las variables continuas de distribución no normal. Las diferencias entre DM1 frente a NORMAL y DM1 frente a DM2, en respuesta a los objetivos planteados, en la presencia de ECV ajustadas por edad y sexo, u otros FRCV (y tiempo de evolución de la diabetes en DM1 frente a DM2), fueron evaluadas mediante modelos de regresión logística múltiple y se expresaron como odds ratio (OR) e intervalo de confianza del 95% (IC 95%). Dadas las conocidas diferencias de sexo en la prevalencia de ECV, se realizó un análisis estratificado por sexos8. Una p<0,05 se consideró estadísticamente significativa. El análisis estadístico se llevó a cabo con el programa SAS software, v. 9.2 (SAS Institute Inc., Cary, NC, EE. UU.).

Resultados

Se incluyeron un total de 1.382 pacientes con DM1 del registro RPC-ISCI (tabla 1), de los cuales en el 15,1% las hipoglucemias de repetición/hipoglucemias desapercibidas fueron uno de los motivos del inicio del infusor de insulina, y en un 6% de los pacientes se describió alguna forma de neuropatía del sistema nervioso autónomo. De la base de datos del estudio Di@bet.es se incluyeron 3.430 sujetos con metabolismo hidrocarbonado normal y 312 pacientes con diabetes conocida previamente y referida mediante el cuestionario administrado por la enfermera responsable (tabla 1). La duración mediana de la diabetes fue superior en los pacientes con DM1 que en los DM2 (mediana [intervalo intercuartílico] de 16 [10-23] frente a 7 [3-15] años). La HbA1c media (DE) de los pacientes con DM1 fue de 8,3 (1,2) %, y en un 33 y un 14% existía algún grado de retinopatía o nefropatía diabética, respectivamente (tabla 1). Las personas con DM1 eran más jóvenes, con mayor frecuencia mujeres, y presentaban menor IMC y proporción de fumadores que el grupo NORMAL (tabla 1). La prevalencia de tabaquismo fue similar entre DM2 y DM1. También se encontraron diferencias entre los grupos en cuanto a porcentaje de dislipidemia y tratamiento con hipotensores (tabla 1). Finalmente, la prevalencia cruda de EC, ECEV y ECV general, pero no de EVP, fue superior en DM2 frente a DM1 (ECV global: 17% en DM2 frente a 5,1% en DM1; EC: 11,3% en DM2 frente a 3% en DM1), y no encontramos diferencias en EC y ECEV entre DM1 y NORMAL, aunque los primeros tenían una prevalencia de EVP y ECV global mayor que los segundos (tabla 1).

Tabla 1.

Características de la población

  DM1  NORMAL  DM2  DM1 frente a NORMAL  DM1 frente a DM2 
1.382  3.430  312     
Edad (años)  34 (29-42)  42 (33-53)  61 (54-66)  <0,0001  <0,0001 
Sexo (mujer)  987 (71)  2.061 (60)  139 (45)  <0,0001  <0,0001 
IMC (kg/m223,9 (21,9-26,6)  26,4 (23,7-29,6)  30,5 (27,2-34)  <0,0001  <0,0001 
Fumadores activos  256 (18,9)  1.061 (30,9)  65 (21)  <0,0001  0,4437 
Tratamiento hipotensor  229 (17)  378 (11)  182 (58)  <0,0001  <0,0001 
Dislipidemia  198 (14,7)  908 (26,7)  176 (57)  <0,0001  <0,0001 
Duración de la diabetes (años)  16 (10-23)  --  7 (3-15)    <0,0001 
Enfermedad coronaria  41 (3)  84 (2,5)  35 (11,3)  0,3066  <0,0001 
Enfermedad cerebrovascular  10 (0,7)  38 (1,1)  11 (3,5)  0,2241  <0,0001 
Enfermedad vascular periférica  36 (2,6)  6 (0,2)  13 (4,2)  <0,0001  0,1329 
Enfermedad cardiovascular  71 (5,1)  118 (3,4)  53 (17)  0,0061  <0,0001 
Retinopatía  449 (33)         
Nefropatía  199 (14)         
Diálisis  6 (0,5)         
Trasplante renal  10 (0,7)         

DM1: diabetes mellitus tipo 1; DM2: diabetes mellitus tipo 2; IMC: índice de masa corporal; NORMAL: personas con metabolismo hidrocarbonado normal.

Se presentan los datos como mediana (rango intercuartílico, p25-p75) o n (porcentaje). Se muestran los valores de p para diferencias entre grupos.

Posteriormente, las diferencias en la prevalencia de ECV fueron evaluadas tras ajustar por edad, sexo y los FRCV referidos, y la duración de la diabetes en el caso de la comparación DM1 frente a DM2. Tras ajustar por edad y sexo (datos no mostrados) o por edad y sexo y el resto de los factores de riesgo (IMC, tabaquismo, tratamiento hipotensor y dislipidemia), los pacientes con DM1 presentaban mayor prevalencia de EC (p=0,0008), EVP (p<0,0001) y ECV (p<0,0001) que los sujetos del grupo NORMAL, no existiendo diferencias en la prevalencia de ECEV (p=0,1408) entre estos 2 grupos (fig. 1). Sin embargo, tras este ajuste, no encontramos diferencias significativas entre DM2 frente a DM1 en cuanto a prevalencia de EC, ECEV, EVP o ECV (p de 0,9725, 0,0716, 0,1705 y 0,9491, respectivamente) (fig. 2). Dado que se ha hipotetizado que la gran mayoría del exceso de riesgo cardiovascular en la diabetes se debe a la coexistencia de nefropatía9, realizamos un análisis de sensibilidad en el que eliminamos los sujetos con DM1 y nefropatía, y no observamos diferencias significativas (datos no mostrados).

Figura 1.

Diferencias en la prevalencia de enfermedad cardiovascular general y subtipos entre pacientes con diabetes mellitus tipo 1 y población con metabolismo hidrocarbonado normal.

Los datos muestran las odds ratio y los intervalos de confianza del 95% ajustados por edad, sexo, tabaquismo, índice de masa corporal, presencia de dislipidemia y uso de fármacos hipotensores.

Enfermedad CV (enfermedad cardiovascular): 2,32 (1,55-3,46); EV periférica (enfermedad vascular periférica): 15,35 (5,61-42,04); E Cerebro Vasc (enfermedad cerebrovascular): 0,49 (0,19-1,27); E coronaria (enfermedad coronaria): 2,27 (1,41-3,67).

(0,08MB).
Figura 2.

Diferencias en la prevalencia de enfermedad cardiovascular general y subtipos entre pacientes con diabetes mellitus tipo 1 y tipo 2.

Los datos muestran las odds ratio y los intervalos de confianza del 95% ajustados por edad, sexo, tabaquismo, índice de masa corporal, tiempo de evolución de la diabetes, presencia de dislipidemia, y uso de fármacos hipotensores.

Enfermedad CV (enfermedad cardiovascular): 0,98 (0,49-1,96); EV periférica (enfermedad vascular periférica): 2,08 (0,73-5,92); E Cerebro Vasc (enfermedad cerebrovascular): 0,21 (0,04-1,15); E coronaria (enfermedad coronaria): 0,99 (0,44-2,22).

(0,08MB).

En la tabla 2 se muestra el número de episodios cardiovasculares observados en mujeres y en varones separados por grupos. La prevalencia no ajustada de estos episodios fue similar o superior en varones en comparación con mujeres (tabla 2). Al ajustar por edad y el resto de los FRCV, la probabilidad (OR [IC 95%]) de tener EC, ECEV, EVP o ECV era mayor en varones que en mujeres en la población general (2,13 [1,35-3,38], 2,82 [1,42-5,63], 7,03 [0,81-61,1] y 2,53 [1,70-3,77], respectivamente), pero no en la población con DM1 (1,11 [0,55-2,24], 2,13 [0,4-11,4], 2,14 [0,97-4,73], 1,77 [1,00-3,14, p=0,05], respectivamente), o DM2 (datos no mostrados, p>0,08 en todos). Dada la evidencia previa8 decidimos realizar, además del análisis ajustado por sexo, un análisis estratificado por sexos y ajustado por edad y el resto de los FRCV para evaluar diferencias en la prevalencia de ECV y sus subtipos entre DM1 y NORMAL. También observamos, al igual que en el grupo completo, una mayor probabilidad de tener ECV (con la excepción comentada para la ECEV, que también existía en el análisis estratificado) tanto en varones como en mujeres con DM1 cuando los comparamos con población NORMAL del mismo sexo. Estas diferencias parecían mayores en mujeres que en varones: EC mujeres 2,87 (1,50-5,49), varones 1,74 (0,84-3,61); EVP mujeres 34,14 (4,02-287,7), varones 12,16 (3,60-41,13); ECV mujeres 2,96 (1,66-5,26), varones 1,86 (1,05-3,28). Sin embargo, solo la interacción (ajustada por edad) sexo-grupo (DM1 frente a NORMAL) para EC fue relevante (p=0,08), indicando una mayor probabilidad de EC en nuestras mujeres con DM1 que en los varones con DM1 comparados con su población NORMAL de referencia. El resto de las interacciones sexo-grupo para EVP, ECEC y EVC no fueron significativas (p>0,30).

Tabla 2.

Episodios cardiovasculares estratificados por sexo en personas con diabetes mellitus tipo 1, tipo 2, o metabolismo hidrocarbonado normal

  Enfermedad coronaria  Enfermedad cerebrovascular  Enfermedad vascular periférica  Enfermedad cardiovascular 
Diabetes tipo 1
Mujeres (n=987)  26 (2,6)  5 (0,5)  16 (1,6)*  37 (3,8)* 
Varones (n=395)  15 (3,8)  5 (1,3)  20 (5,1)  34 (8,6) 
Diabetes tipo 2
Mujeres (n=138)  13 (9,4)  3 (2,2)  5 (3,6)  20 (14,4) 
Varones (n=174)  22 (12,7)  8 (4,7)  8 (4,7)  33 (19,1) 
NORMAL
Mujeres (n=2.061)  36 (1,8)*  13 (0,6)*  1 (0,05)*a  46 (2,2)* 
Varones (n=1.369)  48 (3,5)  25 (1,8)  5 (0,4)  72 (5,3) 

DM1: diabetes mellitus tipo 1; DM2: diabetes mellitus tipo 2; NORMAL: personas con metabolismo hidrocarbonado normal.

Los datos se expresan como n (porcentaje).

aTest exacto de Fisher usado para esta comparación.

*

p<0,05 para diferencias entre sexos dentro del mismo grupo (DM1, DM2, o NORMAL).

Discusión

Los resultados de nuestro estudio en una población mediterránea ponen de manifiesto que la probabilidad de presentar ECV es más elevada en pacientes con DM1 que en personas sin alteraciones en el metabolismo hidrocarbonado, y similar a la de pacientes con DM2 tras ajustar por edad y sexo, y otros FRCV.

La diabetes en general, y la DM1 en particular, aceleran el proceso de aterosclerosis. En este sentido, nuestro grupo ya había demostrado en una serie de pacientes jóvenes con DM1 con una duración significativa de la enfermedad, sin complicaciones microvasculares ni otros FRCV, un mayor valor medio del grosor de la íntima media (GIM) carotídeo (correspondiente en promedio al esperable en sujetos 10 años mayores) y de la presencia de placa carotídea (un 18% presentaron placa, hallazgo no esperable en su grupo etario) al observado en una población control de similar edad y sexo10. Más recientemente, un grupo de investigadores de nuestro entorno ha puesto de manifiesto un aumento de la rigidez arterial en pacientes con DM1 en comparación con un grupo control de similar edad y sexo, y otros FRCV clásicos11. La rigidez arterial, al igual que la medida de GIM12, y sobre todo la presencia de placa carotídea, son predictoras de episodios cardiovasculares13. Estas variables representan la manifestación vascular en distintos estadios de la aterosclerosis desde sus etapas más iniciales hasta las más avanzadas en su fase preclínica. En nuestro estudio, al igual que en otras investigaciones más amplias y de carácter poblacional5,14,15, se muestra cómo la etapa final (la del episodio clínico) también es más desfavorable para los pacientes con DM1.

En cuando a la ausencia de diferencias observadas entre DM1 y DM2, esta coincide con algunos estudios, pero no con otros, que comparan directamente estos 2 grupos de pacientes. Estos estudios han mostrado que los pacientes con DM1 tienen la misma o superior prevalencia de ECV cuando tenemos en cuenta su menor edad, y en general, la menor prevalencia de muchos, si no todos, los FRCV clásicos16.

En relación con las diferencias mostradas entre sexos en la prevalencia de ECV, nuestro estudio confirma varios datos relevantes. En primer lugar, que existe una mayor probabilidad de ECV en varones que en mujeres en la población general8. En segundo lugar, que en personas con diabetes (tanto DM1 como DM2), estas diferencias en ECV entre sexos desaparecen. En tercer lugar, que el riesgo de episodios cardiovasculares es mayor en mujeres con diabetes que en varones con diabetes cuando ambos grupos los comparamos con su población de referencia sin diabetes. Por ejemplo, en el estudio de Soedamah-Muthu et al.6, la interacción sexo-diabetes en la incidencia de episodios cardiovasculares mayores fue significativa (p=0,0007), indicando que la hazard ratio (HR) de 7,7 para mujeres con diabetes comparada con la de mujeres sin diabetes era mayor que la HR de 3,6 para varones con frente a varones sin diabetes. Similares resultados se obtuvieron para episodios coronarios mayores en dicho estudio. En nuestro trabajo solo en el caso de la EC la interacción sexo-diabetes (p=0,08) fue relevante. Sin embargo, en todos los casos sin excepción, las OR para la asociación de diabetes con distintos tipos de ECV fueron mayores en mujeres que en varones. Podemos especular con la posibilidad de que un tamaño muestral mayor podría haber puesto de manifiesto estas diferencias observadas en otros estudios.

A día de hoy no está claro que el elevado riesgo de ECV asociado a la DM1 sea simplemente debido a la exposición durante años del árbol vascular al efecto pernicioso de la hiperglucemia per se. Es más que probable que los efectos dañinos de los factores de riesgo clásicos sean semejantes en los pacientes con DM1 y DM2. Sin embargo, nuestro grado de conocimiento de la fisiopatología de la aterosclerosis en la DM1 y el papel que desempeñan en ella otros factores de riesgo (no clásicos17, nutricionales18 y otros ambientales, y no conocidos), la presencia de factores predisponentes, protectores y aceleradores dista mucho de ser completo. Aún así, es importante incrementar nuestro esfuerzo en mejorar el control de la glucemia, puesto que la misma está claramente relacionada con el desarrollo de episodios cardiovasculares según datos del Diabetes Control and Complications Trial/Epidemiology of Diabetes Interventions and Complications19 y otros estudios de carácter observacional20.

Deben comentarse algunas limitaciones y fortalezas de nuestro trabajo. Se trata de un estudio transversal en el que solo podemos mostrar enfermedad prevalente y en donde la misma ha sido identificada mediante cuestionarios autorreferidos, aunque dirigidos por una enfermera (estudio Di@bet.es), o reportados por un médico (RPC-ISCI). Asimismo, la inclusión únicamente de pacientes con DM1 a los que se les había indicado el inicio de tratamiento con un infusor subcutáneo continuo de insulina por mal control metabólico en su mayor parte podría haber incrementado la prevalencia de ECV. Sin embargo, nuestro análisis de sensibilidad en el que eliminamos los sujetos con DM1 y nefropatía no modificó nuestros hallazgos. Además, la prevalencia de EC (3%), ECEV (0,7%) o ECV general (5,1%) en personas con DM1 en nuestro estudio es muy similar a la de otros. En concreto, un estudio publicado en el año 2010 procedente del registro sueco muestra prevalencias de 4, 1,1 y 4,7%, respectivamente20, con una metodología en la recogida de datos algo más sólida a la nuestra. En nuestro estudio, todas las formas clínicas de ECV, con la excepción de la ECEV, fueron significativamente más elevadas en los pacientes con DM1 una vez realizados los ajustes pertinentes por edad, sexo y factores de riesgo. La falta de diferencias significativas en el caso de la ECEV podría tener que ver con las limitaciones intrínsecas derivadas de un estudio como el nuestro, que incluye datos de 2 registros con una recogida de datos diferente. Asimismo, la magnitud de la diferencia encontrada en el caso de la EVP podría explicarse por la infraestimación y representación de las manifestaciones clínicas asociadas a esta presentación de ECV en población sana en la que se recoge información mediante cuestionario. Además, el no disponer de datos sobre el control metabólico de los pacientes con DM2 (HbA1c), hace que no podamos ajustar las OR de ECV por este factor de confusión. Creemos, no obstante, que estos resultados son de interés para la comunidad científica de nuestro país, pues ponen de manifiesto por primera vez, aunque sea de forma exploratoria, el riesgo cardiovascular diferencial entre DM1 y población control en nuestro medio. Además, el tamaño muestral es razonable, en especial para pacientes con DM1 y sujetos control analizados (más de 3.000 en total), lo que supone otra de las fortalezas de nuestro trabajo.

En resumen, también en nuestro ámbito mediterráneo los pacientes con DM1 tienen comparativamente un mayor riesgo de presentar manifestaciones cardiovasculares que la población general, y al menos similar al de los pacientes con DM2. Estos datos preliminares y de tipo observacional ponen de manifiesto la importancia de llevar a cabo estudios epidemiológicos no solo en pacientes con DM2, sino también en DM1, con el fin de conocer más en profundidad la relación entre diabetes y ECV y poder poner en marcha intervenciones específicas de carácter preventivo y terapéutico.

Conflicto de intereses

En relación con este manuscrito los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.

Agradecimientos

Agradecemos al personal de campo (enfermeras y dietistas), a las personas que participaron en el estudio y al resto de los componentes del grupo Di@bet.es, así como a los médicos que han cumplimentado el Registro Público Catalán de Infusores Subcutáneos Continuos de Insulina, su ayuda, sin la cual este trabajo no hubiese sido posible. El estudio Di@bet.es fue financiado por el CIBERDEM y la Sociedad Española de Diabetes, y apoyado por el Ministerio de Sanidad y Consumo.

Anexo

Integrantes del grupo Di@bet.es: Federico Soriguer, Gemma Rojo-Martínez, Anna Bosch-Comas, Elena Bordiu, Alfonso Calle-Pascual, Rafael Carmena, Roser Casamitjana, Luis Castaño, Conxa Castell, Miguel Catalá, Elias Delgado, Josep Franch, Maria Sonia Gaztambide, Juan Girbés, Albert Goday, Ramón Gomis, Alfonso Lòpez-Alba, M. Teresa Martínez-Larrad, Edelmiro Menéndez, Inmaculada Mora, Emilio Ortega, Gemma Pascual-Manich, Manuel Serrano-Ríos, Sergio Valdés, José Antonio Vázquez y Joan Vendrell.

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