Objetivos: El ictus isquémico agudo en el contexto de una malformación arteriovenosa (MAV) es un fenómeno infrecuente. Las principales causas son el fenómeno de robo vascular, la embolización accidental durante el tratamiento y la trombosis de la arteria nutricia tras la exéresis quirúrgica. Presentamos un caso de una MAV rota asociada a un ictus vertebrobasilar concomitante.

Material y métodos: Mujer de 61 años sin antecedentes relevantes que presenta una cefalea súbita con disminución del nivel de consciencia progresiva.

Resultados: El TC basal muestra un hematoma cerebeloso hemisférico izquierdo e hidrocefalia. El angioTC muestra una oclusión del tercio medio de la arteria basilar distal a la arteria cerebelosa anteroinferior (AICA) que se encuentra hipertrofiada sugiriendo la presencia de una MAV asociada. Se realiza trombectomía mecánica de la oclusión basilar consiguiendo reperfusión completa tras un pase. La arteriografía confirma la MAV con la AICA como arteria nutricia. Tras la derivación ventricular externa se procede a la evacuación quirúrgica emergente del hematoma y exéresis de la MAV. Tras el tratamiento la paciente presenta una mejoría clínica significativa persistiendo un síndrome cerebeloso.

Conclusión: Esta relación anatómica-vascular sugiere como hipótesis plausible que la trombosis aguda de la arteria basilar haya causado una redistribución del flujo hacia las ramas nutricias (AICA) de la MAV previas a la oclusión generando una sobrecarga de flujo del nidus y su eventual rotura. El abordaje multidisciplinar fue la clave para el éxito terapéutico.