Objetivos: El `síncope’ (pérdida transitoria y autolimitada de conciencia que conlleva una incapacidad para mantener del tono muscular, recuperado espontáneamente) es un síntoma de consulta muy frecuente en un Servicio de Urgencias, y posee una larga lista de posibles causas, mayoritariamente benignas. La anamnesis y la exploración física son los pilares diagnósticos según la evidencia. Pretendemos estudiar la frecuencia con la que, en nuestra población (hospital de tercer nivel), se encuentran hallazgos positivos en TC y cuáles son estos.

Material y métodos: Se recogieron informes radiológicos y de estancia en el Servicio de Urgencias de aquellos pacientes con una TC craneal basal marcando “síncope” en la aplicación de peticiones electrónicas de nuestro centro. Se comparan los resultados tomográficos positivos (hemorragias [subdurales, subaracnoideas, parenquimatosas o intraventriculares], isquemias [aguda o subagudas] o trombosis [venosas]) con los motivos de consulta y la exploración clínica remitidas en los informes clínicos.

Resultados: De 462 TC realizadas, 64 (14%) tienen hallazgos “positivos”, principalmente relacionados con procesos isquémicos (18 agudos, 12 subagudos) y hemorrágicos (15 hematomas intraaxiales con variable afectación ventricular y subaracnoidea; además de hemorragias subdurales [4] y subaracnoideas [8]). El análisis preliminar de los informes clínicos demuestra que algunas peticiones no se ajustan a la definición de síncope.

Conclusiones: El síncope es un motivo de consulta frecuente que no suele mostrar hallazgos en TC, en probable relación con su abanico etiológico mayormente benigno. La TC debería limitarse a casos con déficits neurológicos o antecedentes traumáticos, a fin de limitar la dosis de radiación a la que quedan expuestos los pacientes.