Las nuevas tecnologías de la información se están incorporando a casi todos los aspectos de nuestra actividad personal y profesional, lo que nos obliga a cambiar nuestra manera de hacer las cosas y de resolver nuestras tareas pues se insertan en nuestra vida y, de forma insensible, empiezan a formar parte de nuestra cotidianeidad.

El mundo editorial no sólo no es ajeno a la imposición de las nuevas tecnologías, sino que en muchos casos ha sido pionero, lo que en la mayoría de los casos significa avances y mejoras en los procesos editoriales.

Lo realmente importante de los avances tecnológicos no es su mera incorporación, sino las ventajas tanto reales como percibidas por los usuarios de nuestra revista, los autores, los revisores y los lectores. El objetivo final es que tanto los autores como los lectores la consideren vehículo preferente para la comunicación científica y profesional.

En la actualidad, todos los manuscritos recibidos se envían a través del espacio de autores, pero a partir de noviembre se trabajará para sustituirlo por esta nueva herramienta, más desarrollada e intuitiva. Tradicionalmente, la producción para las plataformas electrónicas (internet) ha sido un proceso posterior al de la producción para la imprenta. En un sistema de producción global, como el de Elsevier, los métodos de producción para el papel e internet están integrados, lo que permite la unificación de la producción y la transformación paralela de los manuscritos. Una de las principales ventajas incide directamente en los autores, ya que este procedimiento acelera la visibilidad real de los artículos en internet, donde estarán presentes incluso antes que en la publicación impresa, por lo que serán citables ya desde el primer momento. Como es sabido, las principales cabeceras internacionales de biomedicina ya se están editando con este nuevo sistema.

En este sentido, desde el 1 de noviembre de 2008 la revista Endocrinología y Nutrición incorporará una serie de cambios tanto en el programa de gestión de manuscritos como en los procesos de producción editorial que podrán percibirse externamente en un nuevo formato de presentar los artículos en la edición impresa de la revista, pero sobre todo esperamos que tengan otro tipo de implicaciones más importantes para autores y lectores, como son la rapidez en la publicación y el aumento de su presencia. Todo ello es el resultado de trabajar en un entorno digital desde la recepción de un artículo hasta su publicación, que suele ser la forma habitual de procesar la información para la mayoría de las revistas internacionales de nuestro entorno.

Elsevier Editorial System (EES) es la adaptación de Elsevier del programa de gestión de manuscritos Editorial Manager, que permite a autores, revisores y editores enviar manuscritos y realizar sus tareas editoriales a través de internet. El usuario debe registrarse y recibirá inmediatamente sus claves de acceso y a partir de ahí puede enviar sus manuscritos. El uso del EES es muy sencillo e intuitivo y guiará al autor a través de los pasos necesarios para cada sección. El programa también permite a los autores seguir la evolución de sus artículos y saber, por ejemplo, si están en proceso de revisión por pares, si los revisores han entregado sus evaluaciones, etc. También los revisores y editores usarán el programa para sus evaluaciones, lo que permitirá agilizar la valoración de los manuscritos y optimizar los tiempos editoriales.

Para que la adaptación al nuevo sistema sea más fácil, los usuarios cuentan con manuales de uso y con un servicio de ayuda de 24 horas (en inglés) y además se puede dirigir las consultas en español, en horario laboral, al teléfono 932 406 176 o a través del correo electrónico ayuda-ees@elsevier.com

Así pues, desde el 1 de noviembre los colaboradores podrán empezar a trabajar con el sistema EES en http://ees.elsevier.com

La política editorial de la Revista, los proyectos que tenemos en marcha y los procedimientos para la toma de decisiones seguirán siendo los mismos; las nuevas tecnologías sólo afectarán a los procesos de producción editorial, invisibles para la gran mayoría de los usuarios de la revista, pero con consecuencias importantes para todos ellos, ya que el objetivo final será la publicación electrónica rápida e individual de los artículos aceptados, tanto en internet como en los índices y las bases de datos donde está indexada.

Desde la introducción de los cambios, los artículos aceptados se publicarán en forma de avance online en la web de la Revista y podrán ser citados mediante DOI (digital object identifier), así como por el acrónimo de la Revista y el año de publicación. Después, esos mismos artículos se publicarán en la versión impresa de la Revista, que seguirá distribuyéndose como en la actualidad. La ventaja de este sistema consiste en reducir los tiempos de publicación en internet unas 6 semanas desde su aceptación y prolongar su visibilidad para que pueda ser citado por el resto de la comunidad científica.

Estas ventajas son posibles gracias a las herramientas que hoy proporcionan los avances tecnológicos; como decíamos antes, nuestra integración en la era digital. El cambio conceptual es la publicación inicial digital frente a la publicación posterior en papel, y no al revés, como ha venido sucediendo hasta ahora.

El máximo aprovechamiento del gestor de manuscritos y del sistema de producción editorial se producirá cuando ambos estén conectados entre sí, lo que permitirá integrar los procesos de corrección, composición de la maqueta, envío de pruebas de autor y compaginadas. Además, al utilizar el lenguaje XML (internet) para la preparación de los manuscritos, éstos estarán preparados para su publicación adelantada en cualquier plataforma electrónica, tanto de Elsevier (ScienceDirect, SCOPUS, EMBASE y la web de la Revista en Elsevier España) como otras bases de datos internacionales.

Otra consecuencia destacada de la integración de la Revista en el sistema de producción global de Elsevier será el cambio de maquetación, lo que va a favorecer la lectura de los artículos, su comprensión y su adaptación a las necesidades científicas. Asimismo se acelerarán los tiempos de publicación, lo que redundará positivamente en la Revista y sus autores.

Una de las grandes consecuencias y ventajas de todos estos cambios será la presencia de los manuscritos en el portal ScienceDirect, a través del cual la comunidad científica internacional accede a prácticamente 9 millones de artículos (más de un 25% de la información científica mundial publicada electrónicamente) de cerca de 2.500 revistas y de más de 6.000 libros. Sirva como dato de su potencial que todos los días se producen 36 descargas de artículos cada segundo y que se producen más de 11 millones de conexiones simultáneas.

El compromiso del Comité Editorial para liderar estos cambios va a suponer una gran mejora de la calidad editorial de la Revista, fruto de la colaboración entre nuestra sociedad y la primera editorial biomédica mundial, y nos permitirá ofrecer una mejor calidad en todos los sentidos tanto a los autores como a los lectores, lo que redundará, sin duda, en un gran beneficio para la Revista y para nuestra especialidad.