La telemedicina es definida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la práctica de la atención médica con la ayuda de comunicaciones interactivas de sonido, imágenes y datos; ello incluye la prestación de asistencia médica, la consulta, el diagnóstico y el tratamiento, así como la enseñanza y la transferencia de datos médicos1. Aunque es un sistema para la atención de pacientes que se viene empleando desde finales del sigloxx, ha venido creciendo en cuanto a disponibilidad y uso en diferente países a lo largo de las últimas décadas, en especial gracias al acelerado desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación.
El uso de la telemedicina para la atención de pacientes reumáticos ha venido en ascenso en los últimos años, en primera medida por la centralización del recurso humano especializado en reumatología en las grandes ciudades, con menor disponibilidad de reumatólogos para ciudades intermedias y áreas rurales, y adicionalmente por el escaso número de reumatólogos para cubrir la demanda de atención en la especialidad, lo cual fue corroborado por un estudio reciente liderado por la Liga Panamericana de Asociación de Reumatología (PANLAR), en el que se documentó que en Latinoamérica se cuenta con un reumatólogo por cada 106.938 habitantes, y en el caso específico de Colombia hay un reumatólogo por cada 253.255 habitantes, lo cual ubica a nuestro país en la posición 14 entre 19 países de la región2.
Con el advenimiento de la pandemia por el SARS-CoV-2, el uso de la telemedicina se aceleró de forma abrupta, puesto que fue la única forma de atención que tuvieron los pacientes en muchas partes del mundo, inicialmente debido a los periodos de cuarentena decretados por los gobiernos locales y nacionales en los diferentes países, y asimismo por el miedo que pudieron sentir los pacientes de asistir a los servicios de consulta externa presenciales, en especial los pacientes reumáticos, quienes por los tratamientos inmunomoduladores de base percibieron una mayor vulnerabilidad de enfermar de Covid-19. La emergencia por el nuevo coronavirus llevó a unos cambios sin precedentes en la atención de los pacientes, incluyendo la reestructuración de los servicios de consulta externa de los hospitales y una rápida transición a la atención virtual.
Mehrotra et al.3 reportaron que, en un muy corto tiempo, la Covid-19 promovió un rápido cambio de la atención personalizada a teleconsulta en la atención de pacientes en cuidado primario; cambios que normalmente hubiesen tomado meses de planeación, ajustes e implementación, se dieron en solo semanas debido a la compleja situación de pandemia. En este orden de ideas, la telemedicina se cimentó en estos tiempos como una forma para atender pacientes; sin embargo, desde antes de la pandemia, algunos grupos, como el del doctor Luis Javier Cajas en la Clínica Universitaria Colombia, vienen trabajando en la atención de pacientes reumáticos en teleconsulta, como resultado de lo cual han logrado una experiencia significativa que comparten en este número de la REVISTA COLOMBIANA DE REUMATOLOGÍA.
En su publicación los doctores Cajas y López describen 1.905 pacientes atendidos en teleconsulta de reumatología entre agosto del 2017 y marzo del 2020, con un total de 4.864 consultas, las cuales se realizaron con un médico reumatólogo en el sitio de recepción, así como un médico general en la mayoría de los casos, un familiarista o un internista encargado de examinar a los pacientes en el lugar de origen de la consulta. Los diagnósticos más frecuentes fueron, en orden de frecuencia, artritis reumatoide, osteoartrosis, dolor articular, mialgia y lupus, de forma similar a lo reportado por Rezaian et al.4, quienes, en un estudio realizado en Irán con 4.800 pacientes, encontraron que las dos enfermedades reumáticas más frecuentemente atendidas en el contexto de la telemedicina fueron la osteoartrosis y la artritis reumatoide.
La información disponible en la literatura científica sobre telemedicina ha venido creciendo en forma exponencial en los últimos años. En 1993 se indexó como término Mesh la palabra «Telemedicine» en Medline5, y el número de artículos sobre el tema ha crecido año tras año, pasando de 70 artículos publicados en 1993 a 4.813 en 2020, y 1.344 en lo corrido del 2021 al día 13 de mayo6. El trabajo de Cajas y López se convierte en una de las primeras experiencias publicadas en Colombia sobre la atención de pacientes reumáticos mediante el uso de telerreumatología, por lo cual aporta valiosos datos a la comunidad científica y hace más robusta la información disponible sobre el tema en la literatura. Ojalá otros grupos de investigación en Colombia se motiven a publicar sus experiencias con el uso de telerreumatología, para tener más y mejores datos que permitan aportar al proceso de mejoramiento de este tipo de atención a pacientes reumáticos en Colombia.