Un hombre adulto medio con antecedente de trauma en la rodilla izquierda, con dolor crónico, sin mejoría al manejo conservador y al cual se le realizó una resonancia magnética de la rodilla derecha con evidencia de una lesión parcial grado II del ligamento colateral medial con calcificación de la inserción femoral.
An average adult male with a history of trauma to the left knee with chronic pain that did not improve with conservative management underwent magnetic resonance imaging of the right knee with evidence of a grade II partial lesion of the medial collateral ligament with calcification of the femoral insertion.
El ligamento colateral medial es un importante estabilizador de la articulación de la rodilla. Es el ligamento más comúnmente lesionado en la rodilla, particularmente en los atletas, y se ha informado que se desgarra en el 7,9% de todas las lesiones de la rodilla1. A continuación, se presenta un paciente con un trauma directo en la rodilla con dolor crónico y disminución del rango de movimiento de la articulación con el diagnóstico de lesión de Pellegrini-Stieda.
Un paciente de 35 años de edad, ciclista aficionado, consulta por un cuadro de 6 meses de dolor en la rodilla izquierda con limitación funcional posterior a un trauma contuso con su bicicleta. En el examen físico inicial presenta dolor en la palpación de la cara medial de la rodilla izquierda, sin inflamación ni signos de trauma, se le manejó de manera conservadora con antiinflamatorios y reposo, sin embargo, por la persistencia de dolor y la limitación funcional en la rodilla izquierda reconsulta; se le realizó una resonancia en la rodilla izquierda (fig. 1) que evidenció cambios degenerativos tricompartimentales femorotibial lateral, lesión parcial grado II del ligamento colateral medial con calcificación de la inserción femoral (lesión de Pellegrini-Stieda),por lo que se le brindó terapia de rehabilitación física por 3 semanas.
Las lesiones de Pellegrini-Stieda, son llamadas así por los cirujanos italianos y alemanes de principios del siglo XX Augusto Pellegrini y Alfred Stieda; se definen como osificaciones del ligamento colateral medial en o cerca de su inserción proximal en el cóndilo femoral medial2. La incidencia es desconocida, pero parece que es mayor en los hombres que en las mujeres, y su presentación es rara en los niños y los ancianos. Se manifiesta con mayor frecuencia entre los 25 y 40 años3, esto se puede dar por macro- o microtraumatismos repetitivos, conduce al mismo resultado: osificación calcificada de las estructuras de tejido blando que rodean al cóndilo femoral medial. En los casos asociados con una lesión de la médula espinal o una lesión cerebral traumática, se observa la precipitación neurogénica de la formación de hueso4. Una observación que se hace regularmente en las radiografías convencionales de la rodilla, es una sombra ósea en el lado medial del fémur. La mayoría de las veces, no hay correlación con las quejas del paciente, por lo que el uso de la resonancia magnética puede ser una mejor opción para valorar la lesión en la rodilla5.
Fuente de financiaciónNinguna.
Conflicto de interesesNo existe ningún tipo de conflicto de intereses por parte de los autores.
