El linfedema de pene y escroto es una enfermedad rara en los países desarrollados, aunque es relativamente frecuente en países orientales. La causa más frecuente es la filariasis1, si bien en nuestro medio suele encontrarse asociada a procesos neoplásicos, inflamatorios, postquirúrgicos, secuelas por radioterapia, disbalances hidroelectrolíticos y procesos idiopáticos.
Presentamos un paciente de 22 años que presenta linfedema penoescrotal secundario a hidrosadenitis inguinal de larga evolución. Tras fracasar el tratamiento conservador se somete a tratamiento quirúrgico consistente en resección de piel y tejido celular subcutáneo del pene hasta fascia de Buck y cobertura con injerto de piel parcial de muslo. Dadas las características de la zona anatómica, el tratamiento conservador es difícil y poco satisfactorio, por lo que la exéresis completa de la piel y la cobertura posterior con injertos es una opción terapéutica segura y eficaz.
Penoscrotal lymphedema is a rare disease in the developed countries, although it is relatively frequent in tropical countries. The most common cause is filariasis, although in our practice usually is associate to neoplasic and inflammatory processes, surgery, radiotherapy, hidroelectrolitic disbalances and idiopathic.
We present a 22 years old patient with penoscrotal lymphedema due to hidradenitis suppurativa. After unsuccessful medical treatment, was performed a total excision of the penile skin and subcutaneous tissue to Buck’s fascia. Split thickness skin grafts were used to cover the defect. Even medical management of penoscrotal lymphedema is not effective for most patients, surgery is a safe and effective procedure that gives excellent functional and cosmetic results.