Introducción: A pesar de que las complicaciones proctológicas son un factor de morbilidad y de calidad de vida de los pacientes sometidos a una cirugía bariátrica malabsortiva, su incidencia y prevalencia en nuestro medio no ha sido correctamente estudiada. El objetivo del estudio es evaluar la incidencia y prevalencia de la patología anal benigna en pacientes sometidos a una derivación biliopancreática.

Métodos: Estudio descriptivo en el que se incluyen todas las derivaciones biliopancreáticas realizadas entre 1999 y 2015. Las variables analizadas fueron sexo, valores antropométricos previos a la cirugía, técnica quirúrgica (abierta o laparoscópica), tipo de deposiciones, la presencia de patología anal así como el tipo (fisura, hemorroides, incontinencia), y la influencia de esta sobre el número de visitas a urgencias o la necesidad o no de intervención posterior.

Resultados: Se analizaron 277 pacientes, 209 mujeres (75,5%) y 68 hombres (24,5%). La media de peso de los pacientes operados fue de 139,3 Kg con un IMC de 52,2 kg/m². En el 74% de los casos se realizó una técnica abierta y en el 26% laparoscópica. 195 pacientes (75,6%) presentaron alteración del hábito deposicional durante el primer año tras la intervención, manteniéndose un porcentaje similar (73,9%) a los 5 años de seguimiento. La incidencia de patología anal tras 1, 5 y 10 años de seguimiento fue, respectivamente, 47 (17,3%), 28 (12,7%) y 24 pacientes (15,3%). La patología más frecuente fue la aparición de hemorroides en 32 pacientes (11,8%) durante el primer año. Con una prevalencia a los 10 años de seguimiento de 10,2%. 15 pacientes padecieron fisura anal (5,5%) durante el primer año, con una prevalencia a los 10 años de 3,8%. Ninguno de los pacientes de nuestra serie presentaron incontinencia fecal durante los primeros 5 años de seguimiento, siendo la prevalencia a los 10 años de 1,3%. De los pacientes afectados a los 10 años, el 76% presentaban síntomas, el 28% había acudido al menos una vez a urgencias por ese motivo y el 20% precisó finalmente cirugía proctológica.

Conclusiones: La patología anal tiene una incidencia y una prevalencia considerable a los 10 años de seguimiento en nuestra serie. La línea de trabajo futura tratará de estudiar factores de riesgo asociados, así como la influencia en la calidad de vida de estos pacientes para poder entender mejor el alcance de esta patología.