10 - HUELLA METABÓLICA DE LA ACROMEGALIA Y SU POTENCIAL EMPELO EN LA PRÁCTICA CLÍNICA
aUnidad de Diabetes y Metabolismo. Vall d'Hebron Institut de Recerca. Barcelona. bVall d'Hebron Institut de Recerca. Barcelona. cCIBERDEM. dHospital Universitari de Vic. eCentro de Investigación Príncipe Felipe. Madrid.
Introducción: La acromegalia deteriora la calidad de vida y aumenta la morbi-mortalidad cardiovascular. Aunque los niveles circulantes de GH e IGF1 son los objetivos de control, estos no se correlacionan de forma estrecha con el comportamiento tumoral, la respuesta a fármacos, las comorbilidades o la calidad de vida de estos pacientes. La metabolómica es una herramienta de investigación que hemos utilizado para examinar de forma no dirigida la huella metabólica tras la exposición crónica a la GH.
Objetivos: Identificar metabolitos y/o vías metabólicas que puedan ser empleados como marcadores de presencia y actividad de la acromegalia.
Métodos: Se comparó la huella metabólica del suero de 30 pacientes con acromegalia (5 activos, 14 en tratamiento médico y 11 en remisión) con 30 controles equiparados por edad, sexo, índice de masa corporal y tabaquismo.
Resultados: Ambas cohortes no tenían diferencias respecto a la presencia de factores de riesgo cardiovasculares clásicos, incluido el HOMA-IR. Los pacientes con acromegalia en comparación con el grupo control presentaron un descenso en los aminoácidos ramificados (BCAA) valina e isoleucina: valina: 4,50 ± 0,21 UA frente a 5,26 ± 0,17 UA, p < 0,05; isoleucina: 2,48 ± 0,02 UA frente a 2,80 ± 0,08 UA, p < 0,05. Asimismo, los BCAA fueron más bajos en aquellos pacientes con enfermedad activa en comparación con los pacientes con IGF-1 sérico normal: valina 4,35 ± 0,23 UA frente a 5,01 ± 0,12 UA, p < 0,05; isoleucina 5,10 ± 0,32 frente a 5, 62 ± 0,28 AU, p < 0,05.
Conclusiones: La disminución en los BCAA fueron los principales componentes de la huella metabólica en los pacientes acromegálicos y este descenso fue más pronunciado en la acromegalia activa. Este hallazgo podría ayudar a identificar pacientes con enfermedad activa, monitorizar respuesta a tratamientos y abrir una nueva área de investigación de apoyo nutricional adyuvante en estos pacientes. Sin embargo, se necesitan más estudios para confirmar estos resultados preliminares.