Introducción: La caracterización de la ingesta alimentaria previa al diagnóstico de pacientes con diabetes gestacional (DMG) puede resultar interesante para planificar una correcta intervención nutricional y para valorar la adhesión al posterior tratamiento nutricional.

Objetivos: Evaluar retrospectivamente la ingesta de alimentos de una muestra de pacientes con DMG y valorar su adecuación a las recomendaciones de consumo por grupos de alimentos.

Material y métodos: De abril a diciembre de 2016, una muestra de 50 pacientes con DMG de reciente diagnóstico, ha sido entrevistada por una dietista-nutricionista empleando un Cuestionario de Frecuencia de Consumo de Alimentos. El tamaño y número de raciones recomendadas se estipularon en base a las recomendaciones de SEDCA 2016 “Recomendaciones de alimentación en población española”.

Resultados: Farináceos: para arroz, pasta, pan y patata, la media fue 3,2 raciones/día (R/d); predominando el consumo de 2-3 R/d de pan blanco por el 38% de la muestra; el arroz, la pasta y la patata se alternaron con un consumo de 2-4 raciones/semana (R/s) para el 62%, el 64% y 54% de la muestra respectivamente. De los cereales integrales sólo cabe destacar el pan integral, 2-3 R/día por un 10% de las entrevistadas. Lácteos: la media fue 2,6 R/d, predominando entre éstos la leche semidesnatada con un 58%, el yogur azucarado un 18% y queso curado-semicurado un 20% del total de la muestra, dentro de las categorías de leche, yogur y queso. Frutas y verduras: el 62% de la muestra afirma consumir fruta diariamente con una media de 1,5 R/d y verduras un 54% con una media de 1,4 R/d. Se destaca que un 52% consume al menos una ración diaria de verduras en crudo. Alimentos proteicos: hay preferencia por la carne frente al pescado (0,8 vs 0,5 R/d), aunque este último se complementa con las conservas de pescado con 1,3 R/s. El consumo de huevos ha resultado ser de 2,8 R/s. Para la proteína de origen vegetal se contabilizan 1,8 R/s de legumbres y 3,4 R/s de frutos secos. Alimentos de consumo ocasional: como procesados cárnicos y dulces-bollería-refrescos han tenido una ingesta de 1 R/d y 1,9 R/d respectivamente, donde los productos a destacar fueron fiambre y chocolate.

Conclusiones: Las pacientes estudiadas presentan deficiencias importantes en el consumo de productos integrales, frutas y verduras, pescado fresco, legumbres y frutos secos, y se aprecia la ingesta elevada de alimentos no recomendados con gran cantidad de azúcar y/o grasas no saludables como son el yogur azucarado, productos cárnicos procesados o bollería industrial. Existen deficiencias en la alimentación previa al diagnóstico de un grupo de pacientes con DMG, por lo que sería interesante un estudio más en profundidad de la relación entre la alimentación y el diagnóstico de DMG.