La especialidad de Endocrinología y Nutrición (EyN) vive actualmente una situación particular caracterizada por: 1) Un auge en la superespecialización, que aumenta la profundidad sectorial del conocimiento, pero puede facilitar la fragmentación si este proceso no se desarrolla en torno al tronco común de la especialidad. 2) La necesidad imperiosa que plantea la sociedad de avanzar en patologías de máxima prevalencia e impacto socio-sanitario como la obesidad, diabetes, alteraciones del estado nutricional y la osteoporosis, 3) La imprescindible relación con otras especialidades que atienden pacientes con estas patologías, y 4) Su necesaria participación en el diagnóstico y tratamiento de otras entidades que reconocen elementos propios de la EyN como enfermedades neurodegenerativas, psiquiátricas y oncológicas entre muchas otras 1.
Todo ello debe conjugarse con las perspectivas en el desarrollo de nuevos programas de educación médica 2 que modificarán las estructuras asistenciales, docentes, investigadoras y de gestión en los próximos años.
Los cambios en la metodología docente, sustentados en parte por la aplicación de nuevas tecnologías que han emergido vigorosamente en la situación actual de pandemia por COVID-19, se orientarán hacia la formación de especialistas particularmente dotados para el trabajo multidisciplinar que facilite la colaboración entre diferentes especialistas. Las características de la EyN, con su gran penetración en la totalidad de disciplinas médicas y quirúrgicas y su estrecha interrelación con la investigación básica 3, ocupa una posición central en estos nuevos abordajes educacionales, que están llamados a sentar las bases para la modificación de la práctica endocrino-nutricional en todos los ámbitos educativos, tanto en los periodos de pregrado como de postgrado y formación continuada.
Docencia PregradoLa modernidad docente contempla la implantación progresiva del curriculum integrado, que cambiará de forma sustancial la metodología educativa del conocimiento en EyN 4,5. La transición no será fácil, rápida ni estará exenta de dificultades, pero algunas Facultades de Medicina ya han comenzado a caminar en esa dirección 5.
De momento, la potenciación de la formación en la resolución de casos clínicos puede adaptarse bien a los métodos docentes clásicos mediante su incorporación a seminarios conjugada con programas establecidos de pasantías clínicas que se realizan en los servicios de EyN.
La integración curricular promueve la interrelación entre materias para educar al estudiante en el marco de la coordinación simultánea clínico-básica y en la actuación multidisciplinar para la resolución de problemas asistenciales, de investigación y de gestión 4,5. Todo ello se articula sobre la base de una metodología docente nueva basada en clases inversas, docencia basada en resolución de problemas y en el trabajo en equipo, alejándose de las clásicas lecciones magistrales para introducirse en el trabajo fuera del aula, en el autoaprendizaje activo y en la comunicación interpersonal. El resultado se orienta a la adquisición de competencias que se evaluarán por procedimientos diferentes a los clásicos exámenes. La integración estrecha la relación entre las ciencias básicas con las disciplinas clínicas, enriqueciendo su participación multilateral y generando un conocimiento más sólido que permita alcanzar una perspectiva holística del conocimiento médico 4,5. Una de sus consecuencias más relevantes se refiere al necesario aumento en el atractivo de la EyN 6, como disciplina transversal presente en el núcleo de la práctica totalidad de enfermedades, en los estudiantes de Medicina y su repercusión en la elección de especialidad tras finalizar los estudios de grado.
No obstante, la instauración del currículum integrado no debe marginar el conocimiento de patología aparentemente menos frecuente como la de origen hipofisario, suprarrenal o gonadal que, requiriendo de equipos multidisciplinares, se mantiene en lo más alto del estandarte de la especialidad. La adaptación de la EyN al currículum integrado se asocia con un compromiso de iniciativa y liderazgo 7 que debe mostrarse también desde la docencia universitaria. El impacto de este cambio en los programas docentes conlleva una continuidad necesaria en la docencia de postgrado.
Docencia PostgradoLa desestimación del programa de troncalidad abre nuevas expectativas en los programas de formación de residentes basados en la adquisición de competencias con las consiguientes innovaciones en el área de la evaluación. Nos encontramos, por tanto, en un momento crítico para diseñar los nuevos programas formativos. En esta labor los equipos ministeriales deberán interactuar con las Comisiones Nacionales de las Especialidades y con las Sociedades Científicas correspondientes para generar un programa moderno, que en el caso de la EyN debe aspirar a fortalecer la formación en áreas estratégicamente relevantes como la Diabetes, Obesidad, Nutrición, el carácter multidisciplinario de la especialidad y el aprendizaje en Investigación y Gestión, en consonancia con el enfoque estratégico de la SEEN 8. Las rotaciones por otras unidades nacionales y/o internacionales complementan la formación del residente siempre y cuando no menoscaben su trayectoria en su propio servicio, ya que permiten explorar otras sistemáticas de trabajo, facilitan el aprendizaje por especialistas más experimentados en áreas concretas y aportan al servicio importación de conocimiento y oportunidades de perfeccionamiento y colaboración. La formación en investigación debe convertirse en prioritaria, especialmente para que aquellos residentes que muestren interés y aptitud para optar por un camino complementario o alternativo al clásico dominado por la actividad asistencial. Investigar significa avanzar. No es frecuente que los servicios de EyN con docencia acreditada cuenten con unidades de investigación básica que posibiliten el desarrollo de investigación traslacional. Las necesidades formativas de especialistas en EyN no permiten restringir las acreditaciones a los servicios que incluyan laboratorios de investigación. Es por ello que es preciso explorar nuevas opciones de colaboración. En nuestra especialidad contamos con distintos ejemplos que demuestran que esto es posible mediante la identificación de nodos nacionales o comunitarios que posibiliten ofrecer colaboración a servicios de actividad preferentemente clínica para su acceso a la investigación básica. Esta organización, en la que el gobierno central y los correspondientes autonómicos deben asumir su responsabilidad, expandirá con eficacia la formación integral de nuestros residentes ofreciendo la capacidad para la realización de tesis doctorales y para impulsar la carrera académica y el conocimiento a nivel nacional.
Los nuevos programas docentes requieren incontestablemente la formación de tutores de residentes, que indudablemente precisan de un reconocimiento académico y retributivo de su misión educativa. Los jefes de servicio y de unidad igualmente precisan formación en gestión, sin la que articular la funcionalidad de los diferentes departamentos se convierte en un objetivo frecuentemente inalcanzable.
La evaluación del residente representa un objetivo tan difícil como elemental. Las comisiones de docencia de los hospitales pueden ofrecer normativas que deben ser homogeneizadas por la Administración para garantizar en la medida posible la igualdad en los criterios de valoración.
El residente moderno de EyN debe demostrar capacidad asistencial, docente, investigadora y de gestión configurando un perfil de excelencia 9. Ha de tener aptitud para liderar equipos en las patologías que son centrales en su especialidad, como obesidad, alteraciones nutricionales, diabetes, patología tiroidea, hipofisaria, suprarrenal, gonadal y al menos formar parte de los que atienden patologías relacionadas como las unidades de sueño, hipertensión, riesgo cardiovascular y oncología entre muchas otras. Necesita acreditar una formación tecnológica sólida en procedimientos instrumentales en el ámbito de la ecografía tiroidea, nutricional y vascular, métodos de composición corporal, y tecnología aplicada a la diabetes mellitus y a la evaluación nutricional. Debe contar con suficiente conocimiento para diseñar protocolos competitivos de investigación, capitaneando o colaborando en proyectos en el seno de equipos multidisciplinares. Ha de encontrarse capacitado para la comunicación, incluyendo el dominio del inglés, y el desarrollo de programas educativos orientados a la integración con trabajadores sanitarios, pacientes, población general y administraciones sanitarias. Debe, además, disponer de la posibilidad de optar a plazas de actividad docente y de gestión sanitaria. Necesita sentirse integrado con otros sistemas sanitarios europeos que permita ejercer su movilidad y colaboración con equipos internacionales.
El reto para jefes de servicio, especialistas y tutores de residentes es de gran audacia y magnitud, para lo que la armonía en los servicios es un elemento imprescindible en aras de conseguir una fructífera colaboración interpersonal, eslabón básico en la consecución de tan altas metas.
Formación ContinuadaLa constante y rápida evolución de la EyN requiere contar con recursos para la formación continuada de los especialistas. Los congresos que abarquen la especialidad globalmente, o aspectos parciales de la misma, representan magníficas oportunidades para compartir nuevos avances. La virtualidad no sustituye a la docencia presencial, pero ofrece interesantes perspectivas que probablemente se incorporarán a un modelo mixto. Hoy en día, la colaboración con la industria farmacéutica es estratégicamente importante en este contexto. La interrelación entre las sociedades científicas en España, tanto verticales y de especialidad como la SEEN, como transversales como la SED, SENPE, SEEDO, SEEP o las sociedades de Atención Primaria o Medicina Interna es básica para ofrecer una optimización de conocimientos. Ambos tipos de sociedad son fundamentales para articular tanto las interacciones intraespecialidad como su integración con otros especialistas que confluyen en patologías de amplia implantación poblacional. La connivencia y colaboración entre ambos tipos de sociedades, es elemental para ofrecer solidez y oportunidades a especialistas, estudiantes, pacientes y población general.
La trayectoria y el presente formato de esta revista Endocrinología, Diabetes y Nutrición, representa un magnífico ejemplo en este sentido, que puede contribuir a tender puentes con otras sociedades transversales de nuestro entorno para sumar fuerzas ante las posibles eventualidades que la especialidad a buen seguro deberá afrontar.