Hasta la fecha se han identificado más de 200 virus pertenecientes a 6 familias taxonómicas diferentes asociados con la infección del tracto respiratorio humano. La utilización generalizada de métodos moleculares en los laboratorios de microbiología clínica no sólo ha aportado grandes ventajas al diagnóstico de estas infecciones, sino también está permitiendo profundizar en el conocimiento de la enfermedad y el comportamiento epidemiológico de los virus causantes. Esta tecnología incrementa de manera notable el rendimiento de detección de virus en las muestras respiratorias, debido a su elevada sensibilidad en comparación con las técnicas clásicas y a la posibilidad de identificar virus no cultivables o de crecimiento fastidioso en las líneas celulares habituales, lo que permite realizar el diagnóstico etiológico con mayor rapidez. Sin embargo, también comporta algunos inconvenientes, como son detectar virus que se encuentran colonizando la mucosa respiratoria de personas asintomáticas, o en secreciones de pacientes que ya se han recuperado de una infección pasada, a consecuencia de excreción prolongada de éstos. La secuenciación de los productos obtenidos en la reacción de amplificación genómica permite caracterizar de forma adicional los virus detectados mediante su genotipado, realizar estudios de epidemiología molecular e identificar resistencias a determinados antivirales, por citar sólo algunos ejemplos.
To date, more than two hundred viruses, belonging to six different taxonomic families, have been associated with human respiratory tract infection. The widespread incorporation of molecular methods into clinical microbiology laboratories has not only led to notable advances in the etiological diagnosis of viral respiratory infections but has also increased insight into the pathology and epidemiological profiles of the causative viruses. Because of their high sensitivity, molecular techniques markedly increase the efficiency of viral detection in respiratory specimens, particularly those that fail to propagate successfully in common cell cultures, thus allowing more rapid etiologic diagnosis. However, there are also some disadvantages in the use of these new technologies such as detection of viruses that merely colonize the respiratory tract of healthy people, or those found in the nasopharyngeal secretions of patients who have recovered from respiratory infections, due to longterm viral shedding, when the viruses are unlikely to act as pathogens. Additionally, sequencing of the amplification products allows further characterization of detected viruses, including molecular epidemiology, genotyping, or detection of antiviral resistance, to cite only a few examples.