Grupo de Consenso Español sobre Profilaxis Postexposición No Ocupacional al Vih. A pesar de la falta de evidencia sobre la eventual eficacia y efectividad de la profilaxis postexposición no nosocomial, pero teniendo en cuenta su plausibilidad biológica, el empleo de fármacos antirretrovirales (ARV) en determinadas exposiciones accidentales o esporádicas se ha empezado a considerar una práctica clínica habitual, para evitar el desarrollo de la infección.
Estudios previos realizados en España han puesto de manifiesto tanto la demanda como la dispensación de ARV como profilaxis postexposición y, sobre todo, la diversidad e inconsistencia de los criterios utilizados. En este contexto, el Centre d’Estudis Epidemiològics sobre la Sida de Catalunya (CEESCAT) (Departament de Sanitat i Seguretat Social de la Generalitat de Catalunya) en colaboración con el Plan Nacional sobre el Sida y Grupo de estudio de Sida (GESIDA) promovió en abril del 2000 la creación de un grupo de trabajo para la elaboración de unas recomendaciones de profilaxis postexposición al VIH fuera del contexto sanitario. Las recomendaciones se han realizado teniendo en cuenta el carácter excepcional de la exposición, el tiempo transcurrido desde ésta, así como la valoración del riesgo de infección según el tipo de exposición y la información disponible de la fuente de contagio. Las recomendaciones incorporan además las medidas de actuación inmediata necesarias, así como las medidas de prevención y seguimiento clínico necesarias tanto para el VIH como para otros agentes infecciosos. Toda pauta de profilaxis postexposición se ha de iniciar antes de transcurridas 72 h de la exposición, administrándose las dosis diarias adecuadas durante 4 semanas de dos inhibidores de la transcriptasa inversa nucleósidos (ITIN) y un inhibidor de la proteasa (IP), o 2 ITIN y un inhibidor de la transcriptasa inversa no nucleósido (ITINN), teniendo en cuenta la situación farmacológica y clínica de la persona fuente. Estas recomendaciones deberán actualizarse periódicamente.
Evidence is lacking on the possible efficacy and effectiveness of non-occupational postexposure prophylaxis (PEP). However, because of its biological plausibility, the use of antiretroviral (ARV) drugs to prevent the development of infection in certain cases of accidental or sporadic exposure has begun to be considered as common clinical practice.
Previous studies performed in Spain have demonstrated both the demand and the prescription of ARV as PEP and especially the diversity and inconsistency in the criteria used. In this context, in April of 2000 the Centre for Epidemiological Studies on AIDS of Catalonia (CEESCAT) (Department of Health and Social Security of the Autonomous Government of Catalonia), in collaboration with the National AIDS Plan and the AIDS Study Group (GESIDA), promoted the creation of a working group for the drafting of recommendations for PEP against HIV outside the occupational health context. The recommendations have been made bearing in mind the exceptional character of the exposure, the time elapsed since exposure, as well as evaluation of the risk of infection according to the type of exposure and the information available on the source of infection. In addition, the recommendations include the immediate measures necessary, as well as the preventive measures and clinical follow-up required both for HIV and for other infectious agents. All PEP regimens should be started within 72 hours of exposure and appropriate daily doses of two nucleoside reverse transcriptase inhibitors (NRTIs) and a protease inhibitor (PI), or two NRTIs and a non-nucleoside reverse transcriptase inhibitor (NNRTIs), should be administered for four weeks, bearing in mind the pharmacological and clinical situation of the source person. These recommendations should be updated periodically.