Las decisiones de representación y los “testamentos vitales” no son más que una prolongación de la incorporación de la autonomía moral de los pacientes a la toma de decisiones clínicas. Dicha autonomía debe tratar de respetarse incluso cuando el sujeto, por su enfermedad, no esté capacitado para decidir. Por eso, desde la entrada en vigor del Convenio de Oviedo, nuestro país ha padecido una avalancha de legislación, primero autonómica y luego estatal, que ha legitimado las ahora denominadas “instrucciones previas” o “voluntades anticipadas”. La Ley 41/2002, de 14 de noviembre, Básica Reguladora de la Autonomía del Paciente, constituye,por su carácter de básica, la pieza legislativa clave. El presente trabajo, partiendo de un breve análisis de la experiencia norteamericana en este campo, trata de mostrar que la manera más adecuada de hacer efectivo este derecho de los pacientes no es centrarse en los documentos de instrucciones previas, sino desarrollar procesos integrales de participación denominados “Planificación anticipada de las decisiones”. El artículo defiende que la enfermería es una pieza clave para su desarrollo, bien mediante el impulso a la gestión enfermera de casos, bien en el marco del proceso de enfermería orientado por patrones funcionales
Decisions on representation and “living wills” are no more than a prolongation of the incorporation of the patient's moral autonomy in clinical decision-making. All attempts should be made to respect this autonomy even when, due to disease, the patient is unable to make decisions. Consequently, since the Agreement of Oviedo came into force, Spain has witnessed an avalanche of legislation, first autonomic and then state legislation, that has legitimized what are now known as “prior instructions” or “advance directives”. Because it is a basic law, Act 41/2002 of November 14th, regulating patient autonomy, constitutes thekey piece of legislature. Based on a brief analysis of the US experience in this field, the present article aims to show that the most effective way of implementing this right is not to focus on prior instruction documents but to develop processes of participation known as “advance planning”. The article argues that nursing is a key element in the development of this process, whether through nursing management of patients or within the nursing process directed toward functional health patterns