Las crisis hipertensivas constituyen una causa de consulta frecuente en los servicios de Urgencias. Existe alguna dificultad para establecer un diagnóstico diferencial entre lo que supone una emergencia o una urgencia hipertensiva. El abordaje terapéutico difiere en función de cuál sea la presentación de la crisis (urgencia o emergencia), por lo que es importante establecer un diagnóstico correcto. La finalidad primordial del tratamiento es evitar el daño que se está produciendo sobre el órgano diana afectado y no llevar de manera obligada las cifras de tensión arterial (TA) a valores normales. Tanto la velocidad como el grado de descenso de las cifras de TA depende del tipo de emergencia hipertensiva que presente el paciente. Existe un gran número de fármacos para el manejo de esta patología, aunque no hay estudios comparativos para determinar cuál está más indicado en cada tipo de emergencia. En función de las características individuales de cada uno de los fármacos se pueden hacer recomendaciones particulares para su uso.
Hypertensive crisis accounts for a high percentage of medical emergencies. There are certain difficulties in establishing differential diagnoses between hypertensive emergencies and urgencies. Proper therapeutic management differs according to whether the crisis is one of emergency or urgency, and it is therefore important to make a correct diagnosis. The fundamental purpose of treatment is not to necessarily restore normal blood pressure levels. Rather, it is to prevent further hypertension-related target organ damage. How quickly and how much blood pressure levels decline depend on the type of hypertensive emergency that the patient presents. While there are many drugs available for managing this pathology, there are no comparative studies which can be used to determine which drugs are indicated for each type of emergency. Based on the characteristics of each individual drug, specific recommendations for their use could be formulated.