Los inhibidores de la enzima conversora de la angiotensina (IECA) y los antagonistas de los receptores de la angiotensina II (ARA II) reducen la morbimortalidad cardiovascular en los pacientes con insuficiencia cardíaca, con enfermedad vascular e hipertensión. Algunos estudios sugieren que además podrían prevenir el desarrollo de fibrilación auricular (FA).
ObjetivosEste estudio se diseñó para identificar y evaluar todos los ensayos clínicos aleatorizados en los que se han utilizado IECA o ARA II para la prevención de la FA. El objetivo ha sido estimar la magnitud de este efecto e identificar los subgrupos de pacientes más susceptibles de poder beneficiarse.
MétodosRevisión sistemática de estudios publicados y no publicados que evaluaban el efecto de IECA y ARA II sobre la FA. Se seleccionaron ensayos clínicos aleatorizados, en seres humanos, controlados, de grupos paralelos con IECA o ARA II.
ResultadosSe identificaron un total de 11 estudios, con 56.308 pacientes: 4 en insuficiencia cardíaca, 3 en hipertensión, 2 en pacientes con antecedente de cardioversión para la FA y 2 en sujetos con infarto de miocardio.
Globalmente, IECA y ARA II reducen el riesgo relativo de FA en un 28% (IC 95%, 15%-40%, p=0,0002). La reducción de la FA era similar con ambas familias farmacológicas (IECA: 28%, p=0,01; ARA-II: 29%, p=0,00002) y fue superior en los pacientes con insuficiencia cardíaca (reducción de riesgo relativo [RRR]=44%, p=0,007). No se detectaron reducciones significativas de la FA en los pacientes con hipertensión arterial (RRR=12%, p=0,4), aunque un ensayo encontró una reducción significativa de FA del 29% en pacientes con hipertrofia ventricular izquierda. En los pacientes con antecedente de cardioversión el efecto protector es mayor (RRR: 48%), pero los intervalos de confianza son amplios [IC 95% 21%-65%]
ConclusionesAmbos (IECA y ARA-II) parecen ser eficaces en la prevención de FA. Este beneficio parece limitarse a pacientes con insuficiencia cardíaca o hipertrofia ventricular izquierda. El uso de estas familias antihipertensivas tras la cardioversión es prometedor aunque se precisan más estudios.