El objetivo de este artículo es mostrar los cambios observados en la población de Cataluña en el perfil de salud en función del género en 2006 respecto de 1994, a través de la comparación de los datos obtenidos en 1994 y 2006 en la Encuesta de Salud de Cataluña. El aumento del nivel de estudios de la población ha tendido a equiparar ambos sexos. El patrón según gradiente de clase social se ha invertido de manera que, en 2006, la proporción de mujeres que se sitúa en las clases altas e intermedias es superior a la de los hombres y la proporción de mujeres pertenecientes a la clase baja es inferior a la de los hombres. Ha aumentado el número de mujeres que se incorporan al mundo laboral y disminuido el de las que se declaran amas de casa. Las conductas poco saludables continúan siendo más frecuentes entre los hombres pero la proporción de mujeres fumadoras y sedentarias aumentó entre 1994 y 2006. Las mujeres tienen una actitud más preventiva que los hombres con relación a la toma de la presión arterial y la medida de las concentraciones de colesterol. La población que valora su salud como positiva ha aumentado, pero se mantiene que el porcentaje de mujeres es inferior al de hombres. Las mujeres continúan presentando más enfermedades crónicas, trastornos mentales y discapacidades. En comparación con 1994, en 2006 se observa que en Cataluña se mantiene el perfil de salud en función del género, caracterizado porque las mujeres tienen peor percepción del estado de salud, mayor número de enfermedades crónicas y discapacidades, y mayor riesgo de mala salud mental que los hombres. Los hábitos poco saludables continúan siendo más prevalentes entre los hombres, a excepción del sedentarismo, que es más frecuentre entre las mujeres. Las mujeres continúan practicando actividades preventivas en mayor proporción que los hombres.
The aim of this work is to show the changes observed in the health profile according to gender in 2006 with respect to 1994 of the population of Catalonia, through the comparison of data obtained in 1994 and 2006 from the Encuesta de Salud de Cataluña. The increase of the level of studies of the population has tended to comparing both sexes. The pattern of the social classes has been invested, so that in 2006 the proportion of women who place themselves in the upper classes and intermediate is superior to that of the men, and the proportion of women belonging to the lower class is inferior to that of the men. The number of women who incorporate into the work and handicapped world has increased those who are declared housewives. The little healthy behaviors continue being more frequent among men but the proportion of smoker and sedentary women increased between 1994 and 2006. Women have a more preventive than men in relation to the taking of blood pressure and measurement of cholesterol levels. People who value their health as positive has increased, but maintains that the percentage of women is lower than in males. The women continue to have more chronic diseases, mental disorders and disabilities. In 2006, and in comparison with 1994, it is observed that in Catalonia the health profile by gender, wherein women have poorer perception of health status, greater number of chronic diseases and disabilities and greater risk of poor mental health than men. Unhealthy habits are still more prevalent among men with the exception of the sedentarism, which is more frequent among women. Women continue practicing preventive activities in greater proportion than men.