Los estados mixtos presentan dificultades para su diagnóstico y tratamiento, a pesar de ser frecuentes en la clínica del trastorno bipolar, y tener una evolución clínica globalmente peor. Los estabilizadores del estado de ánimo pueden resultar insuficientes en su tratamiento y se recomienda la adición de antipsicóticos, así como se desaconseja la utilización de antidepresivos. Tradicionalmente, los datos sobre la eficacia de estos psicofármacos en episodios mixtos se han comunicado de forma conjunta con los episodios maníacos puros. En este artículo se revisan los datos específicos sobre la eficacia de los antipsicóticos atípicos cuando son referidos exclusivamente a los estados mixtos. Aunque todos ellos parecen mostrar eficacia sobre los síntomas de la polaridad maníaca, asenapina, olanzapina y ziprasidona son los que cuentan con más datos de eficacia también sobre los síntomas depresivos dentro de los estados mixtos. Se deben realizar estudios que evalúen la eficacia de estos agentes sobre los síntomas mixtos como son concebidos por el nuevo DSM-5.
Mixed states in bipolar disorder are highly prevalent, with a global worse clinical outcome and present difficulties in their diagnosis and treatment. Mood stabilizers may be insufficient for the treatment of these episodes, and addition of an antipsychotic may be required; use of antidepressants is discouraged. Efficacy data of antipsychotics in mixed episodes have been traditionally reported in conjunction with pure manic episodes. In this article, specific data concerning the efficacy of atypical antipsychotics when reported exclusively in mixed states are reviewed. Although all the atypical antipsychotics show efficacy on symptoms of manic polarity within mixed states, asenapine, olanzapine and ziprasidone show data regarding a greater efficacy on depressive symptoms. Further studies are required regarding the efficacy of these agents on mixed symptoms according to DSM-5.