Objetivo: Evaluar la contribución del renograma isotópico en pacientes sometidos a trasplante renal, y la aportación del SPECT-TC.

Material y métodos: Se consideraron los 283 pacientes sometidos a trasplante renal de cadáver de enero de 2011 a diciembre de 2016. A las 24 horas post-trasplante, tras la administración de 370 MBq de ^99mTc-DTPA se realizó un estudio renograma de 30 minutos centrado en abdomen en proyección anterior seguido de imágenes planares a los 30 y 180 minutos. Además, en 10 pacientes, se realizó un SPECT-TC abdominal. Los hallazgos fueron correlacionados con estudios radiológicos y seguimiento clínico-analítico.

Resultado: De los 283 pacientes, (edad: 58,0 ± 12,8; 184 hombres y 99 mujeres), 69 (24,4%) presentaron un estudio normal. En 35 (12,4%) se detectaron complicaciones quirúrgicas: 14 trombosis arteria/vena renal; 5 infartos; 6 ectasias u obstrucciones ureterales; 1 urinoma (confirmado con SPECT-TC); y 7 fugas urinarias (4 confirmadas con SPECT-TC). En 13 pacientes se realizó trasplantectomía, 4 evolucionaron a deterioro función renal y 1 a rechazo agudo. En 180 pacientes (63,6%) se evidenció alteración isquémica o necrosis tubular aguda (NTA): leve en 103 (57,2%); moderada en 52 (28,9%); y grave en 25 (13,9%). Evolutivamente 2 (1,9%) casos con NTA leve evolucionaron a fracaso renal (sin rechazo); en NTA moderada 16 (30,7%) evolucionaron a fracaso renal (2 rechazo agudo); y en NTA grave 11 casos (44,0%) evolucionaron a fracaso renal (1 rechazo agudo y 4 trombosis que implicaron trasplantectomía). Se realizó un segundo control a 48 pacientes normalizándose la función en 15.

Conclusiones: El renograma en pacientes trasplantados permite detectar complicaciones quirúrgicas y/o isquémicas facilitando la implantación de medidas correctoras de forma precoz. El SPECT-TC es especialmente útil en el diagnóstico de urinomas y de fugas urinarias mejorando la valoración de su extensión y localización.