El libro Conflictos, conflictividades y movilizaciones socioambientales en México: problemas comunes, lecturas diversas, –coordinado por María Fernanda Paz, investigadora del Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias de la unam y Nicholas Risdell, doctor en Antropología Social por la enah; editado en el 2014 por la Universidad Nacional Autónoma de México– reúne una serie de trabajos enfocados en el estudio de los conflictos socio ambientales o movilizaciones de dicha índole. Pero, ¿qué es lo socio ambiental?, ¿qué es un conflicto? Como indican Paz y Risdell, no existe actualmente una definición estricta para ello, pues los conceptos se van formando y enriqueciendo cuando se desarrollan en la vida cotidiana. Sin embargo, los autores del libro definen un conflicto socio ambiental como un enfren-tamiento entre dos o más actores originado por el control, la propiedad y la afectación de los bienes naturales. Dichos actores son diversos pero con frecuencia están divididos en poblaciones (urbanas o rurales) y sus habitantes, las grandes empresas que buscan explotar o extraer algún recurso de ese territorio, los académicos, las organiza-ciones civiles y las autoridades locales, estatales y federales; mientras que una movilización es la forma en la que estos actores se hacen visibles. Por otra parte, aunque un conflicto signifique oposición o desacuerdo, en el trabajo de Paz y Risdell se exaltan también sus elementos positivos como el surgimiento de lazos comunitarios e interacción social a raíz de dicha conflictividad, la cual es necesaria y normal dentro de las relaciones humanas.
La obra está dividida en dos partes; la primera se concentra en relatar y analizar casos concretos de comunidades que enfrentan o han enfrentado algún conflicto de esta índole, mientras que la segunda hace énfasis en las redes creadas a partir de ellos, es decir, en la unión de los afectados por proyectos o megaproyectos que degradan el ambiente y que se expresa en la creación de organizaciones civiles o grupos que han logrado cierta significación. En total son ocho los capítulos donde se exploran los problemas ambientales en México. En el primero de ellos, María Fernanda Paz explica qué son los conflictos socio ambientales, qué los origina y cuáles son sus características, además de aclararnos cómo se han transformado a través del tiempo. De forma contundente Paz2 afirma que “no hay negociación posible en esta clase de conflictos, pues lo que está en disputa es la existencia social de uno de los grupos en pugna […] no se trata de conflictos de interés, ni tampoco de competencia por el acceso a un bien o un recurso”.
En síntesis, se explica al lector cuál es la importancia del territorio, pues más allá de un simple espacio es el lugar donde se desarrolla la actividad económica, cultural, social y política de los habitantes; es decir, la identidad de un individuo y una población se conforma a partir de él y determina aspectos tan variados como: costumbres, creencias, lenguaje, oficios, alimentación, etc, que sufren modificaciones o afectaciones a la par de este territorio o los elementos contenidos en él. De forma magistral y demostrando tener un amplio conocimiento del tema, Paz menciona algunos ejemplos de ello: el caso del río Santiago en Jalisco, la llegada de la Minera San Xavier en San Luis Potosí, la creación de un proyecto turístico en un área protegida de Baja California Sur, entre tantos otros.
El segundo capítulo, a cargo de David Madrigal, investigador del Colegio de San Luis, se enfoca en dos comunidades del estado de San Luis Potosí: fracción Milpillas, donde la actividad económica principal es la pepena de basura lo que ha implicado que los habitantes desarrollen su vida en medio de ésta y en condiciones que ponen en riesgo su salud, y Nueva Zapatilla, donde la explotación minera obligó a los pobladores a desplazarse de sus tierras con su propio consentimiento percibiéndose un ambiente de temor por la utilización de cianuro y otros elementos tóxicos. Madrigal formula un nuevo concepto para describir lo que ocurre en estas comunidades estableciendo el “no conflicto” como una nueva arista en las problemáticas ambientales en las que, si bien existe una constante tensión e inconformidad, no son percibidas a simple vista.
El trabajo de Francesco Panico (investigador de la Universidad Veracruzana) y Claudio Garibay Orozco (investigador del Centro de Investigaciones en Geografía Ambiental) se ocupa del conflicto desatado por el proyecto minero de Caballo Blanco en las costas veracruzanas, el cual funcionará con explosivos y corrosivos, hecho preocupante por su cercanía con la planta nuclear de Laguna Verde a lo que se suma la figura de los “rancheros” como los únicos que concentran la propiedad y el poder local, dejando de lado la opinión de otros sectores.
El capítulo cuatro, a cargo de Ignacio Rubio, profesor investigador de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la unam, explora el caso de la instalación de parques eólicos en el Istmo de Tehuantepec, Oaxaca, que se han multiplicado rápidamente implicando una mayor cantidad de territorio necesaria para la colocación de aerogeneradores, ante lo cual los ejidatarios han denunciado la presión y amenazas de que son objeto para obligarlos a firmar contratos para el arrendamiento de sus tierras, algo indispensable en su identidad como indígenas, debilitando además el régimen de propiedad comunitario.
Por otra parte, Ixkic Bastían Duarte, profesora investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos reflexiona en torno a dos casos de contaminación petrolera en los que los habitantes lograron organizarse para recabar evidencias y fortalecer redes con la comunidad científica. En Cárdenas, Tabasco por ejemplo, gracias a la medición de contaminantes se logró entablar una demanda contra pemex mientras que en Ixhuatlán del Sureste, Veracruz, las pruebas de delitos ambientales cometidos por la misma empresa llevaron al encarcelamiento de tres de sus trabajadores.
En el capítulo seis, Nicholas Risdell explora el caso del relleno sanitario en Loma de Mejía, Morelos, y la oposición de la ciudadanía por considerar que éste contaminaría en gran medida. Para ello, Risdell retoma el concepto de “justicia ambiental” para explicar que las comunidades con menor poder económico y político son las que reciben las mayores afectaciones ambientales.
Juan Manuel Gatica Carmona explora el caso de La Parota, Guerrero, proyecto en el que se pretende construir una enorme presa que inundará las comunidades aledañas y cuyo rechazo propició el nacimiento del Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a La Parota (cecop), organización campe-sina que ha sido fuertemente intimidada. El autor destaca la importancia de los lazos comunitarios y su fortalecimiento a partir de un conflicto.
Por último, la psicóloga y responsable del área de comuni-cación en la asociación civil serapaz, Manuela Julia Arancibia Macleod retoma el caso de la Asamblea Nacional de Afectados Ambientales (anaa), surgida en el 2008 como un espacio de intercambio y de soli-daridad entre pueblos afectados por megaproyectos y cuya fuerza la ha hecho convertirse en un referente dentro de estas luchas. Macleod cuestiona los retos a los que se enfrenta la anaa y el peso de la “identidad colectiva” en ella, que se ha configurado como un espacio de apoyo mutuo.
El hecho de que participen en este libro investigadores, profesores y estudiantes de distintas partes del país lo hace un trabajo muy rico, capaz de ofrecernos distintas perspectivas y opiniones que, sin embargo, tienen elementos en común: la preocupación por la conservación del ambiente y la relación de la sociedad con éste, además de abordar el tema analizando el papel que juega el poder. Los autores, de igual modo, parecen llegar a la misma conclusión de forma no intencional: a saber, que lo que ha generado estos conflictos es la expansión del capitalismo que busca una mayor mercantilización impulsada con la explotación de materias primas. Sin duda, este libro es recomendable porque marca un precedente en el estudio de los conflictos socio ambientales en México, tema poco estudiado hasta ahora a pesar de que este tipo de problema vaya en aumento, así como la violencia para imponer estos proyectos. Las múltiples repercusiones que tienen estos conflictos requieren que la población en general esté informada sobre ellos.
Paz, María Fernanda y Nicholas Risdell (2014), Conflictos, conflictividades y movilizaciones socio ambientales en México: problemas comunes, lecturas diversas, unam, México.