se ha leído el artículo
array:24 [ "pii" => "S0185122516300443" "issn" => "01851225" "doi" => "10.1016/j.antro.2016.12.001" "estado" => "S300" "fechaPublicacion" => "2017-07-01" "aid" => "41" "copyright" => "Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Antropológicas" "copyrightAnyo" => "2016" "documento" => "article" "crossmark" => 1 "licencia" => "http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/" "subdocumento" => "fla" "cita" => "An Antropol. 2017;51:131-41" "abierto" => array:3 [ "ES" => true "ES2" => true "LATM" => true ] "gratuito" => true "lecturas" => array:2 [ "total" => 1832 "formatos" => array:3 [ "EPUB" => 75 "HTML" => 1411 "PDF" => 346 ] ] "itemSiguiente" => array:19 [ "pii" => "S018512251630042X" "issn" => "01851225" "doi" => "10.1016/j.antro.2016.11.004" "estado" => "S300" "fechaPublicacion" => "2017-07-01" "aid" => "39" "copyright" => "Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Antropológicas" "documento" => "article" "crossmark" => 1 "licencia" => "http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/" "subdocumento" => "fla" "cita" => "An Antropol. 2017;51:142-53" "abierto" => array:3 [ "ES" => true "ES2" => true "LATM" => true ] "gratuito" => true "lecturas" => array:2 [ "total" => 1156 "formatos" => array:3 [ "EPUB" => 60 "HTML" => 821 "PDF" => 275 ] ] "es" => array:12 [ "idiomaDefecto" => true "cabecera" => "<span class="elsevierStyleTextfn">Artículo</span>" "titulo" => "Arqueología, fuentes etnohistóricas y retóricas de legitimización: un ensayo reflexivo sobre los olmecas xicalancas" "tienePdf" => "es" "tieneTextoCompleto" => "es" "tieneResumen" => array:2 [ 0 => "es" 1 => "en" ] "paginas" => array:1 [ 0 => array:2 [ "paginaInicial" => "142" "paginaFinal" => "153" ] ] "titulosAlternativos" => array:1 [ "en" => array:1 [ "titulo" => "Archaeology, ethnohistorical sources and rhetoric of legitimisation: A reflexive essay on Olmecas Xicalancas" ] ] "contieneResumen" => array:2 [ "es" => true "en" => true ] "contieneTextoCompleto" => array:1 [ "es" => true ] "contienePdf" => array:1 [ "es" => true ] "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "autoresLista" => "Juliette Testard" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "nombre" => "Juliette" "apellidos" => "Testard" ] ] ] ] ] "idiomaDefecto" => "es" "EPUB" => "https://multimedia.elsevier.es/PublicationsMultimediaV1/item/epub/S018512251630042X?idApp=UINPBA00004N" "url" => "/01851225/0000005100000002/v3_201708300129/S018512251630042X/v3_201708300129/es/main.assets" ] "itemAnterior" => array:19 [ "pii" => "S0185122517300164" "issn" => "01851225" "doi" => "10.1016/j.antro.2017.05.003" "estado" => "S300" "fechaPublicacion" => "2017-07-01" "aid" => "56" "copyright" => "Universidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Antropológicas" "documento" => "article" "crossmark" => 1 "licencia" => "http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/" "subdocumento" => "fla" "cita" => "An Antropol. 2017;51:123-30" "abierto" => array:3 [ "ES" => true "ES2" => true "LATM" => true ] "gratuito" => true "lecturas" => array:2 [ "total" => 1674 "formatos" => array:3 [ "EPUB" => 67 "HTML" => 1248 "PDF" => 359 ] ] "es" => array:13 [ "idiomaDefecto" => true "cabecera" => "<span class="elsevierStyleTextfn">Artículo</span>" "titulo" => "Domesticar la globalización: alimentación y cultura en la urbanización de una zona rural en México" "tienePdf" => "es" "tieneTextoCompleto" => "es" "tieneResumen" => array:2 [ 0 => "es" 1 => "en" ] "paginas" => array:1 [ 0 => array:2 [ "paginaInicial" => "123" "paginaFinal" => "130" ] ] "titulosAlternativos" => array:1 [ "en" => array:1 [ "titulo" => "Domesticate globalisation: Food and culture in the urbanisation of a rural area in Mexico" ] ] "contieneResumen" => array:2 [ "es" => true "en" => true ] "contieneTextoCompleto" => array:1 [ "es" => true ] "contienePdf" => array:1 [ "es" => true ] "resumenGrafico" => array:2 [ "original" => 0 "multimedia" => array:7 [ "identificador" => "fig0005" "etiqueta" => "Figura 1" "tipo" => "MULTIMEDIAFIGURA" "mostrarFloat" => true "mostrarDisplay" => false "figura" => array:1 [ 0 => array:4 [ "imagen" => "gr1.jpeg" "Alto" => 706 "Ancho" => 1501 "Tamanyo" => 68400 ] ] "descripcion" => array:1 [ "es" => "<p id="spar0065" class="elsevierStyleSimplePara elsevierViewall">Ubicación de Ajalpan.</p> <p id="spar0070" class="elsevierStyleSimplePara elsevierViewall">Fuente: <span class="elsevierStyleInterRef" id="intr0005" href="http://www.sep.gob.mx/wb/sep1/sep1_Puebla">http://www.sep.gob.mx/wb/sep1/sep1_Puebla#.WDYJ0dw6M3g</span></p>" ] ] ] "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "autoresLista" => "Miriam Bertran" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "nombre" => "Miriam" "apellidos" => "Bertran" ] ] ] ] ] "idiomaDefecto" => "es" "EPUB" => "https://multimedia.elsevier.es/PublicationsMultimediaV1/item/epub/S0185122517300164?idApp=UINPBA00004N" "url" => "/01851225/0000005100000002/v3_201708300129/S0185122517300164/v3_201708300129/es/main.assets" ] "es" => array:18 [ "idiomaDefecto" => true "cabecera" => "<span class="elsevierStyleTextfn">Artículo</span>" "titulo" => "Monte Albán V y los mixtecos" "tieneTextoCompleto" => true "paginas" => array:1 [ 0 => array:2 [ "paginaInicial" => "131" "paginaFinal" => "141" ] ] "autores" => array:1 [ 0 => array:3 [ "autoresLista" => "Bernd Fahmel Beyer" "autores" => array:1 [ 0 => array:3 [ "nombre" => "Bernd" "apellidos" => "Fahmel Beyer" "email" => array:1 [ 0 => "fahmel@unam.mx" ] ] ] "afiliaciones" => array:1 [ 0 => array:2 [ "entidad" => "Instituto de Investigaciones Antropológicas, Universidad Nacional Autónoma de México, Ciudad de México, México" "identificador" => "aff0005" ] ] ] ] "titulosAlternativos" => array:1 [ "en" => array:1 [ "titulo" => "Monte Alban V and the Mixtecs" ] ] "textoCompleto" => "<span class="elsevierStyleSections"><span id="sec0005" class="elsevierStyleSection elsevierViewall"><span class="elsevierStyleLabel">1</span><span class="elsevierStyleSectionTitle" id="sect0025">Sinopsis</span><p id="par0005" class="elsevierStylePara elsevierViewall">El análisis contextual es, quizá, el mejor instrumento para estudiar las tradiciones, los estilos y las modas que comparten determinadas sociedades en sus <span class="elsevierStyleItalic">bellas artes</span>. La falta de información fidedigna sobre el origen de un objeto es, por lo tanto, un obstáculo infranqueable para las investigaciones de tipo histórico y antropológico. Consciente del problema, Alfonso Caso procuró documentar las diversas facetas de sus proyectos y llevar un registro detallado de las excavaciones que realizó en varios sitios arqueológicos de Oaxaca. Su preocupación le permitió adoptar, también, las premisas del <span class="elsevierStyleItalic">particularismo histórico</span> y concebir un esquema de desarrollo muy sofisticado para la cultura recuperada en Monte Albán. En su momento se entendía a una <span class="elsevierStyleItalic">cultura</span> como la suma de rasgos particulares cuyo estilo podía variar en el tiempo en función de los cambios que dicta la moda (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0215">Kroeber, 1948</a>). Más allá de los cambios, lo que daba su “cara” al conjunto de rasgos era la permanencia o el apego a una tradición (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0140">Fahmel, 1986</a>). De ahí que la primera propuesta de <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0080">Caso (1939a, p. 38)</a> caracterizara a la zapoteca como una cultura de constructores y planificadores. Debido a los cambios bruscos que se observan en la tecnología y en las formas constructivas, empero, se reconsideró dicha propuesta y se planteó que la cerámica gris era un mejor elemento para establecer la tradición zapoteca (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0005">Acosta, 1965; Caso, Bernal y Acosta 1967</a>)<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0005"><span class="elsevierStyleSup">1</span></a>. La región mixteca, en cambio, era poco conocida a mediados del siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">xx</span> y parecía carecer de los elementos necesarios para sustentar la existencia de una cultura bien definida.</p><p id="par0010" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Ahora bien, si el esquema que elaboró Caso junto con Ignacio Bernal y Jorge Acosta es lógico y fácil de entender, se debe a que la región de los valles fue ocupada desde temprano por hablantes de la lengua zapoteca. Aunque en su momento faltaba investigar las fases arqueológicas iniciales, dicho entorno garantizaba que los materiales hallados en Monte Albán formaban parte de una larga tradición que perduró hasta principios del siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">xvi</span> (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0025">Bernal, 1965</a>, pp. 804-806). Pero las cosas se complicaron cuando hubo que explicar la convivencia entre los grupos mixtecos y zapotecos documentada en las fuentes históricas. A pesar de que la tradición zapoteca se entendía de una manera flexible y abierta a la influencia de otras culturas mesoamericanas, incluida la mixteca de la época Monte Albán<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V, el esquema arqueológico no tenía cabida para una tradición independiente basada en la presencia de <span class="elsevierStyleItalic">cerámica polícroma</span> vinculada con los <span class="elsevierStyleItalic">mixtecos</span> tardíos.</p><p id="par0015" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Hoy en día se sabe que las formas y estilos caligráficos de la cerámica policromada varían mucho de una región a otra, y que las diferencias tecnológicas responden a las peculiaridades del lugar donde fue manufacturada<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0010"><span class="elsevierStyleSup">2</span></a>. Por lo tanto, conviene referirse a ella como <span class="elsevierStyleItalic">vajilla policromada</span>, sin equipararla con una cultura o tradición en particular. En Oaxaca, sus variantes son tantas como las que se miran en los códices y lienzos indígenas, lo que sugiere que su uso obedeció al gusto que ciertos sectores de la población desarrollaron por una manufactura de prestigio en proceso de diversificación, y no al valor que se le ha dado como signo de identidad cultural mixteco-poblana (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0295">Robertson, 1964, 1970; Lind, 1967</a>, pp. 60-66; <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0225">Lind, 1987</a>; Byland y Pohl 1994, pp. 10-11; <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0290">Pohl, 2003</a>, p. 201).</p><p id="par0020" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Mucho se ha aprendido desde que Caso, Bernal y Acosta diseñaron el esquema que rige la historia cultural de Oaxaca, y ante todo sobre la cultura de los pueblos que habitaron la región mixteca. No obstante, falta aclarar el papel que dichos pueblos jugaron en los valles tras los enlaces realizados entre Zaachila y Yanhuitlan. De ahí que la pregunta a resolver siga siendo si los indicadores asociados con los mixtecos son adecuados para rastrear sus quehaceres dentro del registro arqueológico de la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V. Sin querer dar una solución rápida al problema se contrastarán los datos de las primeras exploraciones con las nuevas propuestas, pensando siempre que la información histórica y los materiales con que se trabaja son escasos. Más allá del análisis de las influencias o de la inserción de elementos foráneos en determinada cultura y tradición cabría ver la vida como un constante ir y venir de gente que elabora contextos sociales y materiales de difícil acceso mediante simples cuadrículas o sofisticados modelos antropológicos.</p></span><span id="sec0010" class="elsevierStyleSection elsevierViewall"><span class="elsevierStyleLabel">2</span><span class="elsevierStyleSectionTitle" id="sect0030">Introducción</span><p id="par0025" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Los primeros trabajos de Alfonso Caso en la región zapoteca (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0045">Caso, 1927, 1928</a>) se inscriben en la historia del arte y en el análisis documental decimonónico. Así, mientras que en Mitla estudió la pintura hallada en el acceso a la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>2, cuya iconografía se relaciona con la del Altiplano central y la Mixteca, en Monte Albán elaboró un catálogo de los glifos labrados en numerosas estelas, columnas, dinteles y jambas. Ya que estos últimos son distintos a los glifos que se ven en los manuscritos del Postclásico, los atribuyó al pueblo que hasta la fecha habita los valles centrales de Oaxaca.</p><p id="par0030" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Una vez iniciadas las exploraciones arqueológicas en Monte Albán, Caso dio prioridad al análisis estratigráfico de la arquitectura y la cerámica asociada, cuya tipología le permitió hablar de una tradición milenaria enriquecida por las demás culturas mesoamericanas (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0125">Caso et al., 1967</a>). Para explicar las razones que llevaron a la ocupación del lugar miró hacia la sierra mixteca, donde se habían localizado diversos sitios en la cima de los cerros (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0075">Caso, 1938; Caso, 1939b</a>, pp. 169-171). El estilo de los relieves conocidos como Danzantes, sin embargo, le hizo pensar que fue algún pueblo antiguo, acaso los antepasados “olmecas” de los mixtecos, quien se asentó en Monte Albán (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0085">Caso, 1939b</a>, p. 183; <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0090">Caso, 1947</a>, p. 32).</p><p id="par0035" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Con el tiempo las excavaciones demostraron que los objetos recuperados en el sitio se alineaban con la cultura material de los zapotecos mencionados en las fuentes documentales. No obstante, al descubrir la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7 y comparar sus ofrendas con dichos objetos, Caso volvió a dirigir su mirada hacia la Mixteca y en particular a la iconografía de los códices (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0055">Caso, 1932a, 1932b</a>). Tras analizar los contextos arguyó que la tumba fue construida y utilizada por los zapotecos, pero usada más tarde por gente que empleaba —o compartía— la iconografía atribuida a la nación mixteca. Esta aseveración fue seriamente cuestionada, y solo treinta años más tarde pudo demostrar que la mayoría de los objetos depositados en la tumba pertenecían a un entorno cultural diferente al zapoteco (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0105">Caso, 1969; Paddock, 1986</a>, p. 6).</p><p id="par0040" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Las ideas de Caso tomaron fuerza cuando Jorge Acosta excavó un basurero en el pueblo viejo de Chachoapan, en la Mixteca Alta, donde obtuvo grandes cantidades de cerámica polícroma con diseños parecidos a los que Caso observó en los códices (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0075">Caso, 1938; Caso et al., 1967</a>, p. 465). Ignacio <a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0015">Bernal (1949, 1964)</a>, por su parte, excavó en Coixtlahuaca y recorrió los valles de Etla y Tlacolula. En dichos lugares encontró numerosas vasijas y tiestos policromados junto a la cerámica gris del Postclásico, conocida en aquel entonces como Gris<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3M<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0015"><span class="elsevierStyleSup">3</span></a>. Con base en el análisis de dicha cerámica y el estudio de los documentos indígenas, Caso pudo argumentar que en algún momento los señoríos de Zaachila y Yanhuitlan habían establecido relaciones que estrecharon sus vínculos dinásticos. La excavación de la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>1 de Zaachila vendría a confirmar esas relaciones, y a comprobar la autenticidad de las ofrendas encontradas en la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7 de Monte Albán (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0100">Caso, 1964, 1969; Gallegos, 2014</a>). Para definir cabalmente la última época arqueológica de los valles o Monte Albán<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V faltaba, sin embargo, ubicar el origen de las vasijas polícromas y precisar su relación con la cerámica Gris<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3M, que comparte algunas formas con la vajilla policromada (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0125">Caso et al., 1967</a>, p. 466; <a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0220">Lind, 1967, 1987</a>).</p><p id="par0045" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Ahora bien, desde la perspectiva de Bernal la interacción entre los zapotecos y los pueblos serranos debió ser mucho más compleja de lo que señalan las fuentes documentales, o de lo que sugiere la cerámica polícroma y las joyas depositadas en las tumbas antes mencionadas. Un indicador de fecha más temprana es, por ejemplo, el sistema constructivo <span class="elsevierStyleItalic">mixteco</span><a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0020"><span class="elsevierStyleSup">4</span></a> descubierto en el Mogote Grande de Yucuñudahui y en las últimas construcciones de Monte Albán, en particular el Edificio<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>B de la Plataforma Norte (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0075">Caso, 1938</a>, p. 47; <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0020">Bernal, 1964</a>, p. 457). En una jamba del Edificio<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>J, por su parte, se reconoce la imagen de Quetzalcóatl vestido como Ehécatl, mientras que en la Estela<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>4 se ve a un personaje asociado al glifo 8G u <span class="elsevierStyleItalic">Ocho Venado</span>, nombre que recuerda al caudillo de la historia mixteca (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0050">Caso, 1928</a>, pp. 83-84, <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0075">Caso, 1938</a>, p. 12)<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0025"><span class="elsevierStyleSup">5</span></a>. La arquitectura de los palacios de Mitla y la pintura mural ubicada en sus dinteles, en cambio, forma parte del complejo cultural tolteca-chichimeca que incluye cerámicas del sureste mesoamericano emparentadas con las de estilo Mixteca-Puebla (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0320">Sharp, 1970; Fahmel, 1988, 2014</a>). La carencia de una explicación para la presencia de todos estos rasgos en los valles centrales de Oaxaca condujo, finalmente, a que John <a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0260">Paddock (1964, 1970)</a> los asociara con la bajada masiva de gente serrana y el abandono del área ceremonial de Monte Albán. En sus exploraciones de Yagul, Bernal había encontrado grandes cantidades de cerámica gris del Postclásico, a las que <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0275">Paddock (1983b)</a> relacionó con dicha invasión, aunque después se demostraría que la Gris<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3M no es un producto mixteco sino parte de la tradición alfarera zapoteca (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0175">Feinman, Banker, Cooper, Cook y Nicholas, 1990</a>).</p><p id="par0050" class="elsevierStylePara elsevierViewall">El hallazgo de objetos de tradición zapoteca en la Mixteca Alta ha enriquecido el panorama de los contactos que mantuvieron los valles con sus regiones periféricas, pero en ningún momento se ha planteado una invasión o el dominio de aquellos lugares por Monte Albán (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0190">Gaxiola, 1984; Byland y Pohl, 1994</a>). En este sentido, los cuestionamientos de la arqueología étnica han permitido acotar el valor de la información documental y desarrollar nuevas perspectivas para la convivencia de los pueblos que aún reclaman ser los protagonistas de la historia postclásica de Oaxaca<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0030"><span class="elsevierStyleSup">6</span></a>.</p></span><span id="sec0015" class="elsevierStyleSection elsevierViewall"><span class="elsevierStyleLabel">3</span><span class="elsevierStyleSectionTitle" id="sect0035">Las evidencias: antecedentes de índole iconográfica</span><p id="par0055" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Las primeras exploraciones sistemáticas de Monte Albán fueron realizadas por Leopoldo Batres en 1902. En su informe de labores señala que “la extensa montaña está literalmente cubierta de construcciones, en su mayor parte funerarias, desde el pie hasta la cumbre [… donde] se alza la magestuosa ciudad zapoteca” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0010">Batres, 1902</a>, p. 28). Tras comparar los símbolos de sus monumentos con las pinturas de los palacios de Mitla, declara que en las últimas “se distinguen caracteres muy parecidos á los de la mixteca y á los naoas, pero enteramente distintos de los zapoteca, probando esto que los autores de las leyendas jeroglíficas de Mitla no fueron zapoteca sino tolteca ó mixteco” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0010">Batres, 1902</a>, p. 37).</p><p id="par0060" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Esta inclinación hacia la búsqueda de semejanzas entre la iconografía zapoteca, la de los códices y otros documentos del centro de México se volvió muy común entre los estudiosos de la región oaxaqueña desde que Eduard <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0315">Seler (1895)</a> y Alfonso <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0045">Caso (1927)</a> trabajaron las pinturas murales de Mitla. En su análisis de la pintura ubicada en el acceso a la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>2, debajo del Edificio<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>21 del Patio<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>F, Caso señala que “el hecho de que aparezcan dos soles en vez de uno, como en la página<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>19 del Códice Nuttall, las fechas y la presencia del águila junto al segundo sol, puede hacernos pensar en la representación de un mito semejante al de la creación del sol y la luna en Teotihuacan” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0045">Caso, 1927</a>, p. 247). Poco después publicó un estudio sistemático de la escritura zapoteca con fotografías y dibujos de las piedras labradas que entonces se conocían. En esta especie de catálogo de glifos <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0050">Caso (1928, pp. 9-10)</a> apunta que todo “el que ha visto las estelas de Monte Albán, las urnas funerarias y los códices de Oaxaca, habrá notado seguramente una semejanza entre las urnas y las estelas, y una diferencia profunda con los códices de esa región [… que] representan los jeroglíficos de un modo semejante a los códices y pinturas nahuas”. Tras discutir las diferencias que ve entre el sistema de escritura zapoteco y el de otras culturas concluye que “los zapotecos utilizaron el sistema [de cuentas con] puntos y rayas; los aztecas, solo el de puntos, y los mixtecos, ambos sistemas. [… lo mixteco …] solo se distingue de lo mexicano o azteca, porque <span class="elsevierStyleItalic">algunas veces</span> (sic) utiliza el sistema de numeración de puntos y rayas y el glifo A/O como glifo del año” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0055">Caso, 1932a</a>, p. 131)<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0035"><span class="elsevierStyleSup">7</span></a>.</p></span><span id="sec0020" class="elsevierStyleSection elsevierViewall"><span class="elsevierStyleLabel">4</span><span class="elsevierStyleSectionTitle" id="sect0040">Monte Albán y la Tumba 7</span><p id="par0065" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Recién iniciadas las exploraciones de Caso en Monte Albán, salió a la luz la tumba cuyo tesoro dio fama mundial al lugar (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0105">Caso, 1969</a>). Debido a la enorme atención que recibieron las joyas, el autor aclaró que desde el siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">xviii</span> “tenemos noticias ciertas de saqueos en los edificios de Monte Albán, y solo desde que el Gobierno Federal se hizo cargo de la zona, se suspendieron estos saqueos, pero probablemente una gran parte de las joyas de oro y jade que procedentes de México se encuentran en los museos de los Estados Unidos y de Europa, fueron extraídas de los riquísimos sepulcros de Monte Albán” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0060">Caso, 1932b</a>, p. 6)<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0040"><span class="elsevierStyleSup">8</span></a>. También explicó que la antigua ciudad fue habitada por los zapotecos, y que los objetos depositados tardíamente en la tumba pertenecían a la cultura mixteca. Para demostrarlo analizó en detalle el glifo del año A/O que aparece en los huesos labrados y en el pectoral de oro en forma de caballero tigre. En dicho pectoral, dice:<span class="elsevierStyleDisplayedQuote" id="dsq0005"><p id="spar0015" class="elsevierStyleSimplePara elsevierViewall">… tenemos abajo dos fechas. El signo A O nos indica que se trata aquí de dos años. En el cuadro de la derecha, el glifo que se encuentra dentro es indudablemente el signo “casa”, <span class="elsevierStyleItalic">calli</span>, y por fuera tenemos 11 puntos […]. En el cuadro de la izquierda el signo que está dentro del glifo A O es la cabeza del dios del viento, <span class="elsevierStyleItalic">Ehecatl</span>, rodeado por 10 puntos […] los dos años marcados en los dos cuadrados del pectoral no pueden pertenecer al mismo sistema calendárico […]. Como una hipótesis probable, sugiero que en este caso se trata de establecer una correlación entre dos calendarios, el mixteco y el zapoteco, y que se trata del mismo año que los zapotecos llamaban 10 <span class="elsevierStyleItalic">Ehecatl</span> y los mixtecos 11 <span class="elsevierStyleItalic">Calli</span>. […] La existencia en el pectoral del signo A O, semejante en absoluto al que aparece en los huesos labrados, nos demuestra que la joya es mixteca (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0055">Caso, 1932a</a>, pp. 131-133)<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0045"><span class="elsevierStyleSup">9</span></a>.</p></span></p><p id="par0070" class="elsevierStylePara elsevierViewall">El origen serrano de los objetos encontrados en la tumba fue seriamente cuestionado, aunque los signos calendáricos, los dioses, animales y símbolos representados en ellos son semejantes a los que se ven en los códices mixtecos y mexicanos (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0055">Caso, 1932a</a>, p. 149). Es decir, había la posibilidad de que lo zapoteco fuera un estilo antiguo que más tarde fue sustituido por otro debido a la influencia de tribus olmecas o mexicanas en el arte y la industria zapoteca. En respuesta a sus detractores Caso enfatizó su hipótesis original, en la que lo zapoteco y mixteco habrían sido manifestaciones coexistentes de culturas diversas (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0055">Caso, 1932a</a>, pp. 149-150). Ante el vacío de información al respecto buscó evidencias en las <span class="elsevierStyleItalic">Relaciones Geográficas</span> de Oaxaca, y en particular en las de Cuilapan y Teozapotlan. En la primera de ellas se señala que:<span class="elsevierStyleDisplayedQuote" id="dsq0010"><p id="spar0020" class="elsevierStyleSimplePara elsevierViewall">La gente deste pueblo no tienen su nación y origen, ni su nacimiento, en este pueblo, porque son advenedizos y por tales son tenidos […]. Vinieron estos indios de unos pueblos de la <span class="elsevierStyleItalic">Mixteca</span> que llamamos <span class="elsevierStyleItalic">las Almoloyas</span>, tierra muy áspera y fragosa, por ciertos casamientos que hubo en diferentes t[iem]pos, y esto, ha más de trescientos años. Vinieron estos indios en gran cantidad. Y porque uno dellos, y entrambos, eran personas principales, y el uno dellos era [para] casami[ent]o con la hija del rey de <span class="elsevierStyleItalic">Teozapotlan</span>, que está [a] tres [cuartos] de leguas de aquí, [este] dio a su yerno el sitio deste di[c]ho pueblo, aunque, cuando lo dio, estaba un poco más apartado el concurso y habitación de los <span class="elsevierStyleItalic">mixtecas</span> del di[c]ho pueblo de <span class="elsevierStyleItalic">Teozapotlan</span>, y entonces no le llamaban <span class="elsevierStyleItalic">Yuchaca</span>, como ahora, sino <span class="elsevierStyleItalic">Sayucu</span>, que quiere decir “al pie del cerro”. Y porque aquel sitio no era tan bueno como las tierras que con él dio el rey de <span class="elsevierStyleItalic">Teozapotlan</span>, acordaron los indios, por consejo de los religiosos, de pasarlo a donde ahora está [Cuilapan] (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0310">Salazar, 1984</a>, pp. 178-179).</p></span></p><p id="par0075" class="elsevierStylePara elsevierViewall">La segunda, en cambio, menciona el arribo de dos contingentes diferentes:<span class="elsevierStyleDisplayedQuote" id="dsq0015"><p id="spar0025" class="elsevierStyleSimplePara elsevierViewall">Porque, preguntados cómo vinieron ellos a esta provincia <span class="elsevierStyleItalic">Zapoteca</span>, siendo ellos <span class="elsevierStyleItalic">mixtecos</span>, responden que por vía de un casamiento q[ue] se hizo de <span class="elsevierStyleSmallCaps">una mixteca</span> con un <span class="elsevierStyleSmallCaps">señor</span> de <span class="elsevierStyleItalic">Teozapotlan</span>. Vinieron más ha de trescientos años, aunque fueron pocos los que entonces vinieron; pero, poco antes [de] q[ue] vinier[a]n los españoles, hubo otro casamiento de <span class="elsevierStyleSmallCaps">un señor</span> de <span class="elsevierStyleItalic">Yangüitlan</span>, [que] se casó con <span class="elsevierStyleSmallCaps">la hermana</span> de <span class="elsevierStyleSmallCaps">la mujer</span> del <span class="elsevierStyleSmallCaps">señor</span> y <span class="elsevierStyleSmallCaps">rey</span> de <span class="elsevierStyleItalic">Teozapotlan</span>, el cual [señor de <span class="elsevierStyleItalic">Yangüitlan</span>] vivió en <span class="elsevierStyleItalic">Cuilapa</span>, porque se lo dio <span class="elsevierStyleSmallCaps">el señor</span> de <span class="elsevierStyleItalic">Teozapotlan</span> para que allí viviesen. Entonces vinieron muchos más que [los que] habían venido antes (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0245">Mata, 1984</a>, pp. 157-158).</p></span></p><p id="par0080" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Aunque el valor histórico de estos textos es innegable, Caso no se dio por satisfecho y empezó a revisar otras fuentes del siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">xvi</span>. En el <span class="elsevierStyleItalic">Códice Kingsborough</span>, por ejemplo, encontró que los indios de Tepetla[o]ztoc entregaron a los españoles un collar de tortuguitas de oro exactamente igual al encontrado en la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7 de Monte Albán<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0050"><span class="elsevierStyleSup">10</span></a>. Con ello pudo demostrar que las joyas del entierro colectivo no eran muy antiguas, y que debieron pertenecer a personas principales venidas de fuera, acaso “una familia regia a la que los zapotecos o los mexicanos sorprendieron en una emboscada, o […] un gran señor muerto en la guerra” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0060">Caso, 1932b</a>. p. 31). En la síntesis histórica de sus exploraciones, empero, relacionó la narrativa de los documentos con el debilitamiento de los suelos serranos y un menor rendimiento de las cosechas. Al mismo tiempo, la metrópoli zapoteca era abandonada y pasaba a ser una ciudad de segunda categoría. En ese contexto, “nuevos hombres cultivados al contacto de las culturas del centro de México, hicieron irrupción en el Valle […]. Eran los mixtecos que habían salvado por fin la barrera de montañas en la que durante siglos los había contenido Monte Albán y se derramaban por el valle ocupando los pueblos zapotecas” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0110">Caso, s.f., pp. 4-5</a>).</p><p id="par0085" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Ahora bien, la discusión que suscitó el hallazgo de la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7 fue la causa por la que Caso pospuso el estudio de la gente que llegó de los Almoloyas <span class="elsevierStyleItalic">ha más de trescientos años</span> para asentarse en las cercanías de Monte Albán. O sea, que para sustentar sus hipótesis tenía que localizar otros contextos arqueológicos relacionados con los grupos serranos y conocer los objetos cerámicos que estos emplearon al arribar a los valles. Fue entonces que entró en escena el tema de la vajilla policromada. En su segundo informe de labores Caso señala que la cerámica mixteca con decoración polícroma “de variadas y bonitas formas que participan de una gran semejanza y hasta identidad con la de Cholula, nunca ocurre en las partes altas de Monte Albán; solo esporádicamente se encuentra en las faldas de la montaña, y otros lugares del Valle de Oaxaca y […] tiende a ser posterior a la cerámica zapoteca” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0065">Caso, 1934</a>, pp. 15-16). Inspirado en la idea de coexistencia cultural, sugiere que la cerámica mixteca es un producto que solo ocurre en regiones de habla mixteca, y que “cuando aparece en lugares ocupados por pueblos de lengua zapoteca se debe a invasiones posteriores, a influencias esporádicas o quizás a que fueron llevados allí durante la invasión de los mexicanos, en los últimos años anteriores a la Conquista” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0065">Caso, 1934</a>, p. 16).</p></span><span id="sec0025" class="elsevierStyleSection elsevierViewall"><span class="elsevierStyleLabel">5</span><span class="elsevierStyleSectionTitle" id="sect0045">Los materiales mixtecos de Monte Albán y otros sitios de Oaxaca</span><p id="par0090" class="elsevierStylePara elsevierViewall">En el informe de las exploraciones realizadas en 1934-1935 Caso reporta abundantes piezas de cerámica polícroma mixteca halladas en las afueras de la gran plaza de Monte Albán. Las de la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>59, dice, son de tipo más corriente por haber sido usadas con propósitos funerarios. Entre ellas había “varias ollas de cuello largo y con vertedera en forma de pico, semejantes a las polícromas de esta clase que son tan abundantes en la región mixteca, pero solo la mayor conservaba restos de la decoración polícroma alrededor del cuello. Creo, por lo tanto, que se trata de una tumba mixteca de escasa importancia y que este estilo mixteco de cerámica debe colocarse después de las cuatro épocas zapotecas” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0070">Caso, 1935</a>, pp. 23-24). En la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>63 volvió a encontrar una olla vertedera junto con dos patojos, un sahumador, muchos cajetes de barro negro y un comal de barro café. Esta cerámica “parece contemporánea de la descubierta en la tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>59 y de la que descubrimos en la tumba de Xoxo, que encontramos en la primera temporada, y posiblemente corresponde a la ocupación mixteca de Monte Albán, cuando ya la ciudad y otros pueblos del Valle, como Cuilapan, Xoxo y Nazareno, habían sido abandonados por los zapotecas” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0070">Caso, 1935</a>, p. 24). Tras recolectar numerosos tiestos polícromos en la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>64 se abocó a la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>75, donde volvió a encontrar patojos, sahumadores y cajetes. Ya que no encontró la típica olla con vertedera, asumió que el ajuar podía ser de la última época zapoteca con influencia de los mixtecos. Para confirmar esa influencia, o que la tumba fuera mixteca, menciona el hallazgo de “una barrita de piedra, en la que está esculpida una figura humana del mismo estilo que las figurillas de piedra que son tan abundantes en la Mixteca y que se conocen con el nombre de «penates»” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0070">Caso, 1935</a>, p. 25).</p><p id="par0095" class="elsevierStylePara elsevierViewall">El que la cerámica mixteca predomine en los derredores del Montículo del Pitahayo, o en lugares más bajos de Monte Albán, no le significó a Caso que sus portadores fueran socialmente marginados<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0055"><span class="elsevierStyleSup">11</span></a>. Al contrario, en su informe de las temporadas 1936-1937 explica que “Uno de los entierros encontrados en la región de cerámica mixteca aparece en posición sedente confirmando esto la diferencia entre los métodos de enterramiento, zapotecos y mixtecos” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0075">Caso, 1938</a>, p. 39). Otro entierro incluía “una bella vasija polícroma de tipo mixteco, y en su interior una curiosa herramienta formada por varios cinceles de cobre de distintos tamaños y un instrumento de concha. Dentro de la vasija aparecieron algunos fragmentos de hueso labrado del mismo estilo que los descubiertos en la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0075">Caso, 1938</a>, pp. 36-37). Ello le sugirió que la persona enterrada pudo ser un artífice de huesos labrados, y tal vez uno de los que esculpieron los ejemplares de dicha tumba.</p><p id="par0100" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Ahora bien, entre las investigaciones de Eulalia Guzmán en la Mixteca Alta destaca la visita al Pueblo Viejo de Tamazulapan, donde halló abundante “barro policromo, llamado mixteco [y junto a él] dos patas de barro azteca rojo amarillento con rayas negras y un fragmento de molcajete también del mismo barro, con rayas verticales negras” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0195">Guzmán, 1934</a>, p. 38). No obstante, la escasez del polícromo brillante en los demás lugares que recorrió, o su concentración en áreas limitadas, le sugirieron que, de ocurrir lo mismo en los demás sitios arqueológicos de la Mixteca, dicho barro no sería de la región “sino procedente por comercio de Tepeaca o de Cholula. No sé si este barro se encuentre en alguna otra zona arqueológica de la Mixteca, en abundancia tal (como sucede en Tepeaca y Cholula), que dicha zona pueda tomarse como lugar de origen de esa cerámica” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0195">Guzmán, 1934</a>, p. 40). Aunque la cuestión planteada por Guzmán no ha sido resuelta, las excavaciones de Jorge Acosta en la Iglesia Vieja de Chachoapan arrojaron una primera luz sobre el problema. Al respecto comenta Caso, que el edificio colonial está colocado sobre los cimientos de una antigua construcción mixteca ocupada antes de la fundación del pueblo actual. En dicho lugar los fragmentos de cerámica polícroma fueron muy abundantes, habiéndose recogido cerca de 10<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>000 ejemplares<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0060"><span class="elsevierStyleSup">12</span></a>. Como también se encontró un fragmento decorado con flores, cuyos pétalos y sépalos están sombreados, y el puño de una espada del siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">xvi</span>, concluye que el polícromo mixteco es un producto reciente y que los principios de su elaboración se han de ubicar en la última época mixteca (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0075">Caso, 1938</a>, pp. 53-54)<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0065"><span class="elsevierStyleSup">13</span></a>.</p><p id="par0105" class="elsevierStylePara elsevierViewall">En Mitla, la excavación de la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>5 descubrió los huesos de ocho esqueletos y veinte cascabeles de cobre, algunos de ellos del tipo de hilo enrollado, además de una pinza de cobre, un objeto de metal en forma de disco y una vasija. Sobre esta última señalan <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0115">Caso y Rubín de la Borbolla (1936, p. 10)</a> que “es de un tipo mixteco muy característico. El cuerpo está pintado de rojo y el cuello de amarillo, negro y blanco con pequeñas rayitas paralelas verticales en el borde. Tiene tres pies cónicos muy largos. Todas estas características la identifican como una vasija mixteca o bien como una vasija zapoteca pero inspirada en modelos mixtecos”. Además se hallaron cinco piedras labradas en los cimientos del edificio que ocupa el Palacio Municipal, cuyo estilo es distinto al de las piedras con relieve de Monte Albán. Sobre ellas escriben los autores que “conservan restos de haber estado pintadas de rojo y pertenecen probablemente a la última época de Mitla, cuando los mixtecos habían ocupado esta población o bien habían influenciado el estilo zapoteco, lo que se ve palpablemente en las pinturas murales que decoran los tableros en el patio interior del Establecimiento Católico” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0115">Caso y Rubín de la Borbolla, 1936</a>, pp. 6-7). El reciente análisis de dichas pinturas demuestra, sin embargo, que no se han de atribuir a los mixtecos, ya que sus antecedentes se encuentran en la región chichimeca del sur de Puebla (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0165">Fahmel, 2014</a>). Su elaboración corresponde, por lo tanto, a un contexto en el cual se estaban integrando a la cultura zapoteca numerosos elementos foráneos que parecen fechar en la época tolteca tardía (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0020">Bernal, 1964</a>, p. 460).</p></span><span id="sec0030" class="elsevierStyleSection elsevierViewall"><span class="elsevierStyleLabel">6</span><span class="elsevierStyleSectionTitle" id="sect0050">Monte Albán IV-V y los zapotecos</span><p id="par0110" class="elsevierStylePara elsevierViewall">En su publicación sobre el calendario y la escritura de las antiguas culturas de Monte Albán, <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0090">Caso (1947, p. 5)</a> propuso que los rasgos característicos de la cultura zapoteca se observan hasta “las épocas<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>III-<span class="elsevierStyleItalic">a</span>, III-<span class="elsevierStyleItalic">b</span> y<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV, mientras que la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V, que puede en gran parte ser contemporánea con la<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV, se caracteriza por ser claramente mixteca”. Más tarde aclaró, junto con Bernal (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0120">Caso y Bernal, 1952</a>, p. 372), que la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IIIB debió terminar con Tula, ya que en las tumbas y ofrendas “han aparecido objetos de cerámica «plomiza» <span class="elsevierStyleItalic">(plumbate)</span> y «anaranjada fina» <span class="elsevierStyleItalic">(fine orange)</span>, que son dos tipos muy característicos de la época tolteca; en consecuencia, la llamada época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV debe corresponder al período entre el apogeo de Tula, en 900 ó 1,000, y la caída de Tenochtitlán en 1521”. El que los materiales de las épocas<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IIIB y<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV sean tan parecidos se debe a que la cultura zapoteca siguió desarrollándose en los valles, y lo que separa a los dos periodos fue el abandono de la zona monumental de Monte Albán (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0025">Bernal, 1965</a>, p. 804; <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0125">Caso et al., 1967</a>).</p><p id="par0115" class="elsevierStylePara elsevierViewall">En cuanto a las tumbas excavadas en Yagul, <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0020">Bernal (1964, p. 456)</a> señala que un veinte por ciento de ellas “tiene el tablero de la fachada decorado con mosaico de piedra generalmente muy sencillo y con motivo de <span class="elsevierStyleItalic">xicalcoliuhqui</span> o partes de él. Todas las tumbas con esta decoración […] contuvieron cerámica clasificada como mixteca. Sin embargo, la arquitectura general de las tumbas no parece sino una variante de las tumbas zapotecas de Monte Albán y otros sitios”. En el patio<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>F del Palacio de los Seis Patios, añade, las construcciones zapotecas más antiguas fueron cubiertas sucesivamente por tres edificios de estilo distinto, muy similar al de los palacios de Mitla. En este contexto se halló cerámica mixteca debajo del estuco<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>4, consistente en “cajetes semiesféricos de gris mixteco, pero no las formas de pies largos o rematados por cabezas de animal. Inmediatamente abajo del estuco<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>2 aparecieron dos fragmentos polícromos y abundantes restos de los tipos mixtecos del Valle, de hecho casi todos los tipos de la tabla general” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0020">Bernal, 1964</a>, p. 455).</p><p id="par0120" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Con respecto a las ruinas de Mitla, <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0085">Caso (1939b, pp. 177-179)</a> concluye que “<span class="elsevierStyleItalic">no hay en Mitla nada que no se encuentre en Monte Albán, aunque sea en forma rudimentaria</span> (sic), lo que comprueba que Monte Albán fué el lugar del que salieron los elementos que más tarde habían de formar las características de Mitla”. <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0020">Bernal (1964, p. 453)</a> secundó esta idea, aunque añade que la arquitectura de Mitla combina elementos zapotecos con “elementos nuevos que podemos llamar, con dudas, mixtecos, principalmente la fastuosa decoración de mosaico de piedra, el empleo de enormes monolitos y la distribución general de los aposentos que no tiene antecedentes directos en Monte Albán u otras ciudades del Valle”. Los grupos de las Columnas y de la Iglesia, dice, “corresponden a la época final antes de la conquista y son posteriores a las construcciones <span class="elsevierStyleItalic">últimas</span> del grupo del Sur. Solo se encontró en esos dos patios cerámica de la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V de Monte Albán, pero ni un solo tepalcate polícromo ni objetos de metal” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0020">Bernal, 1964</a>, p. 453). La secuencia del grupo del Sur, en cambio, inicia con la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IIIA y continúa durante la épocas<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV y<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V, sin haberse hallado piezas polícromas o de metal. La Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7, dice, “es posterior al [último] piso del patio, ya que éste fue roto para construirla; contuvo cerámica<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V, pero ninguna pieza polícroma ni metal. Su construcción es, sin embargo, seguramente zapoteca, tanto por el techo en parte angular como por el estilo de la piedra grabada que apareció al fondo” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0020">Bernal, 1964</a>, p. 454).</p><p id="par0125" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Ahora bien, cabe recordar que los análisis realizados a la cerámica Gris<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3M por <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0175">Feinman et al. (1990)</a> demostraron que dicha cerámica no es más que la continuación, tecnológicamente refinada, de la tradición cerámica de Monte Albán. Con ello no solo se invalida su atribución a los mixtecos, sino que se resuelve el enigma que representa su presencia en Yagul y en las tumbas de Mitla exploradas por Bernal. Es decir, la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3c hallada al lado norte del patio Sur, muy parecida a las dos grandes tumbas del grupo de las Columnas, también sería zapoteca, a pesar de estar recubierta de mosaico de piedra y contener <span class="elsevierStyleItalic">cerámica mixteca</span> (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0020">Bernal, 1964</a>, p. 454)<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0070"><span class="elsevierStyleSup">14</span></a>.</p></span><span id="sec0035" class="elsevierStyleSection elsevierViewall"><span class="elsevierStyleLabel">7</span><span class="elsevierStyleSectionTitle" id="sect0055">Zaachila y las tumbas del Montículo A</span><p id="par0130" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Aunque Alfonso Caso e Ignacio Bernal tuvieron mucho cuidado de no asignar una identidad étnica a los materiales arqueológicos, con el tiempo dieron entrada a la idea que durante la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IIIB-IV algunos elementos culturales de la nación mixteca se habían incorporado a la tradición zapoteca. No obstante, siempre defendieron la continuidad de la cultura de Monte Albán hasta la época del Contacto (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0170">Fahmel, 2015</a>). En palabras de <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0025">Bernal (1965, p. 806)</a>, “en muchos lugares la cultura identificada con el periodo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV de Monte Albán parece haber sobrevivido hasta la conquista española, aunque más y más mezclada o asociada a la cultura mixteca”. De ésta señala que:<span class="elsevierStyleDisplayedQuote" id="dsq0020"><p id="spar0030" class="elsevierStyleSimplePara elsevierViewall">No pienso que sea riesgoso afirmar que los mixtecos históricos fueron los portadores de la cultura Mixteca-Puebla <span class="elsevierStyleItalic">en la región oaxaqueña</span> [sic], aunque ello no significa que fueran sus iniciadores o portadores principales. De hecho, el mismo estilo se encuentra también en la fase final de la Chinantla y del área cuicateca. Esto recuerda el problema, del que ya hemos hablado, del papel que pudieron haber jugado otros pueblos en el desarrollo de las antiguas culturas de Oaxaca (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0025">Bernal, 1965</a>, pp. 789-790).</p></span></p><p id="par0135" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Cuando Roberto Gallegos excavó las Tumbas<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>1 y<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>2 de Zaachila encontró materiales que lo llevaron a pensar que la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV debía fechar entre 800 y 1200 dC, y la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V entre 1200 y 1521 dC<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0075"><span class="elsevierStyleSup">15</span></a>. De esta manera puso fin a las hipótesis de Caso y Bernal, y a la posibilidad de que los zapotecos enriquecieran su cultura material con objetos del estilo <span class="elsevierStyleItalic">Postclásico Internacional</span><a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0080"><span class="elsevierStyleSup">16</span></a>. Dentro del esquema simplificado de <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0185">Gallegos (2014, p. 199)</a>, la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV representa los finales de la tradición zapoteca, y la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V la ocupación mixteca de Zaachila. Los serranos habrían empleado el sistema constructivo nombrado <span class="elsevierStyleItalic">mixteco</span> y las grecas escalonadas en el vestíbulo de los recintos funerarios, y depositado en su interior diversas joyas y cerámica policromada (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0185">Gallegos, 2014</a>, pp. 253-267)<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0085"><span class="elsevierStyleSup">17</span></a>. Para justificar dicha periodificación el autor se sirvió de las imágenes plasmadas en la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>1 y su relación con las imágenes del <span class="elsevierStyleItalic">Códice Nuttall</span> (33-35), además de la información que brindan las <span class="elsevierStyleItalic">Relaciones Geográficas</span> sobre el enlace de personas principales de la Mixteca y Teozapotlan a mediados del siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">xiii</span>.</p><p id="par0140" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Ahora bien, si se piensa en los valles centrales de Oaxaca como una región que abarca más de 9<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>000<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>kilómetros cuadrados, la sustitución cultural propuesta por Gallegos resulta un tanto violenta. La relación que el autor establece entre la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>1, el <span class="elsevierStyleItalic">Códice Nuttall</span> y el primer contingente mixteco que llegó a los valles, empero, motivó una serie de nuevas investigaciones sobre el Señor<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>5 Flor y su dinastía representada en el <span class="elsevierStyleItalic">Códice Nuttall</span> y el <span class="elsevierStyleItalic">Lienzo de Guevea</span> (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0270">Paddock, 1983a; Oudijk, 1998</a>). Por otro lado, dio un mayor espacio al quehacer de los mixtecos en Zaachila y abrió la posibilidad de que las joyas descubiertas en ese lugar fueran elaboradas y usadas al mismo tiempo que las de la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7 de Monte Albán.</p></span><span id="sec0040" class="elsevierStyleSection elsevierViewall"><span class="elsevierStyleLabel">8</span><span class="elsevierStyleSectionTitle" id="sect0060">La arqueología de los valles y los modelos procesuales</span><p id="par0145" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Con base en el trabajo de Gallegos, los arqueólogos empezaron a buscar los sitios que podían esclarecer la situación vivida en los valles al final de la secuencia arqueológica. En un principio, <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0020">Bernal (1964, pp. 459-460)</a> concibió dos fases relacionadas con el fin del predominio tolteca y la expansión de los mixtecos<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0090"><span class="elsevierStyleSup">18</span></a>. La primera, nombrada Monte Albán<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>Va, habría comenzado a mediados del siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">xii</span>. Sus indicadores incluirían los cajetes semiesféricos que con frecuencia muestran una banda más oscura o más clara, las jarras con vertedera abierta en el borde, las ollas con decoración aplicada y las formas de silueta compuesta; todo ello, salvo las ollas, en barro gris pulido. En la arquitectura habría aparecido la decoración con mosaico de piedra en los primeros edificios de Mitla y Yagul. La segunda fase, o Monte Albán<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>Vb, habría iniciado alrededor de 1450, manifestándose a través de la presencia, que no la abundancia, de cerámica policromada junto con los elementos del periodo previo. Además estarían los objetos de oro, los huesos labrados, los mosaicos de turquesa, los soportes alargados frecuentemente terminados por cabezas de animal, las construcciones finales y más vastas de Mitla y Yagul, las dos tumbas de Zaachila y la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7 de Monte Albán.</p><p id="par0150" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Tiempo después, <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0230">Joyce Marcus y Kent Flannery (1990, pp. 199-200)</a> presentaron un esquema dividido en tres fases, dentro del cual el horizonte Clásico parece traslaparse con el Postclásico (cfr. <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0170">Fahmel, 2015</a>). En la primera fase se ubicaría el G3M, que habría evolucionado de la vajilla gris del periodo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV y por ende sería contemporáneo del periodo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IIIB. A la par del G3M habría aparecido el Yanhuitlan Rojo-sobre-crema, importado de la Mixteca, pero no la cerámica policromada. Las siguientes dos fases caerían dentro del Postclásico tardío, observándose en la fase<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V media la convivencia de los tipos previos con los polícromos de estilo <span class="elsevierStyleItalic">Mixteca-Puebla</span>. La fase<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V tardía se habría extendido hasta el siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">xvi</span>, con todos los elementos del V<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>medio y la metalurgia del oro, la plata y el cobre.</p><p id="par0155" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Con base en los objetos y las fases antes mencionadas se elaboraron distintos modelos procesuales para explicar el desarrollo político, económico y social de la región, aunque la gente que usó dichos objetos nunca llegó a figurar en tales procesos<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0095"><span class="elsevierStyleSup">19</span></a>. El problema se resolvió, en apariencia, mediante un comentario de <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0030">Richard Blanton (1978, p. 27)</a>, quien puso en duda que la cerámica de la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV perteneciera a los zapotecos y que fuera contemporánea de los materiales mixtecos de la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V. Según este autor, “La cerámica del periodo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V se encuentra en todos los lugares que hemos recorrido, tanto en las comunidades que debieron ser zapotecas como en las comunidades mixtecas. Sentimos que el periodo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V es simplemente el periodo Postclásico tardío del valle”. La contraposición de esta idea con los planteamientos de <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0125">Caso et al. (1967)</a> llevó a que <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0180">Flannery y Marcus (1983, p. 279)</a> matizaran la situación y abogaran por la separación de dos asuntos: “las culturas zapoteca y mixteca por un lado, y la cerámica del Postclásico tardío por el otro. La confusión arqueológica aumenta en proporción directa con nuestra incapacidad de tratar a estas como asuntos separados”<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0100"><span class="elsevierStyleSup">20</span></a>. Es decir, que los materiales arqueológicos no necesariamente reflejan una situación histórica o una identidad étnica en particular. Sin embargo, a la postre se reconocería que a pesar de sus formas la cerámica Gris<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3M es parte de la tradición alfarera zapoteca (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0175">Feinman et al., 1990</a>), y que los elementos iconográficos discutidos por <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0105">Caso (1969)</a> y <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0185">Gallegos (2014)</a> predominan en la región mixteca y el Altiplano.</p><p id="par0160" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Ahora bien, no hay duda de que la solución del acertijo planteado originalmente por Caso se encuentra en el registro arqueológico de numerosos sitios oaxaqueños, incluido Monte Albán. Pero en vez de atender las consecuencias que tuvo el abandono de esta ciudad para la tradición cultural zapoteca, los arqueólogos se han dedicado a la definición de fases y procesos sociopolíticos que dan entrada a las ideas de <a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0260">Paddock (1964, 1970)</a> sobre el devenir de los grupos serranos<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0105"><span class="elsevierStyleSup">21</span></a>. O sea, si los primeros elementos “mixtecos” no fueron introducidos a los valles por gente afiliada a los toltecas habrían sido llevados por grupos previos, a los que este autor designa de forma genérica como “tetlamixtecos”. Estos grupos, que en efecto habían sido olvidados por la arqueología, representarían los materiales tempranos y las innovaciones ocurridas en la Mixteca tras el abandono de Teotihuacan. Su supuesta vinculación con una invasión masiva de los valles, el abandono de Monte Albán y el desalojo de la población zapoteca es, sin embargo, un tanto exagerada. Lo más grave de tales hipótesis es que han fomentado la idea que la cultura Monte Albán<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV fue simplemente dada de baja y reemplazada por la cultura Monte Albán<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0265">Paddock, 1970</a>, p. 225; <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0255">Oudijk, 2008</a>, p. 113).</p><p id="par0165" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Descartando, pues, las ideas que tienen que ver con grandes cambios poblacionales y la desaparición repentina de una tradición cultural milenaria, queda abierta la pregunta de si el esquema de <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0125">Caso et al. (1967)</a> permite proponer la existencia de dos tradiciones independientes durante la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V, o si solo estamos viendo la influencia de una cultura foránea en la tradición Monte Albán<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IIIB-IV. Para resolver este asunto habrá que trabajar intensamente sobre los indicadores que permitan reconocer la filiación de quienes usaron los materiales arqueológicos. Asimismo se tendrá que analizar a fondo el papel que jugaron los “mixtecos” en el señorío de Teozapotlan, y el significado que tuvo la ocupación de Tehuantepec para la geografía política de los zapotecos<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0110"><span class="elsevierStyleSup">22</span></a>.</p></span><span id="sec0045" class="elsevierStyleSection elsevierViewall"><span class="elsevierStyleLabel">9</span><span class="elsevierStyleSectionTitle" id="sect0065">Discusión</span><p id="par0170" class="elsevierStylePara elsevierViewall">A través de los numerosos trabajos realizados en Oaxaca se reconoce la imposibilidad de establecer la secuencia cultural de un entorno geográfico sin contemplar los contextos de los materiales y su relación con los de otras regiones. El estudio de la época histórica requiere, además, de un análisis cuidadoso de los conceptos que dan sentido a la información vertida en las fuentes documentales. De ahí que el enfoque particularista o la perspectiva estructural-funcionalista limiten seriamente la interpretación de los vestigios y las sociedades del pasado. Es decir, aunque se hallen yacimientos que en apariencia no interactuaron con otros sitios, es más que evidente que los mixtecos y zapotecos establecieron una red de relaciones sociales, políticas y culturales desde épocas tempranas.</p><p id="par0175" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Al concluir sus exploraciones en Oaxaca, <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0125">Caso et al. (1967, p. 447)</a> subrayaron que “cuando todavía no había desaparecido el estilo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IIIB-IV, ya los mixtecos se habían establecido en Monte Albán y fabricaban su cerámica y depositaban a sus muertos en tumbas y entierros. Algunos objetos, que han aparecido en tumbas del final de la<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IIIB-IV, se encuentran también en tumbas, entierros y ofrendas de lo que hemos llamado Época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V o Mixteca”. O sea, que en la medida que los contextos excavados permitieron rastrear la presencia de gente serrana en los valles centrales también abrieron el camino al estudio de las tradiciones y preferencias de la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0025">Bernal, 1965; Fahmel, 2014</a>). El análisis historiográfico de los textos arqueológicos demuestra, sin embargo, que la contraposición de la tradición zapoteca y la cultura mixteca asociada a los códices sigue reforzando la visión de un <span class="elsevierStyleItalic">antes</span> y <span class="elsevierStyleItalic">después</span> que obstaculiza la comprensión de lo ocurrido durante el proceso de abandono de Monte Albán (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0170">Fahmel, 2015</a>). Más aún, el que no se haya encontrado la manera de estudiar de forma conjunta a los pueblos de los valles y de la sierra, o distinguir los elementos intangibles de la cultura material, es un claro indicio de que hasta la fecha no hay consenso sobre lo que debemos entender por <span class="elsevierStyleItalic">mixtecos</span> y <span class="elsevierStyleItalic">zapotecos</span> en el discurso arqueológico. Aunque la proximidad temporal da cierta ventaja al estudio de los mixtecos históricos, identificados por <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0125">Caso et al. (1967)</a> con los objetos de la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7 y las Tumbas<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>1 y<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>2 de Zaachila, la diversidad que se reconoce en la etnografía de la sierra y las diferencias lingüísticas que la acompañan impiden establecer una correlación directa entre los grupos del presente, los de la Colonia y sus antepasados (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0325">Spores, 1965; Dahlgren, 1990; Rodríguez Cano, 2016</a>). Por otro lado, la evolución del idioma zapoteco y el arribo de gente foránea debieron influir en la cultura y el orden político de los valles durante la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IIIB-IV. Los cambios en la situación sociolingüística habrían complicado la interacción entre las viejas y nuevas comunidades, lo que afecta nuestra comprensión de los sitios arqueológicos que sobrevivieron el abandono de Monte Albán. Los palacios de Mitla, por ejemplo, se inscriben dentro de la tradición edilicia de Monte Albán, y con base en el estudio de Elsie <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0285">Parsons (1936)</a> se sabe que los habitantes del lugar siempre fueron zapotecos. Las pinturas que se hallan en los dinteles, empero, son de estilo códice y representan mitos y deidades del entorno cultural chichimeca (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0165">Fahmel, 2014</a>). Entonces, ¿acaso la narrativa se leía o interpretaba en idioma <span class="elsevierStyleItalic">nahuatl</span>? Aunque el sitio fuera ocupado por gente que provenía del sur de Puebla, más bien parecería que los murales son la expresión de un cambio cultural generalizado que favoreció los intereses de un sector de la sociedad zapoteca compenetrado con las ideas del Altiplano. En este sentido, la adopción de la cerámica policromada no se relacionaría con el fin de la cultura de Monte Albán sino con las preferencias de dicho sector social y el valor de la vajilla que estaba de moda en toda Mesoamérica. Claro, siempre habrá quien defienda la hipótesis de una invasión mixteca a los valles centrales de Oaxaca, pero la popularidad de los escapularios dobles y la omnipresencia de la cerámica Gris<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3M son seña clara del vigor que mostró la tradición zapoteca hasta el arribo de los españoles.</p><p id="par0180" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Ahora bien, si se parte de la convivencia de culturas diferentes, como lo proponía Caso, pero se deconstruye el concepto boasiano de cultura, la arqueología de Oaxaca podría explicar situaciones que a todas luces son muy complicadas. Es decir, aunque las costumbres y los hábitos de los pueblos oaxaqueños han permitido enriquecer la descripción de los objetos estudiados, es necesario ir más allá de las fuentes históricas o de la información generada por la etnografía (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0130">Clarke, 1978</a>, p. 10). En el contexto de la ofrenda hallada en la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7 de Monte Albán, por ejemplo, el examen crítico del término <span class="elsevierStyleItalic">mixteco</span> resolvería el problema de la etnicidad asignada a los materiales de la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V. Al reseñar el pectoral de oro en forma de caballero tigre, <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0055">Caso (1932a, pp. 131-133)</a> discutió la representación de dos fechas asociadas al glifo A/O y a portadores del año anclados en sistemas de cómputo diferentes. Sin embargo, lo que interpretó como una simple correlación calendárica también es la sincronización de dos maneras de entender el mundo: la <span class="elsevierStyleItalic">mixteca</span> y la <span class="elsevierStyleItalic">zapoteca.</span> A través de este mensaje el usuario del pectoral podía comunicar a sus congéneres que vivía en un entorno bicultural y que conocía la mentalidad de los distintos pueblos asentados en los valles.</p><p id="par0185" class="elsevierStylePara elsevierViewall">En un breve estudio del calendario mixteco, <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0095">Caso (1956, p. 488)</a> adelantó la hipótesis que:<span class="elsevierStyleDisplayedQuote" id="dsq0025"><p id="spar0035" class="elsevierStyleSimplePara elsevierViewall">fue el padre del gran conquistador, 8 Venado “Garra de Tigre”, el llamado 5 Lagarto “Tláloc-sol muerto” o “Tlachitonatiuh”, fundador de la Segunda Dinastía de Tilantongo, quien hizo [una] reforma del calendario en el año 12 ó 13 Casa del cómputo mixteco, que corresponde al año 13 Buho del zapoteco [… con lo cual] los mixtecos adoptaron el calendario tolteca […] a partir de entonces los glifos mixtecos están estrechamente emparentados con los mexicanos, y los años se llaman Caña, Pedernal, Casa y Conejo.</p></span></p><p id="par0190" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Aunque los materiales diagnósticos de la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V, y en especial las cerámicas Gris<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3M y policromada suelen hallarse en contextos que carecen de inscripciones basadas en el nuevo sistema sígnico, las pinturas de Mitla y el pectoral de la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7 demuestran que también los zapotecos adoptaron el estilo iconográfico denominado <span class="elsevierStyleItalic">Postclásico Internacional</span>. La pregunta es si ello sucedió durante el mandato del señor 8<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>Venado o poco después de su muerte, acaecida en el año 1115 d.C.<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#fn0115"><span class="elsevierStyleSup">23</span></a>.</p><p id="par0195" class="elsevierStylePara elsevierViewall">Antes de terminar es necesario volver a las hipótesis de Caso y Bernal sobre el abandono de Monte Albán y el inicio de la época V (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0120">Caso y Bernal, 1952</a>, p. 372; <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0020">Bernal, 1964</a>, pp. 459-460). Con base en las ideas de estos autores se antoja pensar que a mediados del siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">xii</span> algunas gentes del sur de Puebla y norte de Oaxaca tomaron las rutas comerciales de los toltecas para dejar su impronta en la cultura material, las leyendas y pictografías de la sierra y los valles centrales. En la región mixteca, por ejemplo, se sintió su presencia después de que 8<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>Venado consolidó las alianzas que dieron el predominio a Teozacoalco y Tilantongo (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0040">Byland y Pohl, 1994; Byland, 2008</a>). En la región zapoteca, en cambio, parecen relacionarse con las nuevas genealogías que presidieron los sitios ocupados tras el abandono de Monte Albán (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0255">Oudijk, 2008; Fahmel, 2014</a>). En ambos casos, la aparición de objetos atribuidos a la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V delata el interés de algunos sectores sociales por adoptar los gustos del Altiplano e integrarlos a las tradiciones locales. El único problema con esta propuesta es que en años recientes se ha ubicado el abandono de Monte Albán en el siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">viii</span>, aunque a decir verdad la caída de Teotihuacan no llegó a impactar seriamente al estado zapoteco. De ahí que podamos escoger entre las siguientes opciones: bajar el inicio de la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V hasta el siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">ix</span> y descartar la información que publicó Alfonso Caso, o extender la ocupación de Monte Albán hasta mediados del siglo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">xii</span>. En el primer caso se cerraría el hueco que abrieron los esquemas procesuales entre los siglos<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span><span class="elsevierStyleSmallCaps">viii</span> y <span class="elsevierStyleSmallCaps">xiii</span>, aunque se desconfiguraría la relación establecida entre los materiales de la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7 de Monte Albán, las Tumbas<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>1 y<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>2 de Zaachila y la información contenida en el <span class="elsevierStyleItalic">Códice Nuttall</span>. En cambio, si se evitan algunas ideas relacionadas con la estructura cognitiva boasiana y las teorías que dan sustento a los estadios y horizontes culturales, la segunda opción daría cabida a la transformación de la cultura zapoteca a lo largo de la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV y a la paulatina adopción de los elementos que caracterizan a la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V. Al final de este proceso habría desaparecido el sistema sígnico que caracterizó a la epigrafía e iconografía de los valles durante quince siglos, y quedado abandonada la gran plaza de Monte Albán. Con ello la antigua ciudad dejó de ser el escenario de la política cultural regional, aunque en cierto momento la dinastía Xipe registrada en el <span class="elsevierStyleItalic">Códice Nuttall</span> pondría en relieve a los señores de Zaachila y su relación con los gobernantes de Yanhuitlan.</p></span></span>" "textoCompletoSecciones" => array:1 [ "secciones" => array:14 [ 0 => array:3 [ "identificador" => "xres888617" "titulo" => "Resumen" "secciones" => array:1 [ 0 => array:1 [ "identificador" => "abst0005" ] ] ] 1 => array:2 [ "identificador" => "xpalclavsec874527" "titulo" => "Palabras clave" ] 2 => array:3 [ "identificador" => "xres888618" "titulo" => "Abstract" "secciones" => array:1 [ 0 => array:1 [ "identificador" => "abst0010" ] ] ] 3 => array:2 [ "identificador" => "xpalclavsec874526" "titulo" => "Keywords" ] 4 => array:2 [ "identificador" => "sec0005" "titulo" => "Sinopsis" ] 5 => array:2 [ "identificador" => "sec0010" "titulo" => "Introducción" ] 6 => array:2 [ "identificador" => "sec0015" "titulo" => "Las evidencias: antecedentes de índole iconográfica" ] 7 => array:2 [ "identificador" => "sec0020" "titulo" => "Monte Albán y la Tumba 7" ] 8 => array:2 [ "identificador" => "sec0025" "titulo" => "Los materiales mixtecos de Monte Albán y otros sitios de Oaxaca" ] 9 => array:2 [ "identificador" => "sec0030" "titulo" => "Monte Albán IV-V y los zapotecos" ] 10 => array:2 [ "identificador" => "sec0035" "titulo" => "Zaachila y las tumbas del Montículo A" ] 11 => array:2 [ "identificador" => "sec0040" "titulo" => "La arqueología de los valles y los modelos procesuales" ] 12 => array:2 [ "identificador" => "sec0045" "titulo" => "Discusión" ] 13 => array:1 [ "titulo" => "Referencias" ] ] ] "pdfFichero" => "main.pdf" "tienePdf" => true "fechaRecibido" => "2016-08-10" "fechaAceptado" => "2016-12-07" "PalabrasClave" => array:2 [ "es" => array:1 [ 0 => array:4 [ "clase" => "keyword" "titulo" => "Palabras clave" "identificador" => "xpalclavsec874527" "palabras" => array:4 [ 0 => "Oaxaca" 1 => "Monte Albán V" 2 => "Zapotecos" 3 => "Mixtecos" ] ] ] "en" => array:1 [ 0 => array:4 [ "clase" => "keyword" "titulo" => "Keywords" "identificador" => "xpalclavsec874526" "palabras" => array:4 [ 0 => "Oaxaca" 1 => "Monte Alban V" 2 => "Zapotecs" 3 => "Mixtecs" ] ] ] ] "tieneResumen" => true "resumen" => array:2 [ "es" => array:2 [ "titulo" => "Resumen" "resumen" => "<span id="abst0005" class="elsevierStyleSection elsevierViewall"><p id="spar0005" class="elsevierStyleSimplePara elsevierViewall">En este trabajo se aborda la arqueología de la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V de Monte Albán y la presencia de materiales asociados con los mixtecos en los valles centrales de Oaxaca. Después de revisar la interpretación histórica de Alfonso Caso y Roberto Gallegos se analiza el significado de la terminología empleada por estos autores y su resignificación dentro de las contribuciones posteriores de índole antropológica. Los cambios de significado no solo han incidido en la narrativa arqueológica sino en la interpretación de los procesos que vincularon a los mixtecos con la cultura zapoteca.</p></span>" ] "en" => array:2 [ "titulo" => "Abstract" "resumen" => "<span id="abst0010" class="elsevierStyleSection elsevierViewall"><p id="spar0010" class="elsevierStyleSimplePara elsevierViewall">This paper focuses on the archaeology of period<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V at Monte Alban and the material culture associated with the Mixtecs in the central valleys of Oaxaca. After revisiting the historical interpretation of Alfonso Caso and Roberto Gallegos, it analyzes the terminology used by these authors and its change of meaning within recent anthropological contributions. This change not only affects the archaeological narrative but the interpretation of the processes that linked the Mixtec with the Zapotec culture.</p></span>" ] ] "NotaPie" => array:24 [ 0 => array:1 [ "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0005">La revisión por pares es responsabilidad de la Universidad Nacional Autónoma de México.</p>" ] 1 => array:3 [ "etiqueta" => "1" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0010">Véase también <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0150">Fahmel (1991)</a>.</p>" "identificador" => "fn0005" ] 2 => array:3 [ "etiqueta" => "2" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0015">Véase el análisis de las diferencias regionales dentro del área Mixteca-Puebla citado por <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0290">Pohl (2003, pp. 202-203)</a>.</p>" "identificador" => "fn0010" ] 3 => array:3 [ "etiqueta" => "3" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0020">Estos dos tipos cerámicos permitieron a <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0125">Caso et al. (1967)</a> definir la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>V de Monte Albán.</p>" "identificador" => "fn0015" ] 4 => array:3 [ "etiqueta" => "4" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0025">Este sistema, conocido también como “<span class="elsevierStyleItalic">opus mixteco</span>” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0150">Fahmel, 1991</a>), se caracteriza por alternar grandes lajas colocadas verticalmente con otras pequeñas dispuestas horizontalmente.</p>" "identificador" => "fn0020" ] 5 => array:3 [ "etiqueta" => "5" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0030">Otro elemento de ascendencia serrana, si no teotihuacana, es el glifo del año A/O que se mira en las pinturas de Mitla, y en una tumba saqueada y una lápida de Suchilquitongo (<a class="elsevierStyleCrossRefs" href="#bib0315">Seler, 1895; Fahmel, 2005, 2007</a>).</p>" "identificador" => "fn0025" ] 6 => array:3 [ "etiqueta" => "6" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0035">Al respecto, véase el discurso de numerosos Museos Comunitarios y Casas de la Cultura a lo largo y ancho de Oaxaca. También cabe mencionar las Academias de la Lengua Indígena y las Semanas de la Cultura organizadas en los distintos <span class="elsevierStyleItalic">campi</span> del sistema universitario que dirige la Universidad Tecnológica de Huajuapan.</p>" "identificador" => "fn0030" ] 7 => array:3 [ "etiqueta" => "7" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0040">El uso de puntos y rayas por los <span class="elsevierStyleItalic">mixtecos</span> implica algunos problemas que no se vislumbraban en aquel momento, tal y como los implica el supuesto uso exclusivo del signo A/O por esta gente (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0060">Caso, 1932b</a>, p.26; <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0160">Fahmel, 2007</a>).</p>" "identificador" => "fn0035" ] 8 => array:3 [ "etiqueta" => "8" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0045">Cabe aclarar que dicha aseveración responde a las emociones que en su momento provocó el hallazgo de la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7, puesto que a la fecha son más numerosos los objetos de oro y jade recuperados en otras regiones de Mesoamérica.</p>" "identificador" => "fn0040" ] 9 => array:3 [ "etiqueta" => "9" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0050">Esta correlación, que ante todo es una sincronología de dos sistemas de cómputo, indica que la joya fue usada en un contexto bi-cultural. Algo parecido se mira en la Lápida de Cuilapan (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0050">Caso, 1928</a>, p.124 y figura<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>95), en la que fueron labrados los años 10<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>Acatl y 10<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>Tecpatl.</p>" "identificador" => "fn0045" ] 10 => array:3 [ "etiqueta" => "10" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0055">Otras referencias a estos collares se encuentran en <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0105">Caso (1969, pp. 237-238)</a>. En ellas destacan tres ejemplares mencionados en el inventario de las joyas que se remitieron al Rey de España con Diego de Soto, y otro en el inventario redactado por Cristóbal de Oñate de las joyas que envió Cortés a España.</p>" "identificador" => "fn0050" ] 11 => array:3 [ "etiqueta" => "11" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0060">En otro lugar reitera que “en las partes bajas [de Monte Albán], donde se establecieron los mixtecos, las vasijas polícromas y los objetos de metal pueden encontrarse aún” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0110">Caso, s.f., p. 5</a>).</p>" "identificador" => "fn0055" ] 12 => array:3 [ "etiqueta" => "12" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0065">Algunos de estos materiales fueron ilustrados en <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0125">Caso et al. (1967, láminas XIII a XXVIII)</a>.</p>" "identificador" => "fn0060" ] 13 => array:3 [ "etiqueta" => "13" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0070">En fecha reciente, Michael <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0220">Lind (1987, pp. 14-27)</a> volvió a analizar la cerámica polícroma de Chachoapan y la separó en dos grupos. Al más antiguo lo denominó polícromo Pilitas y lo ubicó en la fase Nativitad tardía (1200-1520), mientras que al polícromo Iglesia lo situó en la fase Convento (1520-1660) o época Colonial temprana.</p>" "identificador" => "fn0065" ] 14 => array:3 [ "etiqueta" => "14" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0075">El contexto específico de la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3c se describe de la siguiente manera: “Sobre ese primer patio [de la época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IIIA] se construyó otro en la Época<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>IV al que corresponden el entierro<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>2 y probablemente la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3c; esta estuvo abajo de un palacio como los de las Columnas o la Iglesia. Más tarde y rompiendo el patio se construyó la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>7 de tipo zapoteca y sobre ella la pirámide Este. Al mismo tiempo se destruyó la Tumba<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3c y sobre ella y el palacio que la cubría se construyó el montículo Norte del sistema que también parece de estilo zapoteca” (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0020">Bernal, 1964</a>, pp.454-455).</p>" "identificador" => "fn0070" ] 15 => array:3 [ "etiqueta" => "15" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0080">Véase también el análisis de la estratigrafía del Montículo<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>A de Zaachila referido en <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0240">Markens (2014)</a>.</p>" "identificador" => "fn0075" ] 16 => array:3 [ "etiqueta" => "16" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0085">Véase la definición de este término en <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0300">Robertson (1970)</a>.</p>" "identificador" => "fn0080" ] 17 => array:3 [ "etiqueta" => "17" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0090">A decir de <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0105">Caso (1969, p. 235)</a>, “El reciente hallazgo hecho por Gallegos de una tumba en Zaachila, con objetos de oro, idénticos a los de Monte Albán, con huesos labrados del mismo estilo y con abundante cerámica policroma que se encuentra en la fase final de la cerámica de la Mixteca, comprueba plenamente que los objetos de ambas tumbas son mixtecos”.</p>" "identificador" => "fn0085" ] 18 => array:3 [ "etiqueta" => "18" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0095">De alguna forma, estas fases corresponden al arribo de los dos grupos de gente serrana, y a los casamientos entre zapotecos y mixtecos que mencionan las <span class="elsevierStyleItalic">Relaciones Geográficas</span>.</p>" "identificador" => "fn0090" ] 19 => array:3 [ "etiqueta" => "19" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0100">Véanse, por ejemplo, los trabajos de <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0205">Kowalewski (1983)</a> y <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0210">Kowalewski, Feinman, Finsten, Blanton y Nicholas (1989)</a>.</p>" "identificador" => "fn0095" ] 20 => array:3 [ "etiqueta" => "20" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0105">En este sentido, se ha de entender por cultura a la gente que empleaba determinada cerámica y otros materiales arqueológicos.</p>" "identificador" => "fn0100" ] 21 => array:3 [ "etiqueta" => "21" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0110">La clasificación detallada de la cerámica y la definición de nuevas fases se observa, por ejemplo, en el trabajo de <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0235">Markens (2008)</a>. <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0330">Winter y Martínez López (2014)</a>, por su parte, ofrecen un buen resumen de las fases arqueológicas de la ocupación de Zaachila.</p>" "identificador" => "fn0105" ] 22 => array:3 [ "etiqueta" => "22" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0115">Un buen ejemplo de los efectos que tuvo la convivencia cultural en Zaachila se encuentra en los depósitos funerarios de las Tumbas<span class="elsevierStyleHsp" style=""></span>3 y 4 de Zaachila (<a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0200">Herrera Muzgo y Vicente Cruz, 2014</a>).</p>" "identificador" => "fn0110" ] 23 => array:3 [ "etiqueta" => "23" "nota" => "<p class="elsevierStyleNotepara" id="npar0120">Fecha empleada por <a class="elsevierStyleCrossRef" href="#bib0040">Byland y Pohl (1994)</a>, basada en los estudios cronológicos de Emily Rabin.</p>" "identificador" => "fn0115" ] ] "bibliografia" => array:2 [ "titulo" => "Referencias" "seccion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "identificador" => "bibs0005" "bibliografiaReferencia" => array:66 [ 0 => array:3 [ "identificador" => "bib0005" "etiqueta" => "Acosta, 1965" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Preclassic and Classic Architecture of Oaxaca" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "J. Acosta" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:6 [ "editores" => "G.R.Willey" "paginaInicial" => "814" "paginaFinal" => "836" "serieVolumen" => "Vol. 3" "serieTitulo" => "Handbook of Middle American Indians" "serieFecha" => "1965" ] ] ] ] ] ] 1 => array:3 [ "identificador" => "bib0010" "etiqueta" => "Batres, 1902" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Exploraciones de Monte Albán" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "L. Batres" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1902" "editorial" => "Casa Editorial Gante" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 2 => array:3 [ "identificador" => "bib0015" "etiqueta" => "Bernal, 1949" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Exploraciones en Coixtlahuaca. Oax." "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "I. Bernal" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Revista" => array:5 [ "tituloSerie" => "Revista Mexicana de Estudios Antropológicos" "fecha" => "1949" "volumen" => "10" "paginaInicial" => "5" "paginaFinal" => "76" ] ] ] ] ] ] 3 => array:3 [ "identificador" => "bib0020" "etiqueta" => "Bernal, 1964" "referencia" => array:1 [ 0 => array:1 [ "referenciaCompleta" => "Bernal, I. [1964] “Arqueología Mixteca del Valle de Oaxaca”, en <span class="elsevierStyleItalic">Actas y Memorias del XXXV Congreso Internacional de Americanistas, México 1962</span>, Vol. 1, pp. 453-460. México: Instituto Nacional de Antropología e Historia." ] ] ] 4 => array:3 [ "identificador" => "bib0025" "etiqueta" => "Bernal, 1965" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Archaeological Synthesis of Oaxaca" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "I. Bernal" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:6 [ "editores" => "G.R.Willey" "paginaInicial" => "788" "paginaFinal" => "813" "serieVolumen" => "Vol. 3" "serieTitulo" => "Handbook of Middle American Indians" "serieFecha" => "1965" ] ] ] ] ] ] 5 => array:3 [ "identificador" => "bib0030" "etiqueta" => "Blanton, 1978" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Monte Albán: Settlement Patterns at the Ancient Zapotec Capital" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "R.E. Blanton" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1978" "editorial" => "Academic Press" "editorialLocalizacion" => "New York" ] ] ] ] ] ] 6 => array:3 [ "identificador" => "bib0035" "etiqueta" => "Byland, 2008" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Tree Birth, the Solar Oracle, and Achiutla" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "B.E. Byland" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "After Monte Albán: Transformation and Negotiation in Oaxaca, Mexico" "paginaInicial" => "331" "paginaFinal" => "364" "serieFecha" => "2008" ] ] ] ] ] ] 7 => array:3 [ "identificador" => "bib0040" "etiqueta" => "Byland y Pohl, 1994" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "In the Realm of 8 Deer: The Archaeology of the Mixtec Codices" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:2 [ 0 => "B. Byland" 1 => "J. Pohl" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1994" "editorial" => "University of Oklahoma Press" "editorialLocalizacion" => "Norman" ] ] ] ] ] ] 8 => array:3 [ "identificador" => "bib0045" "etiqueta" => "Caso, 1927" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Una pintura desconocida de Mitla" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A. Caso" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Revista" => array:6 [ "tituloSerie" => "Revista Mexicana de Estudios Históricos" "fecha" => "1927" "volumen" => "1" "numero" => "6" "paginaInicial" => "243" "paginaFinal" => "247" ] ] ] ] ] ] 9 => array:3 [ "identificador" => "bib0050" "etiqueta" => "Caso, 1928" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Las Estelas Zapotecas" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A. Caso" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1928" "editorial" => "Talleres Gráficos de la Nación" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 10 => array:3 [ "identificador" => "bib0055" "etiqueta" => "Caso, 1932a" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "“La Tumba 7 de Monte Albán es mixteca”" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A. Caso" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Revista" => array:7 [ "tituloSerie" => "Universidad de México" "fecha" => "1932" "volumen" => "IV" "numero" => "20" "paginaInicial" => "117" "paginaFinal" => "150" "itemHostRev" => array:3 [ "pii" => "S0015028209042940" "estado" => "S300" "issn" => "00150282" ] ] ] ] ] ] ] 11 => array:3 [ "identificador" => "bib0060" "etiqueta" => "Caso, 1932b" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Las Exploraciones en Monte Albán. Temporada 1931-1932" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A. Caso" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1932" "editorial" => "Publicación No. 7 del Instituto Panamericano de Geografía e Historia" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 12 => array:3 [ "identificador" => "bib0065" "etiqueta" => "Caso, 1934" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Exploraciones en Monte Albán, Oaxaca. 1930-1934" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A. Caso" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1934" "editorial" => "Informe manuscrito, Fondo Caso del Instituto de Investigaciones Antropológicas, Universidad Nacional Autónoma de México" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 13 => array:3 [ "identificador" => "bib0070" "etiqueta" => "Caso, 1935" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Las exploraciones en Monte Albán. Temporada 1934-1935" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A. Caso" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1935" "editorial" => "Publicación No. 18 del Instituto Panamericano de Geografía e Historia" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 14 => array:3 [ "identificador" => "bib0075" "etiqueta" => "Caso, 1938" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Exploraciones en Oaxaca. Quinta y sexta temporadas 1936-1937" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A. Caso" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1938" "editorial" => "Publicación No. 34 del Instituto Panamericano de Geografía e Historia" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 15 => array:3 [ "identificador" => "bib0080" "etiqueta" => "Caso, 1939a" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Culturas mixteca y zapoteca" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A. Caso" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1939" "editorial" => "Ediciones Encuadernables El Nacional" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 16 => array:3 [ "identificador" => "bib0085" "etiqueta" => "Caso, 1939b" "referencia" => array:1 [ 0 => array:1 [ "referenciaCompleta" => "Caso, A. (1939b). Resumen del Informe de las Exploraciones en Oaxaca, durante la 7.<span class="elsevierStyleSup">a</span> y la 8.<span class="elsevierStyleSup">a</span> Temporadas 1937-1938 y 1938-1939. En <span class="elsevierStyleItalic">Actas de la Primera Sesión del XXVII Congreso Internacional de Americanistas celebrada en la Ciudad de México en 1939</span>. Tomo II, pp. 159-187. México: Talleres Gráficos de la Nación." ] ] ] 17 => array:3 [ "identificador" => "bib0090" "etiqueta" => "Caso, 1947" "referencia" => array:1 [ 0 => array:1 [ "referenciaCompleta" => "Caso, A. (1947). Calendario y escritura de las antiguas culturas de Monte Albán. En <span class="elsevierStyleItalic">Obras Completas de Miguel Othón de Mendizábal</span>, Tomo 1, pp. 113-147. México: Talleres Gráficos de la Nación." ] ] ] 18 => array:3 [ "identificador" => "bib0095" "etiqueta" => "Caso, 1956" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "El calendario mixteco" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A. Caso" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Revista" => array:6 [ "tituloSerie" => "Historia Mexicana" "fecha" => "1956" "volumen" => "5" "numero" => "4" "paginaInicial" => "481" "paginaFinal" => "497" ] ] ] ] ] ] 19 => array:3 [ "identificador" => "bib0100" "etiqueta" => "Caso, 1964" "referencia" => array:1 [ 0 => array:1 [ "referenciaCompleta" => "Caso, A. (1964). Los Señores de Yanhuitlán. En <span class="elsevierStyleItalic">Actas y Memorias del XXXV Congreso Internacional de Americanistas, México 1962</span>, 1, 437-448. México: Instituto Nacional de Antropología e Historia." ] ] ] 20 => array:3 [ "identificador" => "bib0105" "etiqueta" => "Caso, 1969" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "El Tesoro de Monte Albán" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A. Caso" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1969" "editorial" => "Instituto Nacional de Antropología e Historia" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 21 => array:3 [ "identificador" => "bib0110" "etiqueta" => "Caso, 2016" "referencia" => array:1 [ 0 => array:1 [ "referenciaCompleta" => "Caso, A. (s.f.). Monte Albán, la zona arqueológica de fama mundial. Manuscrito, Fondo Caso. México: Instituto de Investigaciones Antropológicas, Universidad Nacional Autónoma de México." ] ] ] 22 => array:3 [ "identificador" => "bib0115" "etiqueta" => "Caso y Rubín de la Borbolla, 1936" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Exploraciones en Mitla 1934-1935" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:2 [ 0 => "A. Caso" 1 => "D.F. Rubín de la Borbolla" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1936" "editorial" => "México" "editorialLocalizacion" => "Publicación No. 21. Instituto Panamericano de Geografía e Historia" ] ] ] ] ] ] 23 => array:3 [ "identificador" => "bib0120" "etiqueta" => "Caso y Bernal, 1952" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Urnas de Oaxaca" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:2 [ 0 => "A. Caso" 1 => "I. Bernal" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1952" "editorial" => "Instituto Nacional de Antropología e Historia" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 24 => array:3 [ "identificador" => "bib0125" "etiqueta" => "Caso et al., 1967" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "La cerámica de Monte Albán" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:3 [ 0 => "A. Caso" 1 => "I. Bernal" 2 => "J. Acosta" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1967" "editorial" => "Instituto Nacional de Antropología e Historia" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 25 => array:3 [ "identificador" => "bib0130" "etiqueta" => "Clarke, 1978" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Analytical Archaeology" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "D.L. Clarke" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1978" "editorial" => "Columbia University Press" "editorialLocalizacion" => "New York" ] ] ] ] ] ] 26 => array:3 [ "identificador" => "bib0135" "etiqueta" => "Dahlgren, 1990" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "La Mixteca: su cultura e historia prehispánicas" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "B. Dahlgren" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1990" "editorial" => "Universidad Nacional Autónoma de México" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 27 => array:3 [ "identificador" => "bib0140" "etiqueta" => "Fahmel, 1986" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Tradición e identidad en la arqueología del valle de Oaxaca" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "B. Fahmel Beyer" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Revista" => array:5 [ "tituloSerie" => "Anales de Antropología" "fecha" => "1986" "volumen" => "XXIII" "paginaInicial" => "29" "paginaFinal" => "50" ] ] ] ] ] ] 28 => array:3 [ "identificador" => "bib0145" "etiqueta" => "Fahmel, 1988" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Mesoamérica Tolteca: Sus Principales Cerámicas de Comercio" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "B. Fahmel Beyer" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1988" "editorial" => "Universidad Nacional Autónoma de México" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 29 => array:3 [ "identificador" => "bib0150" "etiqueta" => "Fahmel, 1991" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "La arquitectura de Monte Albán" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "B. Fahmel Beyer" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1991" "editorial" => "Universidad Nacional Autónoma de México" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 30 => array:3 [ "identificador" => "bib0155" "etiqueta" => "Fahmel, 2005" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Suchilquitongo" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "B. Fahmel Beyer" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "La Pintura Mural Prehispánica en México-Oaxaca, Catálogo. Tomo I" "paginaInicial" => "146" "paginaFinal" => "215" "serieFecha" => "2005" ] ] ] ] ] ] 31 => array:3 [ "identificador" => "bib0160" "etiqueta" => "Fahmel, 2007" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "La cultura zapoteca en transición: indicios del Postclásico en la arquitectura y pintura clásica de Oaxaca" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "B. Fahmel Beyer" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "Culturas en Movimiento: Contribuciones a la transformación de identidades étnicas y culturas en América" "paginaInicial" => "119" "paginaFinal" => "129" "serieFecha" => "2007" ] ] ] ] ] ] 32 => array:3 [ "identificador" => "bib0165" "etiqueta" => "Fahmel, 2014" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Las pinturas de los palacios de Mitla, Oaxaca" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "B. Fahmel Beyer" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "2014" "editorial" => "Universidad Nacional Autónoma de México" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 33 => array:3 [ "identificador" => "bib0170" "etiqueta" => "Fahmel, 2015" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Monte Albán IIIB-IV y los zapotecos" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "B. Fahmel Beyer" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Revista" => array:6 [ "tituloSerie" => "Anales de Antropología" "fecha" => "2015" "volumen" => "49" "numero" => "2" "paginaInicial" => "253" "paginaFinal" => "290" ] ] ] ] ] ] 34 => array:3 [ "identificador" => "bib0175" "etiqueta" => "Feinman et al., 1990" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "A Multi-dimensional Perspective on Changes in the Ancient Oaxaca Grayware Ceramic Tradition" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:5 [ 0 => "G.M. Feinman" 1 => "S. Banker" 2 => "R.F. Cooper" 3 => "G.B. Cook" 4 => "L.M. Nicholas" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "Etnoarqueología (Primer Coloquio Bosch-Gimpera)" "paginaInicial" => "371" "paginaFinal" => "410" "serieFecha" => "1990" ] ] ] ] ] ] 35 => array:3 [ "identificador" => "bib0180" "etiqueta" => "Flannery y Marcus, 1983" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "An Editorial Opinion on the Mixtec Impact" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:2 [ 0 => "K.V. Flannery" 1 => "J. Marcus" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "The Cloud People: Divergent Evolution of the Zapotec and Mixtec Civilizations" "paginaInicial" => "277" "paginaFinal" => "279" "serieFecha" => "1983" ] ] ] ] ] ] 36 => array:3 [ "identificador" => "bib0185" "etiqueta" => "Gallegos, 2014" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "El Señor 9 Flor en Zaachila" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "R. Gallegos" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "2014" "editorial" => "Universidad Nacional Autónoma de México" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 37 => array:3 [ "identificador" => "bib0190" "etiqueta" => "Gaxiola, 1984" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Huamelulpan, un centro urbano de la Mixteca Alta" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "M. Gaxiola" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1984" "editorial" => "Instituto Nacional de Antropología e Historia" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 38 => array:3 [ "identificador" => "bib0195" "etiqueta" => "Guzmán, 1934" "referencia" => array:1 [ 0 => array:3 [ "comentario" => "Quinta época" "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Exploración arqueológica en la Mixteca Alta" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "E. Guzmán" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Revista" => array:5 [ "tituloSerie" => "Anales del Museo Nacional de Arqueología, Historia y Etnografía" "fecha" => "1934" "volumen" => "1" "paginaInicial" => "17" "paginaFinal" => "42" ] ] ] ] ] ] 39 => array:3 [ "identificador" => "bib0200" "etiqueta" => "Herrera Muzgo y Vicente Cruz, 2014" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "El montículo de la capilla de San Sebastián en Zaachila" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:2 [ 0 => "A. Herrera Muzgo Torres" 1 => "I.G. Vicente Cruz" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "Zaachila y su historia prehispánica" "paginaInicial" => "177" "paginaFinal" => "194" "serieFecha" => "2014" ] ] ] ] ] ] 40 => array:3 [ "identificador" => "bib0205" "etiqueta" => "Kowalewski, 1983" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Monte Albán IIIb-IV Settlement Patterns in the Valley of Oaxaca" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "S.A. Kowalewski" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "The Cloud People: Divergent Evolution of the Zapotec and Mixtec Civilizations" "paginaInicial" => "188" "paginaFinal" => "190" "serieFecha" => "1983" ] ] ] ] ] ] 41 => array:3 [ "identificador" => "bib0210" "etiqueta" => "Kowalewski et al., 1989" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Monte Albán's Hinterland, Part II: Prehispanic Settlement Patterns in Tlacolula, Etla, and Ocotlán, the Valley of Oaxaca, Mexico" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:5 [ 0 => "S.A. Kowalewski" 1 => "G.M. Feinman" 2 => "L. Finsten" 3 => "R.E. Blanton" 4 => "L.M. Nicholas" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1989" "editorial" => "Museum of Anthropology, University of Michigan" "editorialLocalizacion" => "Ann Arbor" ] ] ] ] ] ] 42 => array:3 [ "identificador" => "bib0215" "etiqueta" => "Kroeber, 1948" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Anthropology: Culture Patterns & Processes" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A.L. Kroeber" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1948" "editorial" => "A Harvest/HBJ Book" "editorialLocalizacion" => "New York & London" ] ] ] ] ] ] 43 => array:3 [ "identificador" => "bib0220" "etiqueta" => "Lind, 1967" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Mixtec Polychrome Pottery: A Comparison of the Late Preconquest Polychrome Pottery from Cholula, Oaxaca, and the Chinantla (M.A. thesis in Anthropology)" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "M. Lind" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1967" "editorial" => "University of the Americas" "editorialLocalizacion" => "Cholula" ] ] ] ] ] ] 44 => array:3 [ "identificador" => "bib0225" "etiqueta" => "Lind, 1987" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "The Sociocultural Dimensions of Mixtec Ceramics" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "M. Lind" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1987" "editorial" => "Vanderbilt University Publications in Anthropology, No. 3" "editorialLocalizacion" => "Nashville" ] ] ] ] ] ] 45 => array:3 [ "identificador" => "bib0230" "etiqueta" => "Marcus y Flannery, 1990" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Science and Science Fiction in Postclassic Oaxaca" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:2 [ 0 => "J. Marcus" 1 => "K.V. Flannery" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "Debating Oaxaca Archaeology" "paginaInicial" => "191" "paginaFinal" => "205" "serieFecha" => "1990" ] ] ] ] ] ] 46 => array:3 [ "identificador" => "bib0235" "etiqueta" => "Markens, 2008" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Advances in Defining the Classic-Postclassic Portion of the Valley of Oaxaca Ceramic Chronology" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "R. Markens" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "After Monte Albán: Transformation and Negotiation in Oaxaca, Mexico" "paginaInicial" => "49" "paginaFinal" => "94" "serieFecha" => "2008" ] ] ] ] ] ] 47 => array:3 [ "identificador" => "bib0240" "etiqueta" => "Markens, 2014" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Análisis del conjunto arquitectónico de las tumbas 1 y 2 de Zaachila" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "R. Markens" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "Zaachila y su historia prehispánica" "paginaInicial" => "75" "paginaFinal" => "98" "serieFecha" => "2014" ] ] ] ] ] ] 48 => array:3 [ "identificador" => "bib0245" "etiqueta" => "Mata, 1984" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Relación Geográfica de Teozapotlan (1580)" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "J. de Mata" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:6 [ "editores" => "R.Acuña" "paginaInicial" => "153" "paginaFinal" => "164" "serieVolumen" => "Vol. II" "serieTitulo" => "Relaciones Geográficas del siglo <span class="elsevierStyleSmallCaps">xvi</span>: Antequera" "serieFecha" => "1984" ] ] ] ] ] ] 49 => array:3 [ "identificador" => "bib0250" "etiqueta" => "Oudijk, 1998" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "The genealogy of Zaachila: Four weddings and a dynastic struggle" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "M.R. Oudijk" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "The Shadow of Monte Albán: Politics and Historiography in Postclassic Oaxaca, Mexico" "paginaInicial" => "13" "paginaFinal" => "36" "serieFecha" => "1998" ] ] ] ] ] ] 50 => array:3 [ "identificador" => "bib0255" "etiqueta" => "Oudijk, 2008" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "The Postclassic Period in the Valley of Oaxaca: The Archaeological and Ethnohistorical Records" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "M.R. Oudijk" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "After Monte Albán: Transformation and Negotiation in Oaxaca, Mexico" "paginaInicial" => "95" "paginaFinal" => "118" "serieFecha" => "2008" ] ] ] ] ] ] 51 => array:3 [ "identificador" => "bib0260" "etiqueta" => "Paddock, 1964" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "La etnohistoria mixteca y Monte Albán V" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "J. Paddock" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:6 [ "titulo" => "Actas y Memorias del XXXV Congreso Internacional de Americanistas, México 1962, 1" "fecha" => "1964" "paginaInicial" => "461" "paginaFinal" => "478" "editorial" => "Instituto Nacional de Antropología e Historia" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 52 => array:3 [ "identificador" => "bib0265" "etiqueta" => "Paddock, 1970" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Oaxaca in Ancient Mesoamerica" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "J. Paddock" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:5 [ "titulo" => "Ancient Oaxaca: Discoveries in Mexican Archaeology and History" "paginaInicial" => "87" "paginaFinal" => "240" "edicion" => "2nd edition" "serieFecha" => "1970" ] ] ] ] ] ] 53 => array:3 [ "identificador" => "bib0270" "etiqueta" => "Paddock, 1983a" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Lord 5 Flower's Family: Rulers of Zaachila and Cuilapan" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "J. Paddock" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1983" "editorial" => "Publication in Anthropology No. 29, Vanderbilt University" "editorialLocalizacion" => "Nashville" ] ] ] ] ] ] 54 => array:3 [ "identificador" => "bib0275" "etiqueta" => "Paddock, 1983b" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Mixtec Impact on the Postclassic Valley of Oaxaca" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "J. Paddock" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "The Cloud People: Divergent Evolution of the Zapotec and Mixtec Civilizations" "paginaInicial" => "272" "paginaFinal" => "277" "serieFecha" => "1983" ] ] ] ] ] ] 55 => array:3 [ "identificador" => "bib0280" "etiqueta" => "Paddock, 1986" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Reflexiones en torno a la Tumba 7 de Monte Albán, cincuenta años después de su descubrimiento" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "J. Paddock" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Revista" => array:6 [ "tituloSerie" => "Cuadernos de Arquitectura Mesoamericana" "fecha" => "1986" "volumen" => "7" "paginaInicial" => "3" "paginaFinal" => "8" "itemHostRev" => array:3 [ "pii" => "S0015028210006035" "estado" => "S300" "issn" => "00150282" ] ] ] ] ] ] ] 56 => array:3 [ "identificador" => "bib0285" "etiqueta" => "Parsons, 1936" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Mitla: Town of the Souls. And other Zapoteco-speaking Pueblos of Oaxaca, Mexico" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "E.C. Parsons" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1936" "editorial" => "The University of Chicago Press" "editorialLocalizacion" => "Chicago & London" ] ] ] ] ] ] 57 => array:3 [ "identificador" => "bib0290" "etiqueta" => "Pohl, 2003" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Ritual and Iconographic Variability in Mixteca-Puebla Polychrome Pottery" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "J.M.D. Pohl" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "The Postclassic Mesoamerican World" "paginaInicial" => "201" "paginaFinal" => "206" "serieFecha" => "2003" ] ] ] ] ] ] 58 => array:3 [ "identificador" => "bib0295" "etiqueta" => "Robertson, 1964" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Los manuscritos religiosos mixtecos" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "D. Robertson" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:6 [ "titulo" => "Actas y Memorias del XXXV Congreso Internacional de Americanistas, México 1962, 1" "fecha" => "1964" "paginaInicial" => "425" "paginaFinal" => "435" "editorial" => "México" "editorialLocalizacion" => "Instituto Nacional de Antropología e Historia" ] ] ] ] ] ] 59 => array:3 [ "identificador" => "bib0300" "etiqueta" => "Robertson, 1970" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "The Tulum Murals: The International Style of the Late Post-Classic" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "D. Robertson" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:6 [ "titulo" => "Verhandlungen des XXXVIII Internationalen Amerikanisten-Kongress, Stuttgart-München 1968, 2" "fecha" => "1970" "paginaInicial" => "77" "paginaFinal" => "88" "editorial" => "Klaus Renner" "editorialLocalizacion" => "München" ] ] ] ] ] ] 60 => array:3 [ "identificador" => "bib0305" "etiqueta" => "Rodríguez Cano, 2016" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Los topónimos de la Mixteca Baja. Corpus y análisis epigráfico y cartográfico (tesis de Doctorado en Estudios Mesoamericanos)" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "L. Rodríguez Cano" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "2016" "editorial" => "Universidad Nacional Autónoma de México" "editorialLocalizacion" => "México" ] ] ] ] ] ] 61 => array:3 [ "identificador" => "bib0310" "etiqueta" => "Salazar, 1984" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Relación Geográfica de Cuilapa (1581)" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "A. de Salazar" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:6 [ "editores" => "R.Acuña" "paginaInicial" => "173" "paginaFinal" => "182" "serieVolumen" => "Vol. I" "serieTitulo" => "Relaciones Geográficas del siglo XVI: Antequera" "serieFecha" => "1984" ] ] ] ] ] ] 62 => array:3 [ "identificador" => "bib0315" "etiqueta" => "Seler, 1895" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Wandmalereien von Mitla. Eine mexikanische Bilderschrift in Fresko" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "E. Seler" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Libro" => array:3 [ "fecha" => "1895" "editorial" => "A. Asher & Co" "editorialLocalizacion" => "Berlin" ] ] ] ] ] ] 63 => array:3 [ "identificador" => "bib0320" "etiqueta" => "Sharp, 1970" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Early Architectural Grecas in the Valley of Oaxaca" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "R. Sharp" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "Revista" => array:5 [ "tituloSerie" => "Boletín de Estudios Oaxaqueños. Museo Frissell de Arte Zapoteca" "fecha" => "1970" "volumen" => "32" "paginaInicial" => "1" "paginaFinal" => "12" ] ] ] ] ] ] 64 => array:3 [ "identificador" => "bib0325" "etiqueta" => "Spores, 1965" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "The Zapotec and Mixtec at Spanish Contact" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:1 [ 0 => "R. Spores" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:6 [ "editores" => "G.R.Willey" "paginaInicial" => "962" "paginaFinal" => "987" "serieVolumen" => "Vol. 3" "serieTitulo" => "Handbook of Middle American Indians" "serieFecha" => "1965" ] ] ] ] ] ] 65 => array:3 [ "identificador" => "bib0330" "etiqueta" => "Winter y Martínez López, 2014" "referencia" => array:1 [ 0 => array:2 [ "contribucion" => array:1 [ 0 => array:2 [ "titulo" => "Antecedentes arqueológicos del señorío de Zaachila" "autores" => array:1 [ 0 => array:2 [ "etal" => false "autores" => array:2 [ 0 => "M. Winter" 1 => "C. Martínez López" ] ] ] ] ] "host" => array:1 [ 0 => array:1 [ "LibroEditado" => array:4 [ "titulo" => "Zaachila y su historia prehispánica" "paginaInicial" => "99" "paginaFinal" => "134" "serieFecha" => "2014" ] ] ] ] ] ] ] ] ] ] ] "idiomaDefecto" => "es" "url" => "/01851225/0000005100000002/v3_201708300129/S0185122516300443/v3_201708300129/es/main.assets" "Apartado" => array:4 [ "identificador" => "67922" "tipo" => "SECCION" "en" => array:2 [ "titulo" => "Artículos misceláneos" "idiomaDefecto" => true ] "idiomaDefecto" => "en" ] "PDF" => "https://static.elsevier.es/multimedia/01851225/0000005100000002/v3_201708300129/S0185122516300443/v3_201708300129/es/main.pdf?idApp=UINPBA00004N&text.app=https://www.elsevier.es/" "EPUB" => "https://multimedia.elsevier.es/PublicationsMultimediaV1/item/epub/S0185122516300443?idApp=UINPBA00004N" ]
año/Mes | Html | Total | |
---|---|---|---|
2024 Noviembre | 5 | 0 | 5 |
2024 Octubre | 142 | 16 | 158 |
2024 Septiembre | 102 | 23 | 125 |
2024 Agosto | 83 | 15 | 98 |
2024 Julio | 69 | 8 | 77 |
2024 Junio | 54 | 16 | 70 |
2024 Mayo | 42 | 7 | 49 |
2024 Abril | 84 | 17 | 101 |
2024 Marzo | 75 | 5 | 80 |
2024 Febrero | 67 | 10 | 77 |
2024 Enero | 94 | 9 | 103 |
2023 Diciembre | 62 | 8 | 70 |
2023 Noviembre | 95 | 24 | 119 |
2023 Octubre | 164 | 47 | 211 |
2023 Septiembre | 153 | 15 | 168 |
2023 Agosto | 93 | 7 | 100 |
2023 Julio | 67 | 8 | 75 |
2023 Junio | 92 | 16 | 108 |
2023 Mayo | 104 | 18 | 122 |
2023 Abril | 101 | 17 | 118 |
2023 Marzo | 87 | 18 | 105 |
2023 Febrero | 76 | 21 | 97 |
2023 Enero | 56 | 26 | 82 |
2022 Diciembre | 81 | 12 | 93 |
2022 Noviembre | 80 | 16 | 96 |
2022 Octubre | 103 | 22 | 125 |
2022 Septiembre | 121 | 26 | 147 |
2022 Agosto | 87 | 11 | 98 |
2022 Julio | 46 | 15 | 61 |
2022 Junio | 87 | 19 | 106 |
2022 Mayo | 96 | 15 | 111 |
2022 Abril | 178 | 24 | 202 |
2022 Marzo | 256 | 19 | 275 |
2022 Febrero | 263 | 13 | 276 |
2022 Enero | 215 | 25 | 240 |
2021 Diciembre | 161 | 26 | 187 |
2021 Noviembre | 195 | 19 | 214 |
2021 Octubre | 197 | 25 | 222 |
2021 Septiembre | 184 | 24 | 208 |
2021 Agosto | 123 | 22 | 145 |
2021 Julio | 63 | 20 | 83 |
2021 Junio | 102 | 16 | 118 |
2021 Mayo | 110 | 18 | 128 |
2021 Abril | 267 | 75 | 342 |
2021 Marzo | 185 | 40 | 225 |
2021 Febrero | 144 | 26 | 170 |
2021 Enero | 140 | 21 | 161 |
2020 Diciembre | 138 | 12 | 150 |
2020 Noviembre | 171 | 19 | 190 |
2020 Octubre | 183 | 16 | 199 |
2020 Septiembre | 99 | 17 | 116 |
2020 Agosto | 67 | 18 | 85 |
2020 Julio | 79 | 16 | 95 |
2020 Junio | 70 | 21 | 91 |
2020 Mayo | 105 | 32 | 137 |
2020 Abril | 121 | 23 | 144 |
2020 Marzo | 196 | 30 | 226 |
2020 Febrero | 191 | 21 | 212 |
2020 Enero | 128 | 8 | 136 |
2019 Diciembre | 110 | 9 | 119 |
2019 Noviembre | 167 | 13 | 180 |
2019 Octubre | 118 | 10 | 128 |
2019 Septiembre | 97 | 14 | 111 |
2019 Agosto | 20 | 3 | 23 |
2019 Julio | 24 | 7 | 31 |
2019 Junio | 39 | 20 | 59 |
2019 Mayo | 39 | 51 | 90 |
2019 Abril | 59 | 19 | 78 |
2019 Marzo | 29 | 9 | 38 |
2019 Febrero | 47 | 11 | 58 |
2019 Enero | 27 | 9 | 36 |
2018 Diciembre | 15 | 4 | 19 |
2018 Noviembre | 51 | 20 | 71 |
2018 Octubre | 43 | 10 | 53 |
2018 Septiembre | 28 | 14 | 42 |
2018 Agosto | 24 | 6 | 30 |
2018 Julio | 23 | 8 | 31 |
2018 Junio | 22 | 12 | 34 |
2018 Mayo | 43 | 20 | 63 |
2018 Abril | 18 | 10 | 28 |
2018 Marzo | 10 | 1 | 11 |
2018 Febrero | 19 | 6 | 25 |
2018 Enero | 14 | 6 | 20 |
2017 Diciembre | 18 | 0 | 18 |
2017 Noviembre | 16 | 4 | 20 |
2017 Octubre | 18 | 2 | 20 |
2017 Septiembre | 28 | 5 | 33 |
2017 Agosto | 16 | 4 | 20 |
2017 Julio | 0 | 2 | 2 |
2017 Junio | 2 | 0 | 2 |
2017 Mayo | 0 | 5 | 5 |
2017 Abril | 1 | 1 | 2 |
2017 Marzo | 2 | 5 | 7 |
2017 Febrero | 0 | 1 | 1 |