Discurso de toma de protesta del Dr. Marco A. Martínez Ríos como nuevo Director General del Instituto Nacional de Cardiología Dr. Ignacio Chávez. En presencia de las siguientes personalidades, el 1º de abril de 2009:
Sr. Dr. José Ángel Córdova Villalobos
Secretario de Salud y Presidente de la Junta de Gobierno
Sr. Dr. Julio Sotelo
Titular de la Comisión Coordinadora de Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad
Dr. Enrique Graue Wiechers
Director de la Facultad de Medicina, UNAM
Dr. Manuel Ruiz de Chávez
Presidente de la Academia Nacional de Medicina
Dr. Enrique Ruelas Barajas
Secretario del Consejo de Salubridad General
Dr. Enrique Hong Chong
Miembro de la Junta de Gobierno
Dr. Fernando Ortiz Monasterio
Miembro de la Junta de Gobierno
Dr. David Kershenobich Stalnikowithz
Miembro de la Junta de Gobierno
Dr. Rubén Argüero Sánchez
Miembro de la Junta de Gobierno
Dr. Ignacio Chávez Rivera y familia,
Dr. Soni y Señora,
otros distinguidos invitados especiales y personal del Instituto Nacional de Cardiología
Señoras y Señores:
Agradezco cumplidamente al Sr. Secretario de Salud y a los miembros de la H. Junta de Gobierno, el honor que hoy me confieren.
Recibo el día de hoy la más alta distinción académica de mi vida, gran parte dedicada a esta noble Casa, el Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez. Estoy consciente de lo que significa mi nombramiento, de lo que vale como un honor y de lo que pesa como una responsabilidad; vengo lleno de optimismo y fe, no sólo emocionado del sentimiento de cumplir con un alto deber, sino también con la encendida llama del entusiasmo, del cariño por esta Casa, cuna y fuente de nuestra cultura cardiológica.
Nuestra misión es realizar una medicina de calidad y humanizada, enseñar generosamente e investigar con inteligencia, siempre y en todos ellos con amor a la Institución, esta mística ha permitido formarse a unos y realizarse en plenitud a otros por 65 años. Este amor obliga a aceptar el mandato en el que el derecho de la Institución está por encima de los intereses personales.
Dr. Marco A. Martínez Ríos, Director General del Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez.
Dr. José Ángel Córdova Villalobos, Secretario de Salud, México.
Esta tarea no es de una sola persona, es de toda la institución y por ello en ustedes confío, médicos, investigadores, enfermeras, personal paramédico, administrativos y de intendencia. Pido su ayuda y apoyo e invito a todos a su dedicación al trabajo diario, que piensen en el Instituto ante todo y no en sus propios intereses personales, pido que laboren con desinterés, con fe y con noble espíritu de servicio. Esta fue siempre la regla de esta Casa, la razón misma de ser de su mística, que la mantuvo y la mantiene unida a lo largo de su existencia. Pido a todos su esfuerzo común.
Quiero enfatizar que no sólo importa la unidad y la armonía, es importante también el avance científico, la valoración de los nuevos conocimientos y los avances tecnológicos para utilizarlos cuando es necesario sin supravalorarlos. El Instituto es una escuela en constante renovación y centro de difusión de la cardiología. En él, el enfermo recibe la atención eficaz, con calor humano, simpatía y deseo de ayuda, para lograrlo es indispensable investigar y enseñar.
Dr. Marco A. Martínez Ríos y algunos invitados: Dr. Ortiz Monasterio, Dr. Hong, Dr. Ruiz de Chávez y Dr. Sotelo.
Dr. Julio Sotelo, Coordinador de los Institutos Nacionales de Salud.
El maestro Chávez insistía: "No hay medicina que avance sin investigación que la fecunde". Necesitamos formar hombres de hoy, firmes en sus bases, ricos de doctrina, capaces de adaptarse a los cambios rápidos de la cardiología de nuestros tiempos.
El Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez, es una Institución que aglutina a un personal excepcional, que siempre se ha caracterizado por estar orgulloso de su pertenencia; pocas cosas se comparan con el brillo en los ojos y el timbre de voz de los integrantes del personal del Instituto cuando responden a la pregunta: ¿Dónde trabajas?, la respuesta de todos cuando respondemos que en el Instituto Nacional de Cardiología, esta satisfacción de decir que la vida nos proporcionó el enorme placer de trabajar en un sitio que nos llena de orgullo y que nos distingue como miembros de un grupo privilegiado; esto es algo que nos caracteriza y que me compromete a mantener y promover en los años futuros. Acrecentemos esa mística y trabajemos intensamente en paz y sin envidias ni rencores en bien del Instituto.
Tenemos, sin duda, una gran tarea por delante, el compromiso es con nuestra Patria, con su población y con el resto de Instituciones de Salud de nuestro país. El compromiso de ser el Instituto de Cardiología de más relevancia en México, producto del esfuerzo combinado de las generaciones de nuestros Maestros que nos precedieron, con los recursos materiales proporcionados por el presupuesto federal y de las Instituciones filantrópicas que nos han ofrecido la oportunidad de estar dotados de los recursos e infraestructura que nos permiten proporcionar la atención médica cardiológica de avanzada que nuestros pacientes requieren.
El Dr. Córdova Villalobos toma protesta al Dr. Martínez Ríos.
De izquierda a derecha: Dr. Hong, Dr. Ruiz de Chávez, Dr. Sotelo, Dr. Córdova, Dr. Graue, Dr. Ruelas, Dr. Argüero y Dr. Kershenobich.
Es por eso que debemos de insistir en mantener esa posición de privilegio; para poder beneficiar en una mejor forma y a un mayor número de pacientes que requieran de nuestro quehacer cardiológico.
Es ahí donde debemos de reconocer la magnitud de nuestro compromiso; en la enorme posibilidad que la vida nos ha deparado de poder ayudar a nuestros pacientes que tanto esperan de nosotros; en el compromiso de seguir siendo la Institución rectora de las políticas de salud en las enfermedades del corazón en nuestro país. Se espera mucho de nosotros, justo es que no defraudemos a quienes nos esperan y han tenido confianza en que haremos un buen papel.
Señor Secretario, señores miembros del H. Junta de Gobierno, de la mesa de honor e invitados en general. El Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez está consciente de lo que esto significa para nuestro país; expreso en mi nombre y en nombre de cada uno de sus integrantes, el compromiso formal de dedicar el máximo de los esfuerzos a realizar una labor que sólo sea digna de la confianza que se ha depositado en nosotros.
El Dr. Juan Verdejo Paris se dirige a mesa de honor y audiencia.
Quiero dejar constancia aquí de mi admiración y respeto por los que supieron seguir la senda abierta por el Maestro Chávez y que en todo momento mantuvieron los ideales y persiguieron sin descanso los objetivos de la Institución. Maestros Salvador Aceves, Manuel Vaquero, Jorge Soni, Ignacio Chávez Rivera y Fause Attie, espero de todo corazón poder estar a su altura. De una manera especial, quiero agradecer al Dr. Ignacio Chávez Rivera su apoyo, confianza, estímulo y amistad a lo largo de mis 45 años de vida en este Instituto.
Ante la rapidez con que se desarrollaron los acontecimientos que ustedes conocen y que culminan con mi toma de posesión como Director General, el día de hoy deseo comunicarles que el plan de trabajo que presenté a la H Junta de Gobierno es de continuidad al plan de trabajo del Dr. Attie y que la estructura de Gobierno seguirá siendo la misma, y posteriormente citaré a una nueva asamblea para notificarles los cambios que surgirán, producto de la natural reestructuración.
Quiero agradecer al grupo de los seis, a Sor Mary su desinteresado apoyo, basado únicamente en el amor al Instituto de Cardiología y, finalmente, quizá el mensaje personal más importante, el profundo agradecimiento a mi esposa Betty por su amor, comprensión y apoyo irrestricto por más de 45 años, y a mis hijos Marco, Rafael y Beatriz, así como a sus familias, por su cariño, los cuales indudablemente han sido el motor de mi realización personal. Hoy comparto con ustedes este gran honor.
Muchas Gracias.
Dr. Marco A. Martínez Ríos
1° de abril del 2009