Introducción. En las sociedades occidentales, el esfuerzo físico en el trabajo ha sido suplantado, en gran medida, por el esfuerzo intelectual, y la población empleada envejece progresivamente al tiempo que crece la proporción de mujeres que ingresan en el mercado laboral. En este contexto, el ambiente psicosocial desfavorable en el trabajo se está convirtiendo en algo muy prevalente en las formas de vida laboral modernas, y la relación entre el estrés laboral y diversos tipos de enfermedad está bien documentada1,2.
Un instrumento de notable actualidad para evaluar el estrés laboral es el modelo Desequilibrio esfuerzo-recompensa (DER) (Effort-Reward Imbalance o ERI)3. Su importancia internacional creciente ha hecho que haya más de 10 versiones idiomáticas y que se haya adaptado al castellano y comprobado estadísticamente en nuestro medio4. En el proceso de validación y adaptación transcultural de un cuestionario resulta de interés el análisis factorial confirmatorio (AFC) como una alternativa adecuada al análisis factorial exploratorio (AFE). El modelo de AFC corrige las deficiencias inherentes a la perspectiva exploratoria y supone una mayor concreción de las hipótesis contrastada al diagnosticar su bondad de ajuste (validación de constructo).
Objetivos. Dado que los estudios previos de comprobación estadística de la versión española del cuestionario ERI han empleado el AFE, el presente trabajo aborda el estudio de la validez de construcción y fiabilidad del cuestionario mediante el AFC.
Diseño. Estudio transversal y descriptivo.
Emplazamiento. Todos los centros de salud del Área Sanitaria IV de Asturias (Oviedo).
Participantes. Mediante una encuesta por correo entre todos los sanitarios del Área IV se pudo investigar a 233 profesionales sanitarios (médicos y personal de enfermería) mediante la aplicación autoadministrada del cuestionario DER. La muestra investigada abarcó al 55% de los sanitarios del Área en el momento del estudio.
Mediciones principales. El instrumento utilizado para evaluar el grado de estrés laboral de los individuos seleccionados fue la versión oficial española del cuestionario alemán ERI4 (disponible en la versión electrónica). Consta de 3 partes: en la primera (módulo I) se recogen las variables sociodemográficas más importantes del trabajador y del ambiente laboral. El módulo II (componente extrínseco del modelo) comprende 17 ítems y registra información de la apreciación del trabajador acerca de su situación laboral en lo referente a «esfuerzo extrínseco» (effort) (6 ítems; intervalo, 6-30) y «recompensa profesional» (reward) (11 ítems; intervalo, 11-55). El módulo III (componente intrínseco del modelo) comprende 6 ítems (intervalo, 6-24) y mide el grado de implicación vivido por el trabajador en su puesto de trabajo. Esta dimensión representa un factor latente único denominado «sobreimplicación» (overcommitmen).
Resultados. En la tabla 1 se resumen los resultados del análisis factorial confirmatorio y el coeficiente alfa de Chronbach para las escalas de los componentes extrínseco e intrínseco del modelo DER. Los análisis respectivos fueron realizados separadamente para las escalas sobre la base de los modelos estadísticos específicos conforme a los supuestos teóricos expuestos en el apartado anterior. Esta información es crucial, dado que la justificación estadística para usar las escalas simples y las medidas, compuestas en la explicación de estados de salud, descansa en la bondad de ajuste del modelo de medición con los datos.
Tanto en relación con los componentes extrínseco e intrínseco del modelo, los indicadores de bondad de ajuste son buenos y sobrepasan los umbrales exigidos en cada caso. Todos los pesos de regresión estandarizados son mayores de 0,4 y los índices muestran un satisfactorio ajuste del modelo con los datos5. Asimismo, los valores de alfa de Chronbach son también altos (α = 0,74-0,85), lo que confirma que la fiabilidad es satisfactoria. Estos hallazgos son congruentes con los comunicados en la versión original alemana y otras versiones europeas adaptadas del modelo ERI6.
Conclusiones. Los resultados de la estructura factorial permiten afirmar que el constructo subyacente en el modelo ERI ha podido ser replicado en su versión castellana. Por ello, y a pesar de las limitaciones inherentes a todos los procesos de validación de herramientas de medida extranjeras a nuestro medio, los presentes resultados pueden considerarse como una importante confirmación de validez y fiabilidad de versión castellana del modelo ERI para su uso en nuestro medio.
Agradecimientos
Los autores agradecen a los sanitarios de atención primaria su participación en el estudio y a la Gerencia del Área de Oviedo las facilidades dadas para que pudiera realizarse.