Objetivo. Varios estudios han sugerido la presencia de comorbilidad psiquiátrica, reumatológica y digestiva asociada a la fibromialgia (FM)1,2. El objetivo de este estudio es determinar la existencia de asociación entre FM y enfermedad psiquiátrica, reumatológica y digestiva.
Diseño. Estudio descriptivo, transversal, con grupo control.
Emplazamiento. Un centro de atención primaria.
Participantes. En total, 153 pacientes diagnosticados de FM entre el 1 de enero de 1985 y el 22 de junio de 2004. Se emparejaron por edad, sexo y fecha de diagnóstico con 153 controles sin FM.
Mediciones principales. Variables registradas: edad, sexo, diagnóstico de FM codificado según la clasificación internacional de enfermedades (CIE-10, código M79.0) y registrado en la historia clínica informatizada o, en su defecto, en papel. Para que un paciente fuera diagnosticado de FM debía cumplir los criterios de la American College of Rheumatology (tabla 1)3, enfermedades psiquiátricas (EP), reumatológicas (ER) y digestivas (ED) codificadas según la CIE-10 (capítulos V, XIII y XI, respectivamente)4. Se descartaron los procesos agudos y se recogieron exclusivamente los crónicos, definidos como los que tenían una duración > 3 meses. Análisis estadístico: pruebas de χ2 de Pearson y t de Student-Fisher.
Resultados. De los 153 casos, el 92,2% eran mujeres. No había asociación significativa (prevalencia relativa [PR] = 1,3; intervalo de confianza del 95% [IC del 95%], 0,8-2,1; p = 0,35) entre FM y ED. Se determinó la proporción de EP presente en cada grupo, siendo mayor en el grupo de FM: 85 casos (54,8%) frente a 71 controles (45,4%). Dicha diferencia no fue significativa (PR = 1,5; IC del 95%, 0,97-2,4; p = 0,07). Hubo asociación significativa entre el diagnóstico de FM y la presencia de ER (PR = 2,4; IC del 95%, 1,5-3,9; p < 0,0001).
Discusión y conclusiones. Hubo una tendencia hacia la asociación entre FM y un mayor porcentaje de EP, que fue no significativa a causa, posiblemente, del pequeño tamaño muestral y el elevado porcentaje de sujetos diagnosticados de alguna EP en el grupo control, como ya ha sucedido en estudios de diseño similar5. Cabe la posibilidad de que, en pacientes con ER inflamatorias en fase inicial, se pueda etiquetar como FM a un sujeto en el que posteriormente se constate la presencia de ER demostrable mediante marcadores diagnósticos analíticos y/o radiológicos. Este hecho debería ser tenido en cuenta en todo paciente que acuda a la consulta con sintomatología compatible con FM. Se precisan estudios prospectivos analíticos realizados en atención primaria que ayuden a determinar con mayor precisión la posible relación entre FM y EP, ER y ED, así como la dirección de dicha asociación.