Desde febrero de 2023 se encuentra disponible un nuevo principio activo sujeto a prescripción financiada para la ayuda en la deshabituación tabáquica. Como en 2020 con la financiación del bupropión y la vareniclina, debido a la alta difusión por los medios de comunicación, las personas fumadoras están demandando rápidamente el tratamiento a sus profesionales de atención primaria. Es preciso ceñirse a los requisitos diseñados por el Ministerio de Sanidad y los Servicios de Salud de las comunidades autónomas e indicaciones de la ficha técnica para que pueda prescribirse. No es el único tratamiento, si bien el único actualmente sujeto a financiación. La estrategia de promoción comercial del principio activo como alcaloide natural no ha de presuponer inocuidad, puede objetarse por ejemplo, que la heroína y la cocaína también son alcaloides naturales.
Quisiera realizar algunos comentarios relativos a la bibliografía existente sobre el manejo de la citisina. Iniciándose su manejo en la segunda mitad del siglo xx por los países del este, es un ejemplo de sesgo de publicación, dado que muchos estudios no estaban publicados en lengua inglesa, pero sí posteriormente revisados1,2. Si bien se encuentra asociación a favor de su eficacia, se ha criticado, no sin razón, cierta carencia de rigor en la metodología y gran heterogeneidad en dichos estudios. Algunos aseveran eficacia midiendo abstinencia tan solo a las pocas semanas. En ensayos clínicos más actuales, se valida la abstinencia por autorreferencia del paciente, y permite en los periodos abstinentes fumar 5 cigarrillos o menos3. El difuso empleo de la terminología anglosajona, no exactamente sinónima (cessation, abstinence, prolonged abstinence, sustained abstinence, continuous abstinence, etc.), hace difícil de extrapolar literalmente sus resultados a la cesación (total) tabáquica del idioma español4. Se observa generalmente un bajo número de participantes adherentes finalizando los ensayos, que determinaciones de CO en aire espirado mediante cooxímetro (útil para el diagnóstico del grado de tabaquismo y motivador en la fase de acción de deshabituación) es usado y debería considerarse inválido para medir la abstinencia o cesación. La vida media del CO es de 2-5h, normalizándose los niveles totalmente a las 24-48h del último cigarrillo, por lo que determinaciones tras más de 12-24h de abstinencia son negativas. Así, se realiza lo mismo en ensayos en los que se encuentra asociación a favor de la citisina, como en los de no inferioridad, demostrada o no5. También hay ensayos con participantes de edad fuera de la ficha técnica española del principio activo, en los que además no se encuentra superioridad en coste-beneficio. Siendo benigno, la bibliografía puede describirse como de metodología heterogénea. Lo que sí está demostrado es que el consejo administrado por sanitarios aumenta la deshabituación, y si además se realizan intervenciones intensivas, la eficacia puede verse incrementada 6.
El tratamiento farmacológico tiene un papel importante, pero el protagonismo absoluto de la atención primaria como pilar en promoción de la salud y prevención de la enfermedad en la deshabituación tabáquica no puede verse relegado por el aumento de la presión asistencial, falta de profesionales especializados, y el incremento de las consultas a demanda o por enfermedad. Son esenciales la implicación del paciente y la atención sanitaria de la medicina y enfermería de atención primaria, siendo el tratamiento farmacológico solo una herramienta más, eficaz de una forma limitada, dada la alta tasa de recaídas. La atención primaria marca la diferencia a favor en su eficacia.
Conflicto de interesesEl autor declara no tener conflicto de intereses.