metricas
covid
Buscar en
Atención Primaria
Toda la web
Inicio Atención Primaria Eficacia de un programa de automedida domiciliaria de la presión arterial como ...
Información de la revista
Vol. 44. Núm. 2.
Páginas 89-96 (febrero 2012)
Compartir
Compartir
Descargar PDF
Más opciones de artículo
Visitas
7051
Vol. 44. Núm. 2.
Páginas 89-96 (febrero 2012)
Original
Acceso a texto completo
Eficacia de un programa de automedida domiciliaria de la presión arterial como estrategia para disminuir la inercia terapéutica
Prevention of therapeutic inertia in the treatment of arterial hypertension by using a program of home blood pressure monitoring
Visitas
7051
Emilio Márquez Contrerasa,
Autor para correspondencia
emarquezc@papps.org

Autor para correspondencia.
, José Luis Martín de Pablosa, Jacinto Espinosa Garcíab, José Joaquín Casado Martíneza, Eugenio Sanchez Lópezc, José Escribanod, Grupo de Trabajo sobre Cumplimiento de la Asociación de la Sociedad española de Hipertensión Arterial y Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SEH-LELHA)
a Unidad de Gestión Clínica La Orden, Huelva, España
b Centro de Salud Villanueva de la Serena, Badajoz, España
c Centro de Salud el Puerto de Santa María, Cádiz, España
d Centro de Salud La Línea de la Concepción, Cádiz, España
Este artículo ha recibido
Información del artículo
Resumen
Texto completo
Bibliografía
Descargar PDF
Estadísticas
Tablas (6)
Tabla 1. Comparabilidad inicial de los grupos
Tabla 2. Comparación del porcentaje de hipertensos no controlados e inercia terapéutica de ambos grupos
Tabla 3. Evolución de la presión arterial sistólica (PAS) y diastólica (PAD) en cada uno de los grupos
Tabla 4. Comparación del grado de control de la hipertensión arteriala en los grupos de estudio
Tabla 5. Evolución de la presión arterial sistólica (PAS) y diastólica (PAD) en los pacientes no controlados en la visita 2 en función de la existencia o no de inercia terapéutica
Tabla 6. Causas que justifican la inercia terapéutica en cada visita
Mostrar másMostrar menos
Figuras (1)
Resumen
Objetivo

Evaluar si un programa de automedida domiciliaria de presión arterial (AMPA) es eficaz para obtener una menor inercia terapéutica (IT) en el tratamiento de la HTA.

Diseño

Estudio clínico controlado, aleatorizado y multicéntrico.

Emplazamiento

35 centros de salud de España.

Participantes

Se incluyeron 232 hipertensos.

Intervención

Se formaron 2 grupos con 116 individuos: 1, grupo de control (GC): recibieron la intervención habitual; 2, grupo de intervención: se inscribieron en un programa de AMPA.

Mediciones principales

La IT se midió mediante el cociente: (Número de pacientes sin modificación del tratamiento farmacológico en cada visita / Número de pacientes con cifras medias de PA ≥ 140 mmHg y/o ≥ 90 mmHg en población general o ≥ 130 y/o 80 mmHg en diabéticos) y multiplicado por 100. Se calculó la IT por visitas, las PA medias y grado de control de la HTA.

Resultados

Concluyeron 209 individuos (edad media 69,28±11,6 años) (p=NS por grupos) (GI 107 individuos y GC 102).

La IT fue 35,64% de las visitas de la muestra (IC=29,85-41,43%) y en el 71,63% (IC=63,9-79,36%) en hipertensos no controlados.

La IT fue del 22,42% (IC=24,2-37%) en el GI y 50% (IC=37,75-62,25) en el GC (p < 0,05) en visita 2, y del 25,23% (IC=14,84-35,62) y 46,07% (IC=33,85-58,29) en visita final para GI y GC respectivamente (p<0,05).

Conclusiones

La IT ha sido muy relevante. El programa de AMPA es eficaz para obtener una menor IT.

Palabras clave:
Hipertensión arterial
Inercia terapéutica
Ensayo clínico
Automedida domiciliaria de la presión arterial
Abstract
Objective

To evaluate the efficacy of a program of home blood pressure monitoring (HBPM) on therapeutic Inertia (TI) in mild-to-moderate hypertension (AHT).

Design

Controlled, randomised clinical trial.

Setting

Forty six clinics in 35 primary care centres. Spain.

Participants

A total of 232 patients with uncontrolled hypertension were included.

Intervention

Two groups with 116 patients were formed: 1) Control group (CG): standard health intervention; 2) Intervention group (IG): patients who were included in the HBPM program.

Main measurements

TI was calculated by the ratio: Number of patients whose pharmacological treatment was not changed in each visit/Number of patients with an average BP 140mmHg and/or 90mmHg in the general population or 130 and/or 90 mmHg in diabetics. The mean BPs and the percentage of controlled patients were calculated. The mean number of people that required an intervention in order to avoid TI was calculated (NI).

Results

A total of 209 patients completed the study, with TI in 35.64% (95% CI=29.85%-41.43%) of the sample, and in 71.63% (95% CI=63.9-79.36%) of the uncontrolled hypertensive patients.

The TI was 22.42% (95% CI=24.2-37%) in the IG and 50% (95% CI=37.75-62.25) in the CG (p<.05) in visit 2, and 25.23% (95% CI=14.84-35.62) and 46.07% (95% CI=33.85-58.29) in the final visit for IG and CG, respectively (P<.05). The NI was 4.3.

Conclusions

TI was very significant among the uncontrolled hypertensive patients. The studied interventions are effective for improving TI.

Keywords:
Hypertension
Therapeutic inertia
Clinical trial
Home blood pressure monitoring
Texto completo
Introducción

La Inercia terapéutica (IT) es un grave problema que afecta a toda la Sanidad en general, y de difícil solución, ya que se precisa una mayor formación de los profesionales y su mayor concienciación en la aplicación de las guías y consensos en hipertensión arterial (HTA)1, pero hace falta sobre todo incentivación y disponibilidad de tiempo en el manejo de sus consultas. La presencia de IT se asocia a un desfavorable control de la HTA2.

La IT se define como los fallos por parte del médico o enfermera, en el inicio o mantenimiento del tratamiento de una enfermedad o factor de riesgo cuando realmente está indicado, a pesar de saber que, siguiendo los protocolos y guías de actuación, es necesario hacerlo3–5.

La magnitud de la IT observada en el tratamiento de la HTA en España en estudios transversales se sitúa entre el 51 y el 85%6,7 de los hipertensos no controlados, y en estudios longitudinales entre el 34,4 y el 82%2,8,9.

Existen escasas evidencias sobre qué estrategias son eficaces para disminuir la IT. La automedida domiciliaria de la presión arterial (AMPA) ha demostrado su eficacia en el control de la HTA10-12, en la mejora del cumplimiento13 y como estrategia mixta con otras intervenciones en la disminución de la IT8. La AMPA es una técnica innovadora de creciente uso por parte de los profesionales y de los propios hipertensos, por lo cual es necesario conocer si, como estrategia aislada, disminuye la IT.

Nuestro objetivo fue evaluar si un programa de AMPA es eficaz para obtener una menor IT en el tratamiento de la HTA.

Material y métodosDiseño

Se realizó un ensayo controlado, aleatorio, abierto, multicéntrico, en el que se incluyeron 232 pacientes diagnosticados de HTA (ESH-ESC 2007)14, con participación de 46 investigadores de 35 centros de salud, seleccionados mediante un muestreo probabilístico proporcional en función del número de médicos de atención primaria de Sevilla, Cádiz, Huelva y Badajoz, con inclusión de 5 pacientes cada uno.

Población de estudio

Para el cálculo del tamaño de la muestra15 se consideró como valor clínico una diferencia del 20% de IT, asumiendo una prevalencia de IT de un 80% en el grupo de control. Utilizando un valor alfa de 0,01, una potencia del 80%, y unas pérdidas esperadas del 10%, se determinó que eran necesarios 116 individuos en cada uno de los grupos. La muestra final fue de 232 sujetos. El período de selección fue de 4 meses (enero a mayo de 2009), con un seguimiento de 6 meses para cada paciente.

Los criterios de inclusión fueron los siguientes: 1) pacientes entre 18 y 80 años; 2) hipertensos diagnosticados y en tratamiento farmacológico con un fármaco antihipertensivo al menos 3 meses antes a su inclusión; 3) no controlados (cifras de presión arterial ≥ 140 y/o 90 mmHg), en los cuales el investigador prescribió, según su criterio clínico, un único comprimido diario, y 4) que otorgaron su consentimiento.

Los criterios de exclusión fueron: 1) HTA secundaria; 2) mujeres embarazadas o lactantes; 3) pacientes participantes en otros estudios de investigación; 4) pacientes que tengan un conviviente tomando el mismo antihipertensivo, y 5) pacientes cuya situación patológica pueda interferir con el desarrollo del estudio.

Asignación aleatoria

La asignación fue aleatoria y estratificada por edad y sexo, y se realizó de forma centralizada, ciega para el investigador, utilizando una tabla de números aleatorios, antes de los 10 días tras la inclusión (CRO Medinautic Investigación S.L., Huelva).

Los 116 pacientes incluidos en el grupo control (GC) recibieron la intervención habitual.

Los 116 pacientes del grupo intervención (GI) se incluyeron en un programa de AMPA centralizado con envío al domicilio del material necesario. Los pacientes recibieron un monitor automático OMRON M4 validado que mide la presión arterial oscilométricamente en el brazo, un manual, un resumen de funcionamiento y una tarjeta de recomendaciones para medición de la presión arterial (PA), dónde anotó sus mediciones. El programa de AMPA consistía en la medición de su PA 3 días a la semana (martes, jueves y sábados), en 2 ocasiones cada vez con intervalo de un minuto, dos veces antes del desayuno (8.00-10.00h) y 2 antes de la cena (20.00-22.00h), las cuales debían anotar en la hoja de mediciones, siendo evaluadas en cada visita.

Seguimiento y plan de trabajo

Se efectuaron 3 visitas, la visita de inclusión, a los 3 y 6 meses.

En la visita de inclusión se confirmaron los criterios de selección, se informó oralmente y por escrito al paciente y se obtuvo su consentimiento informado. Se realizó la historia clínica, y se determinó el peso, la talla y la PA en 2 ocasiones.

En la segunda visita se determinó el peso y la PA, en 2 ocasiones. En el caso de no control de la HTA, los médicos modificaron o no el tratamiento farmacológico a su criterio, y se prescribió hasta la visita final, que tuvo lugar a los 6 meses con contenidos similares a la segunda visita.

Los criterios de retirada fueron: 1) incumplimiento del tratamiento farmacológico superior al 20% mensual; 2) el paciente decide no continuar en el estudio o incumple con el seguimiento, y 3) el investigador consideró que la salud del paciente se ve comprometida tras la inclusión del mismo.

Mediciones principales

La PA clínica se registró mediante los esfigmógrafos siguiéndose las recomendaciones de la ESH-ESC 200714. Las medidas antropométricas (peso y talla) se tomaron descalzos y con ropa ligera, utilizándose un tallímetro y una báscula con precisión de 100g.

Las variables analizadas fueron: 1) número total de individuos, retiradas y sus causas; 2) edad y sexo; 3) número de enfermedades padecidas y fármacos consumidos; 4) reacciones adversas; 5) PA media clínica (PAS y PAD) con su desviación estándar (de) y descenso medio; 6) IT calculada por visitas en hipertensos no controlados (Número de hipertensos no controlados a los que no se les ha modificado el tratamiento farmacológico / Número de pacientes con cifras medias de PA ≥ 140 mmHg y/o ≥ 90 mmHg en población general o ≥ 130 y/o 80 mmHg en caso de diabetes mellitus, multiplicado por 100) y en la muestra general (incluyendo ésta en el denominador); 7) control de la HTA (cifras de PAS y PAD medias en la última medición<140 y 90 mmHg respectivamente y<130 y/o 80 mmHg en caso de diabetes mellitus) global, por grupos de intervención y en el grupo de pacientes no controlados en la segunda visita en función de la IT; 8) reducción del riesgo relativo absoluto (RRA=diferencia entre el porcentaje de incumplidores entre ambos grupos), la reducción del riesgo relativo (RRR=RRA dividido por el porcentaje de incumplidores en el GC) y el número de pacientes que se necesita tratar para evitar un incumplimiento (NNT=1/RRA), y 9) causas de no modificación del tratamiento farmacológico.

Análisis estadístico

La comparabilidad de los grupos se valoró al inicio del estudio. Se utilizó la base de datos Paradox 3.5 y el paquete informático estadístico SPSS 11.5 para Windows. Los datos se trataron en el departamento estadístico de Medianutic Investigación S.L. Se utilizaron los test de la ji cuadrado, t de Student y Mc Nemar para la comparación de variables cualitativas y cuantitativas para datos apareados y no apareados. Se consideró significativa una p<0,05. Se calcularon los intervalos de confianza (IC) al 95%.

Consideraciones éticas

El estudio fue aprobado por el comité de Investigación del Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva. Se obtuvo el consentimiento informado y se siguieron las Guías de Buena Práctica Clínica.

Resultados

Concluyeron el estudio 209 individuos (90,08%), con edad media global de 62,1 años (DE 11,6), sin diferencias entre grupos. 90 eran varones (43,1%) y 119 mujeres (56,9%) con edad media de 61,8 (DE 11,8) y 62,5 (DE 11,2) años respectivamente (p<0,05). Fueron retirados 23 pacientes, 3 por deseo del paciente, 10 por incumplimiento del seguimiento y 13 por falta de datos.

No estaban controlados de forma global el 45,9% (IC 99%=±8,5) de la muestra en la visita 1 (n=96) y el 53,6% (IC 99%=±8,5) en visita final (n=112).

La IT se produjo en el 35,6% de las visitas del total de la muestra (IC=29,8-41,4%) (n=149) y en el 71,6% (IC=63,9-79,4%) de las visitas de hipertensos no controlados. La IT estuvo presente en el 49,3% del total de los pacientes en alguna de las 2 visitas (IC=40,7-57,8%) (N=103) y en el 92,0% de los hipertensos no controlados (IC=85,7-98,3%).

Fueron evaluables 107 individuos del GI y 102 del GC (tabla 1). La IT fue del 22,4% en el GI y del 50% en el GC en la visita 2, y del 25,2 y 46,1% en la visita final respectivamente (p<0,05) (tabla 2). La IT fue inferior entre los hipertensos no controlados en el GI.

Tabla 1.

Comparabilidad inicial de los grupos

  Grupo intervención N=107  Grupo control N=102 
Edad (años)  62,5 (DE: 11,8)  61,8 (DE: 12)  NS 
Sexo (varones)  44,9%  41,2%  NS 
Número de enfermedades  2,9 (DE:1,3)  2,7 (DE: 1,4)  NS 
Número de fármacos consumidos  3,1 (DE: 1.3)  2,9 (DE: 1.3)  NS 
Índice de Quetelet inicial  29,8 (DE: 5,1)  30,2 (DE: 5)  NS 
Dislipidemia  51,4%  40,2%  NS 
Diabetes  32,7%  29,4%  NS 
Antecedente de enfermedad vascular prematura.  7,5%  5,9%  NS 
Tabaquismo  12,1%  15,7%  NS 
Obesidad  40,6%  46,5%  NS 
Edad como factor de riesgo vasculara  78,5%  70,6%  Ns 
a

Varones>55 años; mujeres>45 años.

Tabla 2.

Comparación del porcentaje de hipertensos no controlados e inercia terapéutica de ambos grupos

  Grupo intervención N=107  Grupo control N=102 
Visita 2
Hipertensos no controlados  34,6%  57,8%  0,0001 
IT muestra global  22,4% (IC: 24,2-37,0%)  50,0% (IC: 37,7-62,2%)  0,002 
IT hipertensos no controlados  64,9%  86,4%  NS 
Visita final
Hipertensos no controlados  34,6%  58,8%  0,001 
IT muestra global  25,2% (IC: 14,8-35,6%)  46,1% (IC: 33,8-58,3%)  0,001 
IT hipertensos no controlados  61,4%  69,1%  NS 

Las PA medias y grado de control de la HTA se presentan en las tablas 3 y 4. Se observaron diferencias significativas entre ambos grupos, con mayores descensos y mejor control en el de intervención. La RRA fue del 24,2%, la RRR del 50,4% y el NNT de 4,3 pacientes.

Tabla 3.

Evolución de la presión arterial sistólica (PAS) y diastólica (PAD) en cada uno de los grupos

    Grupo intervención N=107  Grupo control N=102 
PAS  Visita inicial  157,8 (DE: 16,1)  154,9 (DE: 11,3)  NS 
  Visita 2  138,7 (DE: 9,4)  143,2 (DE: 12,7)  0,026 
  Visita final  134,4 (DE: 8,8)  138,5 (DE: 9,3)  0,016 
  Descenso medio (inicial-final)  23,3 (DE: 17)a  16,4 (DE: 13,6)a  0,002 
PAD  Visita inicial  90,1 (DE: 10)  88,1 (DE: 10,3)  NS 
  Visita 2  79,5 (DE: 6,8)  82,9 (DE: 9,1)  0,003 
  Visita final  78,7 (DE: 7,2)  81,3 (DE: 7,8)  0,017 
  Descenso medio (inicial-final)  11,3 (DE: 10,3) (*)  6,8 (DE: 10) (*)  0,002 
a

Diferencia estadísticamente significativa entre la visita 2 y la visita final.

Tabla 4.

Comparación del grado de control de la hipertensión arteriala en los grupos de estudio

  Global N=209  Grupo intervención N=107  Grupo control N=102 
Visita 2  54,1%  58,9%  32,3%  0,0001 
Visita final  46,4%  65,4%  41,2%  0,001 
a

<140/90 mmHg en población general y<130/80 mmHg en diabéticos.

En la tabla 5 se presentan las PA medias de los pacientes no controlados en la visita 2, observándose un mayor descenso en la visita final en el grupo sin IT. El porcentaje de pacientes controlados fue del 85,7% (IC=66,0-100%) en el grupo sin IT y del 20% (IC=8,1-31,9%) en el grupo con IT (p<0,05).

Tabla 5.

Evolución de la presión arterial sistólica (PAS) y diastólica (PAD) en los pacientes no controlados en la visita 2 en función de la existencia o no de inercia terapéutica

    Sin IT (n=21)  Con IT (n=75) 
PAS  Visita 2  151,6 (DE: 12,4)  144,3 (DE: 8,4)  0,0001 
  Visita final  139,6 (DE:11,1)  139,2 (DE: 8,2)  NS 
  Descenso medio (visita 2-final)  11,9 (DE: 10,4)a  5,1 (DE: 7,5)a  0,001 
PAD  Visita 2  84,7 (DE: 10,4)  82,9 (DE: 7,7)  NS 
  Visita final  79,9 (DE: 8,7)  81,1 (DE: 8,3)  NS 
  Descenso medio (visita 2-final)  4,7 (DE:7,4)a  1,8 (DE: 4,1) (*)  0,01 
a

Diferencia estadísticamente significativa entre la visita 2 y la visita final.

En la tabla 6 se presentan las causas que aducen los médicos para no modificar el tratamiento en los hipertensos no controlados.

Tabla 6.

Causas que justifican la inercia terapéutica en cada visita

  Visita 1 N=75  Visita final N=74 
Paciente controlado, no precisa cambios  16%  6,7% 
Incumple tratamiento higienicodietético  22,7%  24,3% 
Incumplimiento farmacológico 
Padece un fenómeno de bata blanca  53,3%  54,1% 
Las cifras son poco altas, no precisa cambios  8%  9,5% 
Lo cito para nuevo control, antes de cambiar  5,4% 
Otras causas 
Discusión

La IT observada en este estudio ha sido muy relevante (35,6% de las visitas y 71,6% de las de hipertensos no controlados). Estuvo presente en el 49,3% de los pacientes en alguna de las 2 visitas y afectó a casi todos los hipertensos no controlados (92%). La IT fue significativamente inferior en el grupo de AMPA, afectando a casi un cuarto de los pacientes, respecto al grupo de control, en que afectó a la mitad de los pacientes. Estos resultados demuestran la eficacia de un programa de AMPA en la obtención de una menor IT.

Nuestros hallazgos son coincidentes con los observados en España en otros estudios longitudinales: 40,4% en el estudio CUMAMPA2, 36,8% de la muestra y 82,6% de los hipertensos no controlados en el estudio EFEDIS8, en el 35,3% y 75,2% respectivamente en el estudio ECCON9, y en el 60 y 95,3% respectivamente en el estudio Persisdiur. A nivel internacional, los datos son similares a los de nuestro estudio16, con un 87%.

El estudio EFEDIS8 investigó la eficacia de diferentes estrategias en la disminución de la IT, utilizando como estrategia base un programa de AMPA al que se le añadía una intervención educativa postal, una tarjeta autoevaluadora del cumplimiento y un tercer grupo con una intervención mixta, encontrando IT en el 60% del grupo control y en el 38,4, 30,2 y 14,7% en las 3 estrategias, respectivamente.

Los descensos de la PA fueron significativos en ambos grupos, pero de mayor magnitud en el GI. Por consiguiente, la intervención disminuye la IT y, de forma pareja, mejora el control de la HTA. En el estudio EFEDIS8 el control fue del 35,3, 54.7, 60,2 y 65,1% (p<0,01) para los grupos control, educación, tarjeta e intervención mixta respectivamente, mientras que en estudios transversales como el estudio Prescap en España el control fue del 41,4%17.

Entre los pacientes hipertensos no controlados en la visita 2, se observó un mayor descenso en la visita final en el grupo sin IT, así como una diferencia en el porcentaje de pacientes controlados que confirma la asociación entre falta de control e IT.

El NNT observado demuestra que es necesario tratar a 4,3 pacientes con un programa de AMPA para evitar un caso de IT, por lo cual el esfuerzo a realizar es pequeño. En el estudio Efedis8 se demostró como un programa de AMPA asociado a otras estrategias presentaba una eficacia de relevancia clínica, con valores de NNT de 4,6, 3,3 y 2,2 cuando se asociaba a una intervención educacional escrita, intervención mediante una tarjeta o una estrategia mixta de las 3 intervenciones. Con todo ello, se deduce que el programa de AMPA aislado obtiene resultados similares a estrategias más complejas.

Entre las causas aducidas para no modificar el tratamiento en los hipertensos no controlados, destacan, por una parte el fenómeno de bata blanca y, por otra, el incumplimiento de las medidas higienicodietéticas. Curiosamente, el incumplimiento del tratamiento farmacológico no fue aducido en ningún caso. Una vez más, se observa la fragilidad de estas causas como motivo para no modificar el tratamiento antihipertensivo1,3,5,9.

En nuestra opinión la clave de esta intervención afecta tanto al paciente como al profesional. El programa autoimplica al paciente en su control y mejora el cumplimiento, ya que es sabedor de las cifras objetivo de PA a conseguir. Al profesional le afecta de 2 formas, por una parte, el paciente le aporta múltiples medidas domiciliarias de la PA y evita citaciones para control, y, por otra, el paciente acude indicándole que su PA está mal controlada, sabe cuáles son sus objetivos de PA y qué PA presenta en las últimas semanas, que se lo da por escrito y que debe hacer algo para controlarle, haciéndole un «chantaje emocional» para que actúe. Estos son motivos suficientes para que el profesional intervenga terapéuticamente.

La estrategia estudiada ha demostrado su relevancia clínica en este estudio, ya que mejora el control10-12,18-20, el cumplimiento13,21 y los costes en salud18,21,22. En la práctica es de fácil aplicación y más de un 50% de los hipertensos tienen un monitor en su domicilio para AMPA11. Por ello, se debe inscribir a los hipertensos en un programa de AMPA, sobre todo a aquellos que posean un monitor, y a los hipertensos no controlados7. Nuestros hallazgos representan a la mayoría de hipertensos atendidos en atención primaria, ya que se ha alcanzado una muestra final adecuada, mediante muestreo consecutivo de hipertensos que asisten a consulta a demanda, con investigadores de diferentes zonas y provincias. Han sido escasos los pacientes no evaluables y un análisis de ellos presentaron características iniciales similares a los evaluados. Entre los posibles sesgos, se encuentran la posible mejoría del cumplimiento7,12 y el efecto Hawthorne, que han podido influir en un mejor control de la HTA y en una menor IT, aunque afecte a los 2 grupos de forma similar. La metodología usada para el cálculo de la IT está basada en la bibliografía2,8,9 y en la lógica, pero probablemente incluya casos de inercia justificada.

Como línea futura de investigación se recomiendan estudios que analicen como obtener un efecto aditivo en el control de la HTA al que consigue un programa de AMPA, mediante estrategias de comunicación de sus resultados a los profesionales23,24.

Lo conocido sobre el tema

  • La IT es considerada junto al incumplimiento del tratamiento farmacológico como las 2 causas principales de la falta de control de la HTA.

  • La magnitud de la IT observada en el tratamiento de la HTA en España en estudios longitudinales oscila entre el 34,4 y el 95,35%.

  • La AMPA ha demostrado su eficacia en el control de la HTA, en la mejora del cumplimiento y como estrategia mixta con otras intervenciones en la disminución de la IT. Se desconoce su eficacia como estrategia aislada.

Qué aporta este estudio

  • La IT ha sido muy elevada. Se produjo en el 35,64% de las visitas del total de la muestra y en el 71,63% de las visitas de hipertensos no controlados.

  • La intervención mediante un programa de automedición domiciliaria de la presión arterial es una intervención eficaz como estrategia aislada para obtener una menor inercia terapéutica en el tratamiento de la HTA.

  • La magnitud de la relevancia clínica de las intervenciones estudiadas fue importante al observarse que es necesario tratar a 4,3 (NNT) para evitar un caso de IT.

Conflicto de intereses

Los autores declaran no tener conflicto de intereses. No ha existido ningún conflicto de intereses.

Financiación

Este estudio ha tenido una beca de financiación a proyectos de investigación de Laboratorios Esteve.

Anexo 1
Grupo de Trabajo sobre Cumplimiento de la Asociación de la Sociedad española de Hipertensión Arterial y Liga Española para la Lucha contra la Hipertensión Arterial (SEH-LELHA)

J.J. Casado Martínez, R. Chaves González, J. Ferraro García, F. Atienza Martín, A. Padilla Martínez, M.García García, J.L. Hinojosa Gallardo, C. Font Guardiola, F. Manzano Gómez, M. Ferreiro Madueño, J. López García, B. Bajo Martínez, R. Calvillo Arriaza, A. Pérez Díaz, J. Espinosa Medina, E. Rodríguez Rodríguez, J. Sánchez-Pardo García, D. Domínguez Deben, J. López Jiménez, R. Masot Monserrat, E. Piñeito López, J.L. López Vázquez, M.A. Morcillo Astillero, A. Granero Gallardo, R. Mendoza Espejo, M. García Alvarez, J.E. Peña Gallego, F. Parralejo Cano, M.A. Ángel Martín, Mohamed Helvani, A. López Suárez, J. Elvira González, M. Carabias García, C. Gámez Fravendorff e I. García Infante.

Bibliografía
[1]
E.C. Okonofua, K.N. Simpson, A. Jesri, S.U. Rehman, V.L. Durkalski, B.M. Egan.
Therapeutic inertia is an impediment to achieving the Healthy People 2010. Blood pressure control goals.
Hypertension, 47 (2006), pp. 345-351
[2]
E. Márquez Contreras, J.L. Martín de Pablos, V. Gil Guillén, N. Martell Claros, J. Motero Carrasco, J.J. Casado Martínez.
La inercia clínica profesional y el incumplimiento farmacológico. ¿Cómo influyen en el control de la HTA? Estudio Cumampa.
Hipertensión, 25 (2008), pp. 187-193
[3]
L.S. Phillips, W.T. Branch, C.B. Cook, J.P. Doyle, I.M. El-Kebbi, D.L. Gallina, et al.
Clinical inertia.
Ann Intern Med, 135 (2001), pp. 825-834
[4]
C. Faria, M. Wenzel, K.W. Lee, K. Coderre, J. Nichols, D.A. Belletti.
A narrative review of clinical inertia:focus on hypertension.
J Am Soc Hypertens, 3 (2009), pp. 267-276
[5]
M. De la Figuera Von Wichmann.
Inercia terapéutica.
Sanidad y Ediciones S.L, (2008),
[6]
J.R. Banegas, J. Segura, L.M. Ruilope, M. Luque, R. García-Robles, C. Campo, et al.
Blood pressure control and physician management of hypertension in hospital hypertension units in Spain.
Hypertension, 43 (2004), pp. 1338-1344
[7]
L. Roa, M. Monreal, J.A. Carmona, E. Aguilar, R. Coll, C. Suárez, en representación del Grupo FRENA.
Treatment inertia in secondary prevention of cardiovascular disease. FRENA registry.
Med Clin (Barc), 134 (2010), pp. 57-63
[8]
E. Márquez Contreras, N. Martel Claros, V. Gil Guillén, J.L. Martín de Pablos, M. De La Figuera Von Wichman, J.J. Casado Martínez, J. Espinosa García.
El control de la inercia terapéutica en el tratamiento de la hipertensión arterial mediante diferentes estrategias.
Aten Primaria, 41 (2009), pp. 315-323
[9]
M.A. Garrido, E. Márquez Contreras.
El autocontrol del paciente como estrategia para disminuir la inercia terapéutica.
Estudio ECCON Riesgo Vascular, 4 (2008), pp. 17
[10]
K. Zarnke, B. Feagan, L. Mahon, R. Feldman.
A randomized study comparing a patient-direct hypertension management strategy with usual office-based care.
Am J Hypertens, 10 (1997), pp. 58-67
[11]
H.L.R. Vesalainen, M. Kaaja, I. Kantola.
Self-monitoring of blood pressure promotes achievement of blood pressure target in primary health care.
Am J Hypertens, 18 (2005), pp. 1415-1420
[12]
J.A. Staessen, E. Den Hond, H. Celis, R. Fagard, L. Keary, G. Vandenhoven, et al.
Antihypertensive treatment, based on blood pressure measurement at home or in the physician's office: a randomized controlled trial.
JAMA, 291 (2004), pp. 955-964
[13]
E. Márquez-Contreras, N. Martell-Claros, V. Gil-Guillén, M. de la Figuera-Von Wichmann, J.J. Casado-Martínez, J.L. Martin de Pablos, et al.
Efficacy of a home blood pressure monitoring programme on therapeutic compliance in hypertension:the EAPACUM–HTA study.
J Hypertens, 24 (2006), pp. 169-175
[14]
2007 Guidelines for the Management of Arterial Hipertension of the European Society of Hipertensión (ESH) and of the European Society of Cardiology (ESC). European Heart Journal. 2007; 9 Suppl C:C3–74.
[15]
V.F. Gil Guillén, D. Orozco Beltrán, F. Quirce Andrés, J. Merino Sánchez.
Aplicación práctica de la estadística.
En: Tratado de epidemiología clínica. II Departamento de Medicina y Psiquiatría, Cyma Duphont-Pharma, (1995),
[16]
P. Ferrari.
Reasons for therapeutic inertia when managing hypertension in clinical practice in non-Western countries.
J Hum Hypertens, 23 (2009), pp. 151-159
[17]
J.L. Llisterri Caro, G.C. Rodríguez Roca, F.J. Alonso Moreno, J.A. Santos Rodríguez, J.A. Divison Garrote, S. Lou Arnal, et al.
Evolución del control de la presión arterial en España en el período, 2002–2006.
Hipertensión, 24 (supl 2) (2007), pp. S9
[18]
T.G. Pickering.
Home blood pressure monitoring:a new standard method for monitoring hypertension control in treated patients.
Nat Clin Pract Cardiovasc Med, 5 (2008), pp. 762-763
[19]
J. Kim, H.R. Han, H. Song, J. Lee, K.B. Kim, M.T. Kim.
Compliance with home blood pressure monitoring among middle-aged Korean Americans with hypertension.
J Clin Hypertens (Greenwich), 12 (2010), pp. 253-260
[20]
T.G. Pickering, W.B. White, T.D. Giles, H.R. Black, J.L. Izzo, B.J. Materson, et al.
When and how to use self (home) and ambulatory blood pressure monitoring.
J Am Soc Hypertens, 4 (2010), pp. 56-61
[21]
S. Mallick, R. Kanthety, M. Rahman.
Home blood pressure monitoring in clinical practice:a review.
Am J Med, 122 (2009), pp. 803-810
[22]
S.D. Reed, Y. Li, E.Z. Oddone, A.M. Neary, M.M. Orr, J.M. Grubber, et al.
Economic evaluation of home blood pressure monitoring with or without telephonic behavioral self-management in patients with hypertension.
Am J Hypertens, 23 (2010), pp. 142-148
[23]
B.B. Green, A.J. Cook, J.D. Ralston, P.A. Fishman, S.L. Catz, J. Carlson, et al.
Effectiveness of home blood pressure monitoring, Web communication, and pharmacist care on hypertension control:a randomized controlled trial.
JAMA, 299 (2008), pp. 2857-2867
[24]
J. Varis, I. Kantola.
The choice of home blood pressure result reporting method is essential: Results mailed to physicians did not improve hypertension control compared with ordinary office-based blood pressure treatment.
Blood Press, 19 (2010), pp. 319-324

Los componentes del grupo están relacionados en el anexo al final del artículo.

El estudio ha sido presentado como comunicación oral en la XIX Reunión Nacional de la Sociedad Española de Hipertensión (SEH-LELHA), celebrada en Zaragoza en marzo de 2010.

Copyright © 2010. Elsevier España, S.L.. Todos los derechos reservados
Descargar PDF
Opciones de artículo
es en pt

¿Es usted profesional sanitario apto para prescribir o dispensar medicamentos?

Are you a health professional able to prescribe or dispense drugs?

Você é um profissional de saúde habilitado a prescrever ou dispensar medicamentos