Identificar los factores familiares asociados a la presencia de codependencia en las enfermeras de un hospital regional en Cancún, Quintana Roo, México.
DiseñoEstudio transversal, comparativo.
EmplazamientoCiudad de Cancún (México).
ParticipantesMediante un muestreo aleatorizado se seleccionaron 200enfermeras que cumplieron los criterios de selección (tener pareja de más de un año, acudir a trabajar el día de la entrevista, tener contrato laboral al momento del estudio y ser adscrita al hospital). Previo consentimiento informado, se aplicaron 3cuestionarios en los diferentes turnos de trabajo.
Mediciones principalesEdad, nivel de estudios, nivel socioeconómico, tipo de estructura familiar, etapa de ciclo vital, codependencia y funcionalidad familiar.
ResultadosSe evaluaron 200enfermeras. La edad promedio fue de 36±8años, el nivel socioeconómico predominante fue alto (48%), y el 47,5% de ellas tienen estudios universitarios superiores. Se encontró un nivel de codependencia del 20,5% (IC95%: 15,0-26,5). Los factores familiares que se asociaron a la presencia de codependencia fueron; disfunción familiar, razón de prevalencia (RP)=9,62 (IC95%: 3,47-27,3), etapa de independencia, RP=3,41 (IC95%: 1,44-7,86), familia monoparental, RP=6,35 (IC95%: 2,41-16,68), tiempo con su pareja menor de 5años, RP=3,41 (IC95%: 1,54-7,85).
ConclusionesSe encontró que la disfunción familiar y la familia monoparental fueron los factores familiares que más se asociaron a la presencia de codependencia en las enfermeras de un hospital; por lo tanto, al poder identificar estos factores, nosotros como médicos familiares podremos mejorar su dinámica y funcionalidad a través de nuestro estudio familiar, facilitando una comunicación eficaz con el personal de enfermería y sus familias.
Identifying family factors associated with the presence of co-dependency in nurses of a regional hospital in Cancún, Quintana Roo, Mexico.
DesignCross-sectional, comparative study.
LocationCity of Cancun (México).
ParticipantsA random sample of 200nurses who met the inclusion criteria (having a partner for over a year, to be at work on the day of the interview), and who gave informed consent, completed three questionnaires during different shifts.
Main measurementsAge, educational level, socioeconomic status, type of family structure, life cycle stage, co-dependency and family functioning.
ResultsA total of 200nurses, with mean age of 36±8years, took part. The most common socioeconomic status was high (48%), and 47.5% had graduate studies. A co-dependency level of 20.5% (95%CI: 15-26.5) was found. Family factors associated with the presence of co-dependency were; family dysfunction, prevalence ratio (PR)=9.62 (95%CI: 3.47-27.3), stage of independence, PR=3.41 (95%CI: 1.44-7.86), single parent, PR=6.35 (95%CI: 2.41-16.68), and time with partner less than 5 years, PR=3.41 (95%CI: 1.54-7.85).
ConclusionsIt was found that family dysfunction and being a single parent were significantly associated with co-dependency in hospital nurses, therefore, on being able to identify these factors, family physicians can improve their dynamics and functioning by family study, and improving effective communication with nursing staff and their families.
La literatura reciente estima que hay un número significativo de enfermeras que pueden llegar a presentar signos de codependencia caracterizada como un patrón de comportamiento que impide a una persona la capacidad de relacionarse con los demás1. La codependencia en enfermeras afecta tanto la atención directa del paciente como las relaciones con los compañeros de trabajo, médicos, supervisores. Existe evidencia de que las conductas codependientes tienen un impacto negativo en la funcionalidad organizacional de las enfermeras2.
Hasta 1979 el término «codependencia» se utilizó para referirse a las personas que habían desarrollado disfuncionalidad tras vivir con alcohólicos3. Posteriormente, en la década de los ochenta, el término «codependiente» fue estudiado desde las siguientes perspectivas teóricas: un trastorno de la personalidad, un conjunto de rasgos de personalidad en común desarrollados por los hijos adultos de alcohólicos, o un patrón de relación disfuncional basado en conductas específicas4-7.
Las variables codependencia y afecto como características relacionadas con las enfermeras comenzaron a estudiarse en la década de los noventa8; algunos autores de diversas partes del mundo comenzaron estudios en enfermeros de ambos sexos sin encontrar diferencias significativas9, y otros estudios contemporáneos hacen alusión a características exclusivas del género femenino. Dichos estudios originaron el término «cuidar mucho a costa de sí mismas» o «cuidadoras» para las enfermeras, resaltando la característica de preocuparse demasiado8,10,11, observándose un nivel de riesgo elevado en el personal de enfermería a sufrir dicho síndrome12. Con este antecedente se pudieron identificar las características, las funciones y los factores de riesgo para la codependencia como un comportamiento caracterizado por personas muy responsables6, trabajando duro, haciendo muchas cosas para varias personas, tratando de organizar o controlar la vida de otros a su alrededor13; así mismo se observó el acompañamiento con patrones afectivos perturbadores, como depresión14-16, baja autoestima, temor al abandono, déficit en la toma de decisiones, incapacidad de autocrítica, descontrol de impulsos y sentimiento de culpa, entre otros1,15,17,18.
Actualmente podemos definir la codependencia como un problema de relación con la pareja, caracterizado por frecuentes estados de insatisfacción y sufrimiento personal, donde la mujer se encuentra enfocada en atender las necesidades personales de su pareja y/o de otras personas dependientes (hijos, hermanos) sin tomar en cuenta las propias. Este estado de dependencia puede afectar a otros miembros del núcleo familiar, principalmente hijos adolescentes7,19.
Estos cambios en el comportamiento de la persona codependiente crea comportamientos compulsivos que hacen la vida dolorosa y el trabajar emocionalmente difícil1,7,20,21, estableciendo un ambiente familiar enrarecido que por definición, al no cumplir cada quien los roles establecidos, se conforman en una familia disfuncional22,23. Esta es una condición compleja que requiere modificaciones estructurales y adaptativas respecto a valores sociales, aspectos económicos, sexuales, religiosos, etcétera, y que afecta principalmente a familias con nivel sociocultural bajo24,25.
En México, los factores familiares como funcionalidad, etapa del ciclo vital y tipo de familia, asociados a codependencia en enfermeras, no han sido suficientemente estudiados, y la ausencia de datos que relacionen ambos fenómenos nos motivó a realizar este estudio. El objetivo principal fue identificar los factores familiares asociados a la presencia de codependencia en enfermeras de un hospital regional.
Material y métodosParticipantesSe llevó a cabo un estudio transversal comparativo en una muestra aleatoria por estratos de 200enfermeras de un hospital regional que cumplieron los criterios de selección (tener pareja de más de un año, acudir a trabajar el día de la entrevista, tener contrato laboral al momento del estudio y ser adscritas al hospital regional). Previa firma del consentimiento informado se abordó al personal por turno y sus diferentes áreas de trabajo, iniciando por el turno matutino encuestando a 84enfermeras (40,20%); turno vespertino de 70enfermeras (35,68%); turno nocturno, el cual se dividió en 2: el A (las que trabajaban lunes, miércoles y viernes), encuestando a 24enfermeras (12,17%), y las del turno nocturnoB (martes, jueves y sábado), encuestando a 22enfermeras (11,96%). Todas ellas recibieron asesoría respecto a la cumplimentación de la encuesta, y al término se les explicó lo que es la codependencia. Dicha asesoría y la aplicación del instrumento se realizaron en un área privada del mismo hospital, procurado siempre la confidencialidad del participante.
VariablesSe aplicaron 3instrumentos: una encuesta familiar y sociodemográfica dividida en 3secciones, la primera conteniendo las variables demográficas y laborales como edad, estado civil, número de hijos, turno de trabajo, categoría contractual, grado de estudios; la segunda evaluó la condición socioeconómica, y para obtener esta variable se dividió el área urbana en 5clases socioeconómicas de acuerdo con el ingreso diario según el salario mínimo, quedando la clasificación como muy bajo (0-1,0 salario al día), bajo (1,1-2,0), medio (2,1-3,0), medio alto (3,1-4,0) y alto (4,1 en adelante)26, y finalmente una tercera parte que investigó la condición familiar, específicamente la etapa de ciclo vital según Geyman: tipo de familia en cuanto a su composición y el tiempo con su pareja.
Dentro de su estructura familiar, se puede dividir en nuclear (padre, madre e hijos), monoparental (padre o la madre y los hijos), extensa (familia nuclear más abuelos), extensa compuesta (familia nuclear más otros consanguíneos) o de carácter legal (tíos, primos, yernos o cuñados)25,27,28. El ciclo de vida familiar es un concepto ordenador para entender la evolución secuencial de las familias y las crisis transicionales que atraviesan en función del crecimiento y desarrollo de sus miembros27,29. Esto lo clasificamos, según Geyman, en: fase de matrimonio, que se inicia cuando 2personas se unen en matrimonio sea civil, religioso o concubinato, concluyendo este ciclo con la llegada del primer hijo; fase de expansión, que se inicia con la llegada del primer hijo y se termina con el nacimiento del último; fase de dispersión, que se inicia con el ingreso de los hijos a la escuela y termina cuando el primer hijo empieza a vivir fuera de la casa; fase de independencia, que se inicia cuando el primer hijo abandona el hogar por cualquier causa, sea estudio, matrimonio, trabajo o simplemente por independizarse, y termina esta etapa cuando el último de los hijos (usualmente) se casa para formar nuevas familias a partir de la familia de origen y abandonan el hogar; y finalmente la fase de retiro y muerte, etapa que se inicia con la salida del último de los hijos del hogar familiar, o bien con la muerte o jubilación de alguno de los padres; esta etapa es la que se conoce también como «nido vacío»30,31.
El segundo instrumento utilizado fue el APGAR familiar diseñado por Smilkstein en 197822,24,32,33, como un instrumento de cribado25,34. Es una técnica rápida y sencilla que evalúa mediante 5reactivos: adaptación, participación, crecimiento, afecto y resolución de la familia35,36. Para el instrumento se propusieron 3 posibles respuestas (0, 1, 2) en cada parámetro, y al sumar se obtiene la siguiente puntuación: de 0-3 refleja una disfunción familiar grave; 4-6 puntos, disfunción familiar leve, y puntuaciones de 7-10, función familiar normal22,37. Por último, utilizamos el cuestionario de codependencia para mujeres mexicanas (ICOD)7,19, instrumento que fue construido para utilizarse como prueba de cribado, tratando de establecer un punto de corte para discriminar entre los probables casos y los no casos de codependencia, compuesta por 30reactivos con respuestas del rango 0 (nada) a 3 (mucho). Se determinó que el punto de corte fuera de >32, lo cual significa que un puntaje de 32 o más en el cuestionario puede ser considerado como probable caso de codependencia. El análisis estadístico se realizó mediante razones de probabilidad (RP) con sus respectivos IC al 95% para medir la asociación, con una p<0,05. Se usó el programa estadístico SPSS v.20.
ResultadosSe entrevistaron 200enfermeras que cumplieron los criterios de selección, teniendo todas las encuestas completas. Cuarenta y una de ellas fueron casos de codependencia, lo que representa una prevalencia porcentual del 20,5% (IC95%: 15,0-26,5).
Las características demográficas de los 2grupos fueron similares al momento del estudio. La media de edad del grupo con codependencia fue de 36±8años, el 48% de nuestra población tuvo un nivel socioeconómico alto y el 47,5%, un nivel de escolaridad en licenciatura (tabla 1).
Comparación de las características sociodemográficas de la muestra en sujetos con y sin codependencia
Variable | Con codependencia (n=41) | Sin codependencia (n=159) |
Edad | 36±8 | 33±7 |
Nivel socioeconómico | ||
Bajo | 1 (2,4%) | 6 (3,7%) |
Medio | 10 (24,3%) | 25 (15,75%) |
Medio alto | 14 (34,1) | 48 (30,1%) |
Alto | 16 (39,0%) | 80 (50,3%) |
Nivel de estudios | ||
Técnica | 18 (43,9%) | 48 (30,1%) |
Licenciatura | 15 (36,5%) | 80 (50,3%) |
Especialista | 6 (14,6%) | 28 (17,6%) |
Otra | 2 (4,8%) | 3 (1,8%) |
La comparación de las variables familiares se muestra en la tabla 2, donde se observaron diferencias estadísticamente significativas entre los grupos analizados.
Comparación de las variables familiares en las enfermeras con y sin codependencia
Variable | Con codependencia (n=41) | Sin codependencia (n=159) | p | RP | IC 95% |
Etapa de ciclo de vida | |||||
Independencia | 15 (7,5%) | 23 (11,5%) | 0,001 | 3,41 | 1,4-7,86 |
Otros | 26 (13%) | 136 (68%) | |||
Funcionalidad familiar | |||||
Disfuncional | 15 (7,5%) | 9 (4,5%) | 0,000 | 9,62 | 3,47-27,33 |
Funcional | 26 (13%) | 150 (75%) | |||
Tiempo con su pareja | |||||
<5años | 29 (14,5%) | 66 (33%) | 0,000 | 3,41 | 1,54-7,85 |
>5años | 12 (6%) | 93 (46,5%) | |||
Tipo de familia | |||||
Monoparental | 14 (7%) | 12 (6%) | 0,000 | 6,35 | 2,41-16,68 |
Otros | 27 (13,5%) | 147 (73,5%) |
Población: 200enfermeras.
χ2 de Mantel-Haenszel; p≥0,05.
Al analizar las asociaciones entre las variables, se observó que aquellos en etapa de independencia tuvieron 3veces mayor posibilidad de ser casos de codependencia con relación a las otras etapas del ciclo vital de familia. En lo relativo a codependencia y funcionalidad familiar, encontramos 9veces más probabilidades de presentar este fenómeno en los sujetos con disfuncionalidad familiar. La variable tiempo con su pareja reportó diferencias estadísticamente significativas (p=0,000), y los que han pasado menos de 5años con su pareja, aumentan más de 3veces la posibilidad de ser considerados probable caso de codependencia.
Al cotejar por tipo de familia se encontraron diferencias entre los grupos (p=0,000), y en aquellos con familia monoparental las posibilidades de ser probable caso de codependencia aumentan más de 6veces.
DiscusiónEste estudio evalúa la codependencia del personal de enfermería adscrito a un hospital citadino, cuya población es muy heterogénea, en donde se encontró un porcentaje de codependencia del 20,5%, proporción idéntica a la encontrada por Noriega et al.7 (25%), aunque dicho estudio se realizó con mujeres que acudieron a un centro de salud. Vargas37 encontró un 18,6% de las mujeres estudiadas, separándolas en mujeres que acudieron a un policlínico (11,9%) y en mujeres que acudían al grupo de alcohólicos anónimos (54,4%), sugiriendo que la convivencia con alcohólicos aumente el nivel de codependencia; Parker et al.38 estudiaron un grupo de estudiantes en enfermería, encontrando apenas un 4% de codependencia familiar. Según Crothers y Warren20 en su artículo publicado en 1996, existe una gran asociación entre las codependencia grave y factores maternos como control paterno excesivo y conductas coercitivas en la infancia, factores que serían importantes de estudiar entre mujeres con alto grado de codependencia; dentro del núcleo familiar el codependiente funciona como el «responsable» y el «bueno». Históricamente las enfermeras son y seguirán siendo «cuidadoras» en su práctica laboral; sin embargo, hay que saber diferenciar el término de cuidador y el riesgo alto de ser codependiente. Los sujetos estudiados tuvieron un nivel socioeconómico alto en el 47,5%, con nivel de escolaridad mínimo de técnico en enfermería; es decir, todas las enfermeras tienen el riesgo de ser codependientes. Como menciona Kowal12 en 1994, las enfermeras universitarias tienen en alto riesgo de ser codependientes, por la falta de autoridad, por la dificultad para decir no, por los compromisos excesivos y por la visión estereotipada de la enfermera como ayudante o cuidadora.
Al igual que lo encontrado por Noriega y Vargas en 2008 y 2009, respectivamente, la media de edad poblacional fue de 36±8años; el primero reportó un promedio de 31años7 y en el segundo se menciona una media de 37años37, y en ambos estudios se utilizó el ICOD para medir posibles casos de codependencia7,37. Así pues, esta media de edad se encuentra en la etapa del ciclo vital y ciclo de vida familiar más importante.
Se reportó como factores de riesgo familiar con significación estadística a las enfermeras que cursaban en la etapa de independencia del ciclo vital (RP=3,41); el tener menos de 5años con su pareja (RP=3,41) y el pertenecer a una familia monoparental (RP=6,35).
En relación a disfunción familiar, estudios realizados en mujeres bolivianas han reportado disfunción familiar principalmente en mujeres que acuden a grupos de ayuda para alcoholismo. Aplicando ICOD y APGAR familiar, se reportó una disfuncionalidad familiar en todas las mujeres codependientes de ambos grupos, siendo más severa en las que acudían al grupo de alcohólicos37. Es de esperarse que no todas tuvieran disfunción familiar, y en nuestro estudio encontramos un porcentaje de disfunción familiar del 7,5%, estableciendo como factor de riesgo para codependencia (RP=9,62; IC95%: 3,47-27,33; p=0,000).
En la literatura se mencionan otras líneas de investigación de la codependencia, como el estudio de estrés familiar (familiar con un alcohólico, padre con enfermedad mental o padre con enfermedad física), teniendo esta una tendencia más a desarrollar codependencia que la que no tiene este estrés familiar13. Antes se pensaba que solo las personas que abusaban del consumo de alcohol y de sustancias químicas (drogas) podían desarrollar codependencia, pero en la actualidad se sabe que cualquier persona puede desarrollar la codependencia con o sin estas características3,20,37. También se ha encontrado una fuerte relación entre el abuso psicológico y emocional relacionado a la codependencia39; nosotros estudiamos otra línea de la codependencia de acuerdo con su relación de pareja, sin tener estos factores de riesgo ya mencionados.
El codependiente pierde el control de su propia vida y de sus propios límites, e invierte toda su energía en el resto de las personas, tiene una gran necesidad de ser útil y paga un precio muy alto por ello. Lo importante es ver que la codependencia es una forma de relación inadecuada, y que se puede modificar una vez que el codependiente acepte la ayuda.
Esta investigación es el primer intento de desarrollar una línea científica en México con características sociodemográficas muy similares para el estudio de la codependencia y su relación con la funcionalidad familiar. Nosotros, como médicos familiares, mediante nuestra propia conciencia, introspección y el conocimiento de los comportamientos, de las características de la codependencia y de la dinámica familiar, podemos facilitar una comunicación más eficaz con el personal de enfermería para promover interacciones y relaciones saludables. Las técnicas para modificar el método de una interacción con los demás tienen un claro potencial de mejora profesional, así como las relaciones personales. Por estos motivos proponemos profundizar en esta misma línea de investigación sobre la codependencia en las mujeres, ya que esto permitiría detectar un problema que puede haber sido negado tanto por las mujeres como por la sociedad en general, y nos ocasiona una disfunción familiar.
FinanciaciónTrabajo financiado por los investigadores del manuscrito.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.
Se agradece al Instituto Mexicano del Seguro Social por permitirnos realizar el estudio en sus instalaciones, y así mismo agradecemos a todas las enfermeras que decidieron participar en nuestro estudio.
Esquema general del estudio.
Disposición de los participantes en el estudio de factores familiares asociados a la codependencia. Número de participantes en estudio, encuestas realizadas y análisis utilizando un diagrama de flujo.
El presente trabajo de investigación ha sido presentado en el XIXForo Sur de Investigación en Salud, del 13 al 15 de junio de 2012, en Cancún, Quintana Roo, México, y también fue presentado en el XXIForo Nacional de Investigación en Salud, del 18 al 21 de septiembre de 2012, en Oaxtepec, Morelos, México.