La irrupción de los materiales protésicos en la reparación de los defectos inguinales ha permitido simplificar las técnicas, conseguir una mayor reproducibilidad y mejorar la comodidad postoperatoria. A pesar de ello, las técnicas de reparación anatómica siguen teniendo vigencia y algunas, como la herniorrafia de Shouldice, pueden competir en los aspectos anteriormente comentados.
Pacientes y métodoEntre 1987 y junio de 2000, 775 pacientes fueron intervenidos quirúrgicamente de hernia inguinal mediante la técnica de Shouldice. Todas las herniorrafias fueron realizadas por el mismo cirujano (J.L. Porrero). Se han analizado la edad, el sexo, la localización de la hernia, la clasificación de Gilbert, los factores de riesgo, el tipo de anestesia, la tolerancia a la anestesia local, las complicaciones postoperatorias, la estancia media, la valoración del dolor, el porcentaje de recidiva y la reincorporación a la actividad social y laboral.
ResultadosLa edad media de los pacientes era de 52 años y el 93% eran varones. En el 83% de casos se realizó anestesia local con sedación; en el 13%, anestesia raquídea y sólo en el 4%, anestesia general. La tolerancia a la anestesia local por parte del paciente fue buena en el 83% y mala en el 7%; la valoración del cirujano fue buena en el 80% y mala en el 7%. Las complicaciones postoperatorias fueron: un 6% de equimosis, un 3% de orquitis, un 1% de atrofia testicular, un 7% de cefaleas y un 8% de retenciones urinarias (siempre asociadas a anestesia raquídea o general). El 20% de los pacientes fueron intervenidos en régimen ambulatorio y el 76% pasó una noche en el hospital. La reincorporación a la actividad laboral se produjo a los 20 días de media y el porcentaje de recidiva a los 7 años de seguimiento medio fue del 2%.
ConclusionesLa herniorrafia de Shouldice con anestesia local sigue siendo una técnica de reparación anatómica válida para el tratamiento de la hernia inguinal.
The greatly increased use of prosthetic materials for the repair of inguinal defects has simplified techniques, achieved greater reproducibility and improved postoperative comfort. Despite this, anatomical repair techniques continue to have a place and some, such as Shouldice herniorrhaphy, can compete with the new materials in the abovementioned features.
Patients and methodBetween 1987 and June 2000, 775 patients underwent surgery for inguinal hernia with Shouldice herniorrhaphy. All herniorrhaphies were performed by the same surgeon (Dr. J.L. Porrero). The following data were evaluated: age, sex, location of the hernia, Gilbert classification, risk factors, type of anesthesia, tolerance to local anesthetic, postoperative complications, mean length of hospital stay, pain assessment, percentage of recurrence, and return to work and social activity.
ResultsThe mean age was 52 years and 93% were male. The anesthetic technique was conscious local sedation in 83% of the patients, spinal anesthesia in 13% and general anesthesia in only 4%. Tolerance to local anesthetic, as rated by patients, was good in 83% and poor in 7%; surgeons rated tolerance as good in 80% of patients and poor in 7%. Postoperative complications were ecchymosis in 6% of the patients, orchitis in 3%, testicular atrophy in 1%, heada- ches in 7% and urinary retention in 8% (always related to spinal or general anesthesia). Twenty percent of the patients underwent surgery on an outpatient basis and 76% spent one night in hospital. Return to work was at 20 days on average and the recurrence rate was 2%, with a mean follow-up of 7 years.
ConclusionsShouldice herniorrhaphy with local anesthesia continues to be a valid anatomical repair technique for the treatment of inguinal hernia.