La resección abdominoperineal del recto con intención curativa, supone una morbilidad de la herida perineal no despreciable. La tasa de complicaciones es considerablemente más alta en pacientes con radioterapia pélvica previa o con neoplasias localmente avanzadas que requieren una resección muy amplia de tejidos perineales. Entre las técnicas quirúrgicas utilizadas con intención de disminuir las complicaciones, llaman la atención las que utilizan colgajos músculocutaneos. Revisamos nuestra experiencia de reconstrucción pélvica tras resección abdominoperineal del recto. Entre el año 2008-2013, 11 pacientes (7 mujeres y 4 hombres) fueron intervenidos en colaboración con el Servicio de Cirugía Plástica y Reconstructiva de nuestro hospital. La patología que presentaban los pacientes fue: adenocarcinoma de recto inferior (5), carcinoma epidermoide de ano (3), carcinoma epidermoide de vulva (1), carcinoma epidermoide de cérvix (1) y rabdomiosarcoma anal (1). El riesgo perioperatorio (P-POSSUM) fue de 72.5% El tiempo quirúrgico medio fue de 7,5 ± 1,5 horas. En 2 pacientes se utilizó colgajos de m. gracilis y en 9 – VRAM (Vertical Rectus Abdominis Muscle flap). La estancia hospitalaria fue de 26 días. 4 pacientes requirieron transfusión intraoperatoria de 1 concentrado de hematíes. 3 pacientes requirieron reintervenciones – 2 por complicaciones (dehiscencia) del colgajo (1 con gracilis y 1 VRAM) y 1 paciente por cuadro obstructivo. No hubo mortalidad perioperatoria. En nuestra experiencia, la reconstrucción pélvica con VRAM es una opción segura y eficaz en los pacientes con necesidad de resección perineal amplia por el hecho de proporcionar un importante volumen de tejido vascularizado para reconstrucción perineal y a la vez rellenar la cavidad pélvica.