Las habilidades de un cirujano como escritor son muchas y muy sofisticadas. Hay que identificar los elementos esenciales de la investigación, aprendiendo como planear y ejecutar la idea y finalmente estructurar y reportar los datos en una manera coherente e inteligible. Todos ellos son elementos críticos para escribir exitosamente y poder publicar. Pero, el escribir un artículo de una investigación es un proceso demandante para el que los cirujanos jóvenes (y a veces los adultos) no están capacitados para realizar. Consiste en muchas tareas complejas y dificultades inevitables que confrontan a todos los investigadores.
Por otro lado, mucho se ha escrito y hablado acerca del bajo nivel de la escritura científica, muchas veces con buena razón. Si una pieza de escritura quirúrgica es difícil de entender, se debe a las deficiencias del autor, no del lector. Una revista, un capítulo de libro o un resumen que es claro, conciso y bien organizado, es fácil de leer. El cirujano que escribe bien, utiliza frases cortas, palabras simples y concretas, palabras de transición (también se llaman "conectores") y todo tiene una secuencia lógica de ideas. La escritura que es clara, concisa y bien organizada no es un accidente. De hecho, es un trabajo duro y deliberado. ¿Cómo es que cirujanos que son tan brillantes en un área son carentes de otras? El escribir es una empresa deliberada que requiere experiencia y atención a la técnica. Los mejores escritores pasan tiempo puliendo sus habilidades de escritura, de la misma manera que han afilado sus habilidades quirúrgicas. Esta habilidad aun es un pre-requisito para los cirujanos académicos. En los tiempos modernos (y quizás siempre) no se puede concebir a un Cirujano habilidosa en su área e incompetente para escribir sus trabajos y sus innovaciones. De hecho, muchas veces la única cosa que se conoce de un Médico es lo que escribe en un artículo. Por esa razón, la escritura debe ser una prioridad. "El escribir es más una habilidad que un talento". Por supuesto, hay a quienes les gusta escribir, hay quienes no. El aprender a escribir, en el segundo caso, se convierte en un problema. A pesar de ello, cualquier Cirujano puede y debe aprender a escribir eficientemente.
La escritura médica o quirúrgica eficiente requiere las mismas cualidades de pensamiento que se necesitan en el resto de las ciencias: lógica, claridad, organización y precisión. La pasión por el nicho de cada quien también ayuda, debido a que la escritura quirúrgica es muy difícil cuando se adolece de dedicación e interés. Cualquier escritura Médica y la quirúrgica, para el caso que nos ocupa, no puede existir o no florecerá sin una determinación intensa para aprender y practicar esta habilidad. Solamente cuando alguien ha experimentado el proceso de hacer su propia investigación (no la de otros) puede inteligiblemente evaluar la investigación de otros. El asunto es que el adentrarse en el mundo de la escritura y de la publicación es un tema desierto en escuelas de Medicina y programas de Residencias Médicas y Quirúrgicas. Se entiende que el individuo se capacita en una carrera y luego en una Especialidad pero, los estándares de certificación y de calidad Profesional exigen puntajes que no solo se pueden lograr con la asistencia a congresos. Es fundamental escribir y publicar: esto se convierte en un dilema y un sufrimiento añadido al Cirujano, que nunca se le dijo y enseñó, debería hacer rutinariamente junto con su práctica Profesional. Ciertamente, el enseñar a colegas jóvenes, residentes y estudiantes como hacerse buenos escritores, elevará eficientemente el campo de la escritura quirúrgica, permitirá conocer los talentos, los trabajos y las innovaciones de otros.
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